Una bomba 'sinf¨ªn' permitir¨¢ descansar a corazones d¨¦biles
Los m¨¦dicos creen que el coraz¨®n podr¨ªa resistir un ataque o una operaci¨®n si se le permitiera descansar un poco. Los investigadores han desarrollado bombas implantables que realicen temporalmente el trabajo del coraz¨®n. Media docena de ellas se encuentran disponibles, la mayor¨ªa en experimentaci¨®n en operaciones cardiacas de alto riesgo.
En una conferencia m¨¦dica celebrada la pasada semana en Reno, el director de trasplantes del Instituto Card¨ªaco de Houston, Howard Freizer, describi¨® los buenos resultados en este campo de un nuevo aparato. Se trata de una bomba sinf¨ªn que puede manejarse desde fuera del coraz¨®n y puede insertarse mediante una sencilla operaci¨®n de veinte minutos.Frazier prob¨® el aparato el mes pasado en un paciente que se encontraba a las puertas de la muerte despu¨¦s de someterse a un trasplante. Haciendo una incisi¨®n en el costado del paciente, se introduce un conducto de unos 18 cent¨ªmetros compuesto por un tubo que conecta una minibomba entre las arterias del Paciente y su ventr¨ªculo izquierdo.
La bomba de acero lleva un sinf¨ªn conectado a un motor situado en el exterior del paciente. El aparato gira 25 vueltas por minuto, cuatro veces, m¨¢s r¨¢pido que un motor deportivo- y transporta la sangre del ventr¨ªculo por dentro de la aorta al resto del cuerpo.
Inspiraci¨®n egipcia
En pocos d¨ªas la condici¨®n del paciente mejor¨® y su coraz¨®n trasplantado comenz¨® a funcionar por s¨ª s¨®lo. Este dram¨¢tico caso ha se?alado el deb¨² del Hemopump (bomba de sangre), un invento experimental de 0.63 cent¨ªmetros de ancho y 1.27 de largo, fabricado por la compa?¨ªa Nimbus Medial de Rancho Cordova, California. Un segundo paciente al que se le aplic¨® la bomba muri¨®, pero la causa no se atribuye al fracaso del invento.Allan Lansing, director del Instituto Internacional del Coraz¨®n Humana en Louisville, espera hacer m¨¢s pruebas con el Hemopump que ha sido homologada por la Oficina de Alimentaci¨®n y Drogas norteamericana el pasado marzo. "Estoy impresionado", dice Lansing. Si esto funciona puede proporcionar enormes beneficios a muchos pacientes". Eventualmente, podr¨ªa ser ¨²til en las unidades de vigilancia coronaria para tratar los ataques de coraz¨®n en el momento de producirse.
El inventor de la bomba es Richard Wampler, de 39 a?os, un f¨ªsico californiano que se inspir¨® en las bombas artesanas que vi¨® hace diez a?os en Egipto. Una bomba sinf¨ªn que permita el fluido sangu¨ªneo constante lo m¨¢s parecido a la circulaci¨®n sangu¨ªnea natural que funciona por impulsos, se ha intentado reproducir en muchas ocasiones sin ¨¦xito.
Algunos investigadores tem¨ªan que el impacto de las membranas que impulsan la sangre podr¨ªan destruir las c¨¦lulas de la sangre o que el cuerpo ser¨ªa incapaz de tolerar el flujo continuo de sangre. Otro problema que presenta este aparato es que sea lo suficientemente peque?o como para poder ser implantado en mujeres y ni?os que posean arterias estrechas. Si el invento funciona en pr¨®ximos experimentos, se estima que podr¨¢ aplicarse a 150.000 personas al a?o. A 336.000 pesetas la unidad, ser¨ªa una ganga en el sofisticado mundo de la tecnolog¨ªa m¨¦dica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.