Suenan los primeros nombres de posibles triunfadores
Pasado el ecuador del festival y visto el poco inter¨¦s que despertaron las pel¨ªculas de ayer, los miles de profesionales e informadores cinematogr¨¢ficos acreditados en La Croisette dedicaron su tiempo a la pasi¨®n festivalera por excelencia: hacer apuestas y quinielas de triunfadores en la noche del d¨ªa 23. Estas prospecciones, por lo general muy arbitrarias, tienen la virtud de descubrir denominadores comunes sobre el desarrollo del festival y sobre la calidad, o la falta de ella, de nombres y t¨ªtulos que se consideran aptos para alguno de los premios finales.
Hay un temor bastante extendido a lo que aqu¨ª se llama la pialatada: neologismo derivado del apellido del cineasta franc¨¦s Maurice Pialat, ganador el a?o pasado no por haber concursado con una buena pel¨ªcula, sino por el color azul franc¨¦s de su pasaporte.La pialatada tiene este a?o otro nombre: el de chocolatada, derivado del t¨ªtulo del filme franc¨¦s Chocolate, al que muchos medios de comunicaci¨®n galos, comenzando por las cadenas de televisi¨®n, se empe?an con interesada insistencia en considerar el favorito, trat¨¢ndose de una pel¨ªcula menor, de cortos alcances, que nada aporta al cine y que, para colmo, trata con conformismo el espinoso asunto del colonialismo.
Pues bien, si Ettore Scola, presidente del jurado, y los miembros de ¨¦ste no lo remedian, entra dentro de lo posible que este a?o tengamos en Cannes otra pialatada. No hay mucho donde elegir, pero esta insignificante pel¨ªcula tiene rivales de mucha mayor entidad de ella, como la polaca No matar¨¢s, la china El rey de los ni?os y, aunque este cronista no comparte la apreciaci¨®n, la argentina Sur, que es la segunda clasificada, despu¨¦s de Chocolate, en las puntuaciones del ¨®rgano de la industria cinematogr¨¢fica francesa Le Film Fran?ais.
En cuanto a nombres, no se baraja todav¨ªa el de ning¨²n director indiscutible, pero s¨ª se habla de algunos actores, como el italiano Gian Maria Volont¨¦, la francesa Fanny Ardant, el brit¨¢nico Ben Kingsley y, sin haberse visto todav¨ªa sus interpretaciones, el austriaco Claus Maria Brandauer y el espa?ol Imanol Arias, a causa de su Lute.
Se trata de puras conjeturas que, no obstante, tienen cierto poder indicador: hasta ahora hay muy poco bueno con lo que llenar la lista de premios y s¨®lo quedan cinco jornadas para el final. A no ser que surja en ellas una sorpresa, esa revelaci¨®n de un nuevo Fellini con que sue?a el delegado general de Cannes 88, Gilles Jacob, se va a quedar en sue?o decepcionante, es decir, en pesadilla.
Ayer se present¨® la segunda pel¨ªcula estadounidense a concurso, Miles from home. Su director, Gary Sinise, y su protagonista, Richard Gere, est¨¢n aqu¨ª defendi¨¦ndola. Ingrata tarea la suya, pues se trata de un filme literalmente indefendible. Mejor, aunque sin superar la median¨ªa, es la rareza que nos han enviadodesde los ant¨ªpodas de Nueva Zelanda titulada El navegante. El filme est¨¢ dirigido por Vincent War, que contiene una idea argumental original¨ªsima, pero por desgracia no bien aprovechada ni llevada a sus ¨²ltimas consecuencias.
Mientras tanto, se sigue haciendo pol¨ªtica: Ripa di Meana, responsable de Cultura de la Comunidad Europea, anunci¨® las primeras medidas concretas tomadas en Bruselas dentro del A?o Europeo del Cine y la Televisi¨®n. Son ¨¦stas: adelantos para estimular la distribuci¨®n de filmes europeos; agrupamiento de unos doscientos productores independientes europeos; creaci¨®n en Madrid, en junio pr¨®ximo, de un centro de inversores en nuevas tecnolog¨ªas audiovisuales, y el comienzo en B¨¦lgica de un ciclo de formaci¨®n econ¨®mica, comercial y t¨¦cnica para empresarios audiovisuales.
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