Reformas en la URSS
DESPU?S DEL gran espect¨¢culo de la cumbre entre Reagan y Gorbachov, la vida p¨²blica de Mosc¨² vuelve a centrarse ahora en la preparaci¨®n de la conferencia del partido comunista, cuya apertura est¨¢ fijada para el 28 de este mes. La misma convocatoria es ya un hecho excepcional, ya que desde 1941 no se ha celebrado ninguna conferencia del partido. El dirigente sovi¨¦tico ha recurrido a una reuni¨®n de tal naturaleza para superar las resistencias que encontr¨® en el com¨ªt¨¦ central a sus propuestas de democratizaci¨®n del partido. En el curso del ¨²ltimo a?o, la presi¨®n de la sociedad en favor de la perestroika ha crecido considerablemente. En los dos ¨²ltimos meses, la plataforma conservadora publicada en el peri¨®dico Sovietskaia Rossia dio lugar a una contundente respuesta de los reformadores, que en la ¨²ltima sesi¨®n del Comit¨¦ Central han hecho aprobar unas tesis -que ser¨¢n la base de discusi¨®n de la conferencia- con un contenido general claramente renovador.Sus puntos m¨¢s significativos se refieren a la reforma pol¨ªtica, en un doble sentido: la democratizaci¨®n del partido y la modificaci¨®n del sistema institucional. La novedad m¨¢s sorprendente es la definici¨®n de "Estado socialista de derecho" para designar al Estado que la perestroika deber¨¢ construir. Es la primera vez que el concepto de Estado de derecho es utilizado en un sentido positivo. Cuando revis¨¦ el concepto de dictadura del proletariado, Jruschov s¨®lo hab¨ªa llegado a hablar de "dictadura de todo el pueblo". Ahora el cambio es mucho m¨¢s radical. Las tesis explicitan que el Estado de derecho implica primac¨ªa de la ley, obligaci¨®n para el Gobierno de rendir cuentas ante los y jur¨ªdicas" para que puedan materializarse las libertades constitucionales de palabra, prensa, reuni¨®n, manifestaci¨®n callejera y conciencia y el fortalecimiento de derechos individuales de los ciudadanos tales como la inviolabilidad de la persona y del domicilio, el secreto de la correspondencia y de las conversaciones telef¨®nicas.
En lo referente al funcionamiento del partido, las tesis apuntan hacia un cambio esencial: que el ejercicio de cargos dirigentes no se convierta en una profesi¨®n. Las elecciones se har¨¢n con varias candidaturas y voto secreto. Se introduce el principio de rotaci¨®n en los cargos, incluidos los m¨¢s elevados: una persona no podr¨¢ permanecer m¨¢s de 10 a?os en su cargo. Contrariamente a la regla b¨¢sica del sistema sovi¨¦tico actual, el partido deber¨¢ apartarse de la gobernaci¨®n directa del pa¨ªs y no podr¨¢ suplantar a los ¨®rganos del Estado. Todo esto, aplicado de modo efectivo, equivaldr¨ªa al fin de la nomenklatura.
Los problemas hist¨®ricos conflictivos ocupan escaso espacio en las tesis, pero ¨¦stas dan una visi¨®n global de la trayectoria de la URSS que rompe dogmas sagrados hasta hace poco. El partido funcion¨® de manera positiva mientras Lenin vivi¨®, o sea unos seis a?os de poder sovi¨¦tico. La degeneraci¨®n comienza desde su muerte y dura hasta el inicio de la perestroika. Las tesis van as¨ª m¨¢s lejos que una condena de los cr¨ªmenes o injusticias del estalinismo u otros per¨ªodos. Ponen en entredicho la acci¨®n del partido, y, por tanto, el valor de la pol¨ªtica aplicada durante gran parte de la historia de la URSS.
La tendencia renovadora de las tesis se detiene ante una frontera: la existencia exclusiva del partido comunista. Hasta qu¨¦ punto ello va a entrar en contradicci¨®n con un pluralismo que se expresa ya en la sociedad mediante clubes, revistas, grupos de discusi¨®n, etc¨¦tera, es uno de los problemas del futuro. Quedan en las tesis, por otra parte, residuos dogm¨¢ticos y ciertos aspectos confusos que han ayudado a su aceptaci¨®n por los sectores del comit¨¦ central poco amigos de la perestroika. Existe adem¨¢s el peligro de que los nuevos principios, incluso una vez aprobados, queden aguados en su aplicaci¨®n. Mucho va a depender de la correlaci¨®n de fuerzas en la conferencia misma, y en ese orden hay noticias muy preocupantes de maniobras de comit¨¦s del partido para impedir que los reformadores m¨¢s activos sean elegidos como delegados.
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