Las exigencias de la 'contra' abortan la paz en Nicaragua
La demanda de la contra de una inmediata liberaci¨®n de todos los presos pol¨ªticos, junt¨® a otras exigencias que exceden lo negociado hasta ahora entre el Gobierno sandinista y la Resistencia Nicarag¨¹ense (RN), abort¨® el jueves a ¨²ltima hora (madrugada de ayer en Espa?a) un acuerdo de alto el fuego, definitivo en Nicaragua, cuando ¨¦ste parec¨ªa m¨¢s cerca que nunca. "Seguiremos defendiendo la bandera de la paz en el campo de batalla", afirm¨® el ministro de Defensa nicarag¨¹ense, general Humberto Ortega, despu¨¦s de que la delegaci¨®n de la RN rechazase una propuesta de calendario con gran parte de las posiciones sostenidas hasta ahora por los reheldes.
RN anunci¨® con "consternaci¨®n" la imposibilidad de obtener un acuerdo, pero asegur¨® que sus tropas no iniciar¨¢n las operaciones militares ofensivas.Las dos delegaciones ni siquiera consiguieron ponerse de acuerdo sobre la convocatoria de una pr¨®xima reuni¨®n, que queda en el aire. Uno de los observadores de estas conversaciones, el secretario general de la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA), Jo?o Baena Soares, dijo que no pod¨ªa sentirse optimista pero confi¨® en que el proceso negociador no se interrumpa.
El dirigente socialdem¨®crata alem¨¢n occidental, Hans Joergen Wischewski, que participa como asesor de la delegaci¨®n del Gobierno de Managua se?al¨® que jam¨¢s en toda su experiencia negociadora -tom¨® parte, entre otras, en las conversaciones entre el Gobierno franc¨¦s y el Frente de Liberaci¨®n Nacional argelino-, hab¨ªa conocido gente menos seria que la contra.
Reacci¨®n de la Casa Blanca
[La Casa Blanca culp¨® ayer al Gobierno sandinista por el fracaso de las conversaciones de paz y se?al¨® que una nueva ayuda militar a la contra contiunuaba siendo una posibilidad", informa Reuterl.
Cuando se frustaron las negociaciones de paz, ya hab¨ªan sido negociados todos los puntos necesarios para un acuerdo. El Gobierno sandinistas ya hab¨ªa aceptado las condiciones exigidas para que en Nicaragua sea instalado un r¨¦gimen democr¨¢tico. Ya hab¨ªa sobre la mesa un calendario en el que la contra s¨®lo tendr¨ªa que entregar las armas despu¨¦s de que los presos hubiesen sido liberados y las reformas pol¨ªticas concertadas y fijadas. Ya estaba todo pendiente de colocar la firma sobre un papel, cuando los representantes de RN sacaron una nueva propuesta cuyo cuerpo central es el cumplimiento en cinco d¨ªas de una amnist¨ªa general, la apertura de canales privados de televisi¨®n, la suspensi¨®n del reclutan¨²ento militar y el inmediato abastecimiento a las fuerzas de la contra.
Esta propuesta incluye demandas como la autorizaci¨®n para la apertura de oficinas de RN en el plazo de 10 d¨ªas, la aplicaci¨®n de las medidas que garanticen la separaci¨®n del Ej¨¦rcito de la vida pol¨ªtica en el plazo de 30 d¨ªas, la reforma de la ley de partidos pol¨ªticos en 40 d¨ªas, la promulgaci¨®n de una nueva ley electoral en el mismo plazo, la renuncia de todos los magistrados de la Corte Suprema en 50 d¨ªas, la devoluci¨®n de propiedades a los miembros de RN en el mismo plazo, y la vuelta a su casa, tambi¨¦n en 50 d¨ªas, de los reclutas del servicio militar.
Entre los contrasentidos de esta propuesta destaca el hecho de que se den plazos tan cortos para medidas de tal envergadura, mientras la contra se toma hasta el pr¨®ximo 31 de enero para efectuar el desarme de sus tropas.
Di¨¢logo nacional
La, mayor¨ªa de las demandas de mocratiz adoras hab¨ªan sido ya aceptadas por el Gobierno, pero ¨¦ste ped¨ªa que su entrada en vigor se decidiese en un di¨¢logo nacional de 60 d¨ªas de duraci¨®n en el que participasen todos los partidos legales y ocho representantes de la Resistencia Nicarag¨²ense.
Para el general Humberto Ortega, esta nueva propuesta significa "una victoria del sector guerrerista de la Administraci¨®n norteamericana representado por el coronel Enrique Berm¨²dez" y quiere decir tambi¨¦n, en su oponi¨®n, que "Alfredo'C¨¦sar ha dejado de estar en una posici¨®n vacilante para plegarse a esa tendencia". Ortega aprovech¨® el clima de tensi¨®n producido por esta ruptura inesperada para anunciar que Alfredo C¨¦sar llevaba varios meses manteniendo contactos secretos con el Gobierno.
Seg¨²n el general Ortega, C¨¦sar se reuni¨® varias veces con el abogado norteamericano Paul Richler, que forma parte de la delegaci¨®n del Gobierno, para preparar un acuerdo de paz. En la ¨²ltima ronda de di¨¢logo celebrada en Managua el 29 de abril, el dirigente de RN se entrevist¨® en secreto con el propio general Ortega. En esos contactos C¨¦sar afirm¨® que contaba ya con el visto bueno de tres miembros del directorio de RN para la firma de un acuerdo. C¨¦sar ha confirmado esos contactos pero niega que fuesen a espaldas del directorio.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Humberto Ortega Saavedra
- Contra nicarag¨¹ense
- Declaraciones prensa
- Presos pol¨ªticos
- Revoluci¨®n Sandinista
- Nicaragua
- Panam¨¢
- Represi¨®n pol¨ªtica
- Centroam¨¦rica
- Estados Unidos
- Revoluciones
- Guerrillas
- Conflictos pol¨ªticos
- Pol¨ªtica exterior
- Partidos pol¨ªticos
- Gente
- Gobierno
- Historia contempor¨¢nea
- Defensa
- Guerra
- Administraci¨®n Estado
- Conflictos
- Historia
- Am¨¦rica
- Pol¨ªtica