Lodos policiales

CADA PASO que recorre la justicia en la investigaci¨®n de los casos Amedo y el Nani constituye un triunfo del Estado democr¨¢tico al tiempo que una denuncia inapelable de los graves errores de la pol¨ªtica policial del Gobierno. La orden judicial de arresto dictada en Francia contra el subcomisario de polic¨ªa Jos¨¦ Amedo por su supuesta complicidad en acciones criminales de los Grupos Antiterroristas de Liberaci¨®n (GAL) y la investigaci¨®n que la Audiencia Nacional efect¨²a en Espa?a sobre estos mismos hechos muestran la determinaci¨®n de los jueces de ambos pa¨ªses por aclarar las sospechas que apuntan a una relaci¨®n de este siniestro grupo con el aparato del Estado. Otro tanto puede decirse de la iniciativa judicial de rastrear el pantano donde, seg¨²n afirma un testigo, fue arrojado el cad¨¢ver del Nani.Frente a la determinaci¨®n judicial por llegar a la verdad destaca la inacci¨®n -si es que no se puede hablar incluso de obstrucci¨®nde la que han hecho gala los responsables del Ministerio del Interior. Los testimonios prestados por el ministro Barrionuevo y por el secretario de Estado Rafael Vera ante el tribunal que juzga a los responsables de la desaparici¨®n del Nani, as¨ª como la confesi¨®n p¨²blica del director general de la Polic¨ªa, Jos¨¦ Mar¨ªa Rodr¨ªguez Colorado, de que los viajes hechos por el comisario Amedo a Lisboa para contratar matones de los GAL -seg¨²n consta en las instrucciones judiciales abiertas en Portugal y Francia- fueron hechos con fondos reservados del ministerio, constituyen una burla a los tribunales y una ofensa a quienes creen en la justicia. Como lo es tambi¨¦n que el citado polic¨ªa siga en su puesto y no se hayan adoptado contra su persona elementales medidas de car¨¢cter cautelar.

Si hoy es posible que resplandezca la verdad en el caso el Nani, se debe exclusivamente a la intrepidez de un juez de instrucci¨®n y a su decisi¨®n de encomendar el desarrollo de la investigaci¨®n -a falta de una verdadera polic¨ªa judicial dependiente de los tribunales- a los servicios de la Guardia Civil. En relaci¨®n con Amedo, ha quedado patente la tendencia apenas disimulada de las autoridades espa?olas a ampararse en la presunci¨®n de inocencia a la que tiene derecho todo ciudadano -y de la que no se benefici¨® el Nani- para defender la impunidad de un funcionario policial al que muchos se preguntan si no se le protege porque tiene mucho que contar. Los cr¨ªmenes atribuidos a los GAL por la justicia francesa, y en relaci¨®n con los cuales es ahora inculpado el polic¨ªa Amedo, se produjeron tres a?os y medio despu¨¦s de que el PSOE hubiera llegado al poder.

En la dial¨¦ctica entre eficacia y extrema legalidad en la actuaci¨®n policial, los socialistas en el poder se han ido inclinando progresiva y peligrosamente por la primera. El precio pagado ha sido demasiado alto para un resultado no excesivamente brillante. Las mejoras en la lucha antiterrorista se han producido sobre todo por la colaboraci¨®n internacional, pero el terrorismo contin¨²a extendiendo su amenaza, la inseguridad ciudadana sigue en aumento y en su conjunto toda la pol¨ªtica de orden p¨²blico es un lamentable fracaso. Por si fuera poco, los polvos de aquella pretendida eficacia a toda costa han tra¨ªdo los lodos del Nani y Amedo. ?Hasta cu¨¢ndo?