El FBI investiga sobornos masivos a funcionarios del Pent¨¢gono
Las m¨¢s Importantes empresas de armamento del pa¨ªs, altos funcionarios del Pent¨¢gono de las tres armas y ex miembros del Departamento de Defensa pueden estar implicados en este importante caso de corrupci¨®n, que implica sobornos de los contrat¨ªstas militares a funcionarios para obtener informaci¨®n secreta y conseguir as¨ª contratos de cientos de millones de d¨®lares.Ronald Reagan y el secretario de Defensa, Frank Carlucci, no fueron informados de la investigaci¨®n -iniciada hace dos a?os- hasta esta semana, para evitar filtraciones.
Tampoco sab¨ªa nada Caspar Weinberger, el hombre que dirigi¨® el Pent¨¢gono durante el intenso per¨ªodo de rearme de Reagan. Y el ministro de Justicia, Edwin Meese, s¨®lo lo supo en marzo porque su nombre apareci¨® en una de las escuchas secretas a las que ha sometido el FBI a los sospechosos.Pero no hay pruebas de ilegalidad que impliquen a Meese, sujeto a una investigaci¨®n ¨¦tica por un juez especial. El presidente ha pedido que "no se deje ninguna piedra sin remover" y que la investigaci¨®n sea exhaustiva y se complete cuanto antes.
Se espera que el fiscal solicite a un. gran jurado procesamientos antes de que acabe el verano. Coincidir¨ªa con el ¨²ltimo tramo de la campa?a electoral y, si la amplitud del fraude se confirma, afectar¨¢ negativamente a esta Administraci¨®n y al vicepresidente George Bush, que aspira a suceder a Reagan.
El presidente se reuni¨® ayer con Bush, el ministro de Justicia y el director del FBI, William Sessions, para ser informado del caso, que, seg¨²n el portavoz presidencial, "presenta un problema de grandes dimensiones para la seguridad interna del Pent¨¢gono". No es normal que Reagan intervenga en un caso de ¨¦stos antes de concluirse la investigaci¨®n, pero su importancia lo justifica, explic¨® la Casa Blanca. M¨¢s de 200 citaciones judiciales han sido enviadas a otros tantos implicados en el esc¨¢ndalo, seg¨²n la agencia Reuters.
El masivo fraude, en el que funcionarios responsables de la adjudicaci¨®n de contratos se embolsaban comisiones ilegales de contratistas militares y consultores de defensa a cambio de informaci¨®n confidencial que les ayudaba a obtener contratos del Pent¨¢gono, ha ca¨ªdo como una bomba en Washington.
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15 empresas, implicadas en los presuntos sobornos
Viene de la primera p¨¢ginaEl esc¨¢ndalo estall¨® el martes, cuando el FBI, con mandamientos judiciales, realiz¨® seis registros en las oficinas y domicilios de funcionarios y ex funcionarios del Pent¨¢gono, y otros registros en 38 oficinas y domicilios en 12 Estados.
Empresas fabricantes de los sistemas de armas m¨¢s modernos con que cuenta EE UU, como Northrop Corporation, McDonnell Douglas -fabricante del F-18-, United Technologies y Unisys, han sido investigadas.
Hasta ahora no se han producido detenciones, y fuentes judiciales conf¨ªan en que los sospechosos, a cambio de inmunidad o negociar sus eventuales condenas, implicar¨¢n a peces m¨¢s gordos en el Pent¨¢gono y a ejecutivos de las empresas de defensa.
El FBI, junto con los Servicios de Investigaci¨®n de la Marina (NIS), hab¨ªan pinchado en secreto tel¨¦fonos de funcionarios del Pent¨¢gono responsables de la adquisici¨®n de armamento. Las tentaciones de corrupci¨®n en este sistema se entienden muy bien cuando se sabe que durante los ocho a?os de la presidencia de Reagan el Pent¨¢gono ha manejado 2,2 billones de d¨®lares.
A punto de concluir
El senador republicano John Warner, ex secretario de la Marina, sin darse cuenta de que su micr¨®fono estaba abierto, confirm¨® el mi¨¦rcoles en el Congreso que hay 15 empresas de defensa implicadas. "Hay una corrupci¨®n generalizada en el Gobierno. En algunos casos [consultores privados], les pagaban 500 o 1.000 d¨®lares a funcionarios para lograr informaci¨®n, que luego vend¨ªan [a los contratistas militares] por 40.000 o 50.000. Les compraban coches, les pagaban sus cuentas". Otras fuentes hablan de sobornos en forma de cuadros y garant¨ªas de empleos futuros en el sector privado.
"La investigaci¨®n est¨¢ a punto de concluir", dijo ayer el director del FBI. Hasta ahora, s¨®lo han saltado dos nombres le altos cargos como presuntos implicados: V¨ªctor Cohen, ayudante del secretario adjunto de a Fuerza A¨¦rea, y James Gaines, secretario adjunto de la Marina para adquisici¨®n de material, apoyo en el Congreso programas internacionales.
Cohen trabaj¨® para la Northrop desde 1978 hasta que, en 1980, ingres¨® en la Fuerza A¨¦rea. Las oficinas de Cohen y Gaines en el Pent¨¢gono fueron registradas el martes y selladas Ayer, un marine custodiaba ambos despachos.
Registro de oficinas
Otro personaje importante in vestigado es Melvyn Paisley secretario adjunto de la Marina desde 1981 hasta 1987. Era el brazo derecho del ministro de Marina, John Lehman, amigo de George Bush, y de quien se ha rumoreado que podr¨ªa ser secretario de Defensa con Bush si gana las elecciones presidenciales de noviembre. Paisley ahora trabaja como consultor de la McDonnell Douglas.
La orden de registro de las oficinas de esta compa?¨ªa en Saint Louis ec¨ªa que Paisley hab¨ªa suministrado a la empresa informaci¨®n secreta de los contratos de los cazabombarderos F-18A de la Marina, que la McDonnell est¨¢ tratando de vender a Suiza, Francia y Corea del Sur.
Espa?a compr¨® tambi¨¦n 72 unidades del modelo F-18, del que se han entregado un tercio de los aparatos.
Los investigadores est¨¢n revisando miles de documentos obtenidos en los registros por sorpresa efectuados en todo el pa¨ªs el martes. La investigaci¨®n comenz¨® en 1986, con un soplo de un empleado de la Marina que trabajaba en adquisici¨®n de armamento, que, disgustado por algunas cosas que vio, acudi¨® a contarlo a los servicios de investigaci¨®n de la Navy.
El FBI investiga sobornos masivos a funcionarios del Pent¨¢gono
Las m¨¢s Importantes empresas de armamento del pa¨ªs, altos funcionarios del Pent¨¢gono de las tres armas y ex miembros del Departamento de Defensa pueden estar implicados en este importante caso de corrupci¨®n, que implica sobornos de los contrat¨ªstas militares a funcionarios para obtener informaci¨®n secreta y conseguir as¨ª contratos de cientos de millones de d¨®lares.Ronald Reagan y el secretario de Defensa, Frank Carlucci, no fueron informados de la investigaci¨®n -iniciada hace dos a?os- hasta esta semana, para evitar filtraciones.
Tampoco sab¨ªa nada Caspar Weinberger, el hombre que dirigi¨® el Pent¨¢gono durante el intenso per¨ªodo de rearme de Reagan. Y el ministro de Justicia, Edwin Meese, s¨®lo lo supo en marzo porque su nombre apareci¨® en una de las escuchas secretas a las que ha sometido el FBI a los sospechosos.Pero no hay pruebas de ilegalidad que impliquen a Meese, sujeto a una investigaci¨®n ¨¦tica por un juez especial. El presidente ha pedido que "no se deje ninguna piedra sin remover" y que la investigaci¨®n sea exhaustiva y se complete cuanto antes.
Se espera que el fiscal solicite a un. gran jurado procesamientos antes de que acabe el verano. Coincidir¨ªa con el ¨²ltimo tramo de la campa?a electoral y, si la amplitud del fraude se confirma, afectar¨¢ negativamente a esta Administraci¨®n y al vicepresidente George Bush, que aspira a suceder a Reagan.
El presidente se reuni¨® ayer con Bush, el ministro de Justicia y el director del FBI, William Sessions, para ser informado del caso, que, seg¨²n el portavoz presidencial, "presenta un problema de grandes dimensiones para la seguridad interna del Pent¨¢gono". No es normal que Reagan intervenga en un caso de ¨¦stos antes de concluirse la investigaci¨®n, pero su importancia lo justifica, explic¨® la Casa Blanca. M¨¢s de 200 citaciones judiciales han sido enviadas a otros tantos implicados en el esc¨¢ndalo, seg¨²n la agencia Reuters.
El masivo fraude, en el que funcionarios responsables de la adjudicaci¨®n de contratos se embolsaban comisiones ilegales de contratistas militares y consultores de defensa a cambio de informaci¨®n confidencial que les ayudaba a obtener contratos del Pent¨¢gono, ha ca¨ªdo como una bomba en Washington. Pasa a la p¨¢gina 3
15 empresas, implicadas en los presuntos sobornos
Viene de la primera p¨¢ginaEl esc¨¢ndalo estall¨® el martes, cuando el FBI, con mandamientos judiciales, realiz¨® seis registros en las oficinas y domicilios de funcionarios y ex funcionarios del Pent¨¢gono, y otros registros en 38 oficinas y domicilios en 12 Estados.
Empresas fabricantes de los sistemas de armas m¨¢s modernos con que cuenta EE UU, como Northrop Corporation, McDonnell Douglas -fabricante del F-18-, United Technologies y Unisys, han sido investigadas.
Hasta ahora no se han producido detenciones, y fuentes judiciales conf¨ªan en que los sospechosos, a cambio de inmunidad o negociar sus eventuales condenas, implicar¨¢n a peces m¨¢s gordos en el Pent¨¢gono y a ejecutivos de las empresas de defensa.
El FBI, junto con los Servicios de Investigaci¨®n de la Marina (NIS), hab¨ªan pinchado en secreto tel¨¦fonos de funcionarios del Pent¨¢gono responsables de la adquisici¨®n de armamento. Las tentaciones de corrupci¨®n en este sistema se entienden muy bien cuando se sabe que durante los ocho a?os de la presidencia de Reagan el Pent¨¢gono ha manejado 2,2 billones de d¨®lares.
A punto de concluir
El senador republicano John Warner, ex secretario de la Marina, sin darse cuenta de que su micr¨®fono estaba abierto, confirm¨® el mi¨¦rcoles en el Congreso que hay 15 empresas de defensa implicadas. "Hay una corrupci¨®n generalizada en el Gobierno. En algunos casos [consultores privados], les pagaban 500 o 1.000 d¨®lares a funcionarios para lograr informaci¨®n, que luego vend¨ªan [a los contratistas militares] por 40.000 o 50.000. Les compraban coches, les pagaban sus cuentas". Otras fuentes hablan de sobornos en forma de cuadros y garant¨ªas de empleos futuros en el sector privado.
"La investigaci¨®n est¨¢ a punto de concluir", dijo ayer el director del FBI. Hasta ahora, s¨®lo han saltado dos nombres le altos cargos como presuntos implicados: V¨ªctor Cohen, ayudante del secretario adjunto de a Fuerza A¨¦rea, y James Gaines, secretario adjunto de la Marina para adquisici¨®n de material, apoyo en el Congreso programas internacionales.
Cohen trabaj¨® para la Northrop desde 1978 hasta que, en 1980, ingres¨® en la Fuerza A¨¦rea. Las oficinas de Cohen y Gaines en el Pent¨¢gono fueron registradas el martes y selladas Ayer, un marine custodiaba ambos despachos.
Registro de oficinas
Otro personaje importante in vestigado es Melvyn Paisley secretario adjunto de la Marina desde 1981 hasta 1987. Era el brazo derecho del ministro de Marina, John Lehman, amigo de George Bush, y de quien se ha rumoreado que podr¨ªa ser secretario de Defensa con Bush si gana las elecciones presidenciales de noviembre. Paisley ahora trabaja como consultor de la McDonnell Douglas.
La orden de registro de las oficinas de esta compa?¨ªa en Saint Louis ec¨ªa que Paisley hab¨ªa suministrado a la empresa informaci¨®n secreta de los contratos de los cazabombarderos F-18A de la Marina, que la McDonnell est¨¢ tratando de vender a Suiza, Francia y Corea del Sur.
Espa?a compr¨® tambi¨¦n 72 unidades del modelo F-18, del que se han entregado un tercio de los aparatos.
Los investigadores est¨¢n revisando miles de documentos obtenidos en los registros por sorpresa efectuados en todo el pa¨ªs el martes. La investigaci¨®n comenz¨® en 1986, con un soplo de un empleado de la Marina que trabajaba en adquisici¨®n de armamento, que, disgustado por algunas cosas que vio, acudi¨® a contarlo a los servicios de investigaci¨®n de la Navy.
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