Los Reyes terminan su visita de 14 d¨ªas a Ocean¨ªa

Los Reyes de Espa?a ponen hoy fin a su visita oficial de 14 d¨ªas a Ocean¨ªa, que ha incluido estancias en Australia y Nueva Zelanda. Don Juan Carlos y do?a Sofia parten hoy de Auckland a las tres de la tarde (una de la madrugada, hora espa?ola), y tras ganar un d¨ªa horario con el paso de la l¨ªnea internacional del cambio de fecha, har¨¢n una escala de 24 horas en Honolul¨². Concluye as¨ª un viaje que ha supuesto literalmente una vuelta al mundo, y en el que un jefe de Estado espa?ol ha visitado esta zona del Pac¨ªfico sur por primera vez en la historia.

La vuelta al mundo en 14 d¨ªas de don Juan Carlos y do?a Sof¨ªa habr¨¢ supuesto, cuando los Reyes lleguen a Madrid, a media tarde del viernes, un recorrido de unos 45.000 kil¨®metros, con escalas en 6 pa¨ªses y 11 ciudades, incluyendo Montreal (Canad¨¢), donde el Boeing 707 real repostar¨¢ a primera hora del viernes. Se trata, sin duda, del desplazamiento oficial m¨¢s largo que hayan realizado jam¨¢s.Los Reyes apuraron hasta ¨²ltima hora su visita oficial a Nueva Zelanda, pese a la evidente falta de contenido de la misma y a los esfuerzos de las autoridades neozelandesas -que pidieron que la estancia se prolongase por espacio de "no menos de tres d¨ªas"- por llenar el programa.

Ayer, don Juan Carlos y do?a Sof¨ªa se desplazaron a la isla Sur, y en Christchurch visitaron el Museo Ant¨¢rtico y el Ayuntamiento. Una recepci¨®n cordial, pero falta de calor popular -como viene siendo tradicional en este viaje y como es costumbre en este pa¨ªs-, caracteriz¨® la jornada en Christchurch.

Los Reyes cenaron nuevamente ayer con el primer ministro, David Lange, y con el gobernador general y representante de la Reina de Inglaterra, sir Paul Reeves. Lange, que visitar¨¢ Madrid a fines de septiembre, pidi¨® ayuda a Espa?a para que apoye una liberalizaci¨®n aduanera para los productos neozelandeses ante la CE.

Las escasas relaciones pol¨ªticas y econ¨®micas entre Espa?a y Nueva Zelanda convirtieron el viaje de los Reyes en una visita amable, m¨¢s de presencia que otra cosa, seg¨²n admitieron fuentes del s¨¦quito real. La visita de una delegaci¨®n empresarial paralela, que se entrevist¨® con empresarios australianos y neozelandeses, podr¨ªa, acaso, dar resultados a medio plazo, seg¨²n fuentes de la propia delegaci¨®n, presidida por Adri¨¢n Piera, presidente del Consejo Superior de C¨¢maras de Comercio, e integrada por una decena de representantes de empresas privadas y p¨²blicas. Sin embargo, admitieron estas fuentes, los resultados, hoy por hoy, "no son tangibles".

Nueva Zelanda, sin la capacidad de crecimiento de Australia, poco podr¨ªa llegar a importar de nuestro pa¨ªs, aunque sus relaciones econ¨®micas sigan orientadas hacia la CE, y, fundamentalmente, hacia el Reino Unido. Pero, seg¨²n explicaron fuentes diplom¨¢ticas del s¨¦quito de los Reyes, las especiales relaciones de vecindad entre este pa¨ªs y Australia, as¨ª como la actitud neozelandesa en el Pac¨ªfico sur, con posiciones fuertemente independientes con respecto a Estados Unidos, obligaban a una prolongaci¨®n del viaje a Nueva Zelanda.

El viaje de los Reyes tuvo tambi¨¦n como consecuencia el compromiso australiano para participar en la Exposici¨®n

Universal de Sevilla en 1992 -don Juan Carlos es uno de los principales abanderados de una extensi¨®n verdaderamente universal de la Expo, un tema siempre presente en sus encuentros con otros estadistas-, aunque Nueva Zelanda no ha adquirido un compromiso definitivo al respecto.

Por lo dem¨¢s, numerosos aspectos f¨®lcl¨®ricos -visita a la comunidad maor¨ª-, meramente protocolarios -algo obligado en este tipo de viajes- o simplemente tur¨ªsticos, como las visitas a los parques de reserva de fauna australiana, han marcado tambi¨¦n este viaje.