Carta a Lola

No te preocupes, Lola. Todos pasamos estos d¨ªas por el calvario de rellenar la declaraci¨®n. Me imagino que te habr¨¢s sentado este domingo frente a los impresos y habr¨¢s empezado a sumar y restar, y luego deducir. Como t¨², se habr¨¢n puesto a hacerlo Bernardo, Pedro y ocho millones de sufridores. Y, como dice este peri¨®dico, habr¨¢s cerrado los ojos, cruzado los dedos y habr¨¢s esperado a que pase el tiempo con la esperanza de que todo est¨¦ correcto o, al menos, que el ordenador de Hacienda se comporte como una maquina que es y "se deje colar alg¨²n gol".Distinguida Lola de Espa?a, a Borrell le llevamos todos en un lugar de nuestro coraz¨®n, y tambi¨¦n de nuestro bolsillo. "El malo de la pel¨ªcula", como le llaman, seguramente sabe, como han publicado los peri¨®dicos, que los espa?oles trabajamos tres meses gratis para las arcas de Hacienda. ?Qu¨¦ te parece este descaro?, y luego las carreteras se cobran sus muertos en el primer fin de semana que hay para disfrutar, y no me digas de encontrar una cama en un hospital. As¨ª, Lola, est¨¢ el patio.-