Se busca pareja

Confortado por un margen favorable de 13 puntos sobre George Bush en el ¨²ltimo sondeo nacional, Michael Dukakis se dispone a designar al que puede ser el pr¨®ximo vicepresidente de Estados Unidos. Los dos candidatos a la presidencia est¨¢n examinando listas de potenciales n¨²meros dos, escrutando los m¨ªnimos detalles personales, familiares y financieros, a la b¨²squeda de un pol¨ªtico que tenga lo que a ellos les falta y que les ayude a ganar en las regiones donde son m¨¢s d¨¦biles.

Un ex astronauta, John Glenn, y un aspirante derrotado en las primarias, Robert Dole, podr¨ªan ser los vicepresidentes de Dukakis y Bush respectivamente. Pero todav¨ªa es una apuesta arriesgada. El candidato dem¨®crata ser¨¢ el primero en anunciarlo, posiblemente antes de la convenci¨®n de su partido, que lo designar¨¢ oficialmente en Atlanta el 18 de julio. Bush tiene a su, favor que puede esperar m¨¢s -la convenci¨®n republicana es a mediados de agosto-, obligando a su rival a ense?ar sus cartas primero. Dependiendo de lo que haga Dukakis, se habla incluso de que podr¨ªa elegir a una mujer.Dukakis, que asegura que no decidir¨¢ por razones electorales sino a favor de alguien que pueda ser, si llega el caso, un buen presidente, necesita compensar sobre todo su inexperiencia en pol¨ªtica exterior y en cuestiQnes de defensa y su desconocimiento de c¨®mo funciona Washington. Y el estereotipo de dem¨®crata liberal tradicional del establecimiento de la costa Este, que explica su debilidad en el Sur y su falta de imagen en el Oeste del pa¨ªs.

Sin embargo, Dukakis -quiz¨¢ no se vea- no est¨¢ forzado a compensar un supuesto excesivo liberalismo -del que lo ataca Bush-, porque se ha situado h¨¢bilmente en el centro, aunque Jackson le presiona para que escoja a un pol¨ªtico ostensiblemente liberal.

Bush necesita equilibrar su imagen de ni?o de pap¨¢ y de blando con una figura popular. Se duda de que sea tan audaz como para elegir a una mujer. El fiasco dem¨®crata de Geraldine Ferraro en 1984 hizo mucho da?o a las candidaturas femeninas. Los conservadores presionan a favor de la ex emba adora en la ONU, Jeane Kirkpatrick, pero otros nombres son Elizabeth Dole, atractiva ex ministra de Transportes y mujer del senador Dole; la senadora por Kansas Nancy Kassenbaum o la prestigiosa magistrada del Tribunal Supremo Sandra Day O'Connor.

Descartado Jesse Jackson, que parece haberlo asumido, el l¨®gico n¨²mero dos si el color de su piel hubiera sido blanco, Dukakis ha reducido la lista de presidenciables a media docena de nombres, que encabeza el primer astronauta norteamericano y h¨¦roe de guerra John Glenn. Las encuestas se?alan que Dukakis-Glenn vencer¨ªan a Bush por seis puntos, mientras que emparejado con Jackson, Bush triunfar¨ªa por la misma diferencia.

Mirando al Sur

Con 66 a?os, una imagen populista y con cierta experiencia en defensa y en pol¨ªtica exterior, Glenn le dar¨ªa a Dukakis los importantes 23 votos electorales de su Estado, Ohio, sin el cual ning¨²n republicano ha ganado la Casa Blanca.Pero proyecta una imagen blanda, opuesta al intelectualismo de Michael Dukakis, e hizo una p¨¦sima campa?a a la presidencia en 1984 de la que todavidebe dinero. Pero su aureola conservadora y de h¨¦roe nacional le servir¨ªa a Dukakis en el Sur. El candidato dem¨®crata podr¨ªa optar tambi¨¦n por el senador tejano Lloyd Bentsen, que derrot¨® hace a?os a Bush en una campa?a para el Senado y que ayudar¨ªa a Dukakis en el Sur, donde es muy d¨¦bil.

Otros vicepresidenciables dem¨®cratas son el ex gobernador de Florida Bob Graham (su Estado ser¨¢ crucial en noviembre); el senador por Georgia Sam Nunn, otro sure?o, experto en temas de defensa pero vetado desde la sombra por Jackson por demasiado conservador en temas sociales y de derechos civiles; el senador Dale Bumpers, de Arkansas. Y Thomas Foley, respetado l¨ªder de la C¨¢mara de Representantes. Un preferido de Dukakis, el senador Bill Bradley, de New Jersey, un gigante muy competente, ex jugador profesional de baloncesto, ha dicho que no quiere ir en el ticket.

La lista de Bush cuenta, adem¨¢s de con el senador Robert Dole -que est¨¢ dispuesto a tragarse sus feroces cr¨ªticas lanzadas contra el vicepresidente en las primarias-, con el gobernador de New Jersey, Thomas Kean, el senador Alan Simpson y el diputado ¨ªdolo de los conservadores Jack Kemp, un reaganista que se estrell¨® en las primarias.