La victoria de Menem replantea la pol¨ªtica argentina

La victoria del gobernador de La Rioja argentina,Carlos Menem, en la elecci¨®n interna peronista del s¨¢bado replantea los esquemas pol¨ªticos en Argentina y desencadena reflexiones sobre el arrastre popular del menemismo. Los mercados financieros abrieron el lunes sin que se produjese un efecto Menem. El d¨®lar s¨®lo experiment¨® una leve subida respecto a la cotizaci¨®n del fin de semana. Los analistas se concentran ahora en el estudio de las repercusiones del triunfo de Menem y su candidatura peronista en la elecci¨®n presidencial de 1989.

Para el partido gobernante, la Uni¨®n C¨ªvica Radical (UCR) del presidente Ra¨²l Alfons¨ªn, la victoria de Menem abre una esperanza de poder conservar el poder por el temor que puede despertar el patilludo gobernador de La Rioja en las capas medias de la sociedad argentina. "Ahora los radicales podr¨¢n presentar la elecci¨®n entre Menem y Angeloz [candidato de la UCR a la presidencial como la alternativa entre la civilizaci¨®n y la barbarie", se comentaba ayer en Buenos Aires.El diplom¨¢tico ?scar Spinosa, que se sum¨® a la campa?a del gobernador riojano, explicaba el domingo que la victoria de Menem "rompe el pacto Alfons¨ªn Cafiero, el continuismo pol¨ªtico". A?ade Spinosa que el resultado de la interna equivale a "un nuevo 17 de octubre". Ese d¨ªa, en 1945, se celebr¨® una gigantesca manifestaci¨®n que abri¨® el camino al r¨¦gimen de Per¨®n, que marc¨® la pol¨ªtica argentina en las ¨²ltimas cuatro d¨¦cadas.

La victoria de Menem, para ?scar Spinosa, entierra a la generaci¨®n del peronismo de 1945 y "la renovaci¨®n, que quer¨ªan renovarse ellos, sin renovar el partido".

Menem y su equipo parecen conscientes de que tienen que pactar con Antonio Cafiero, el precandidato derrotado, que arrastr¨® un 46% del electorado peronista.

S¨®lo si los peronistas consiguen cerrar filas y resta?ar las heridas de la interna podr¨¢n ganar la presidencia en 1989. A sus 65 a?os, a Cafiero le queda la oportunidad de conservar el gobierno de la provincia de Buenos Aires y la presidencia del Partido Justicialista, para quedarse en reserva por si Menem fracasa el a?o pr¨®ximo en su intento de llegar a presidente.

La interna ha demostrado que los cad¨¢veres pol¨ªticos pueden resucitar en Argentina antes de lo previsto. Con Menem resucitaron el l¨ªder sindical de la Uni¨®n Obrera Metal¨²rgica (UOM), Lorenzo Miguel, y otros dirigentes gremiales que parec¨ªan arrinconados para siempre. Por eso parecen prematuros los intentos de enterrar a generaciones o grupos dentro del peronismo.

A la hora de explicar el triunfo de Menem, hasta su gente m¨¢s pr¨®xima recurre a las explicaciones que suenan esot¨¦ricas en o¨ªdos europeos. El escritor Jorge As¨ªs comenta que "el peronismo es locura, sentimiento, un despelote, como la Argentina. Menem saca a relucir el fondo de la casa. Mucha gente se siente representada en ¨¦l, y saben que no les va a traicionar. Menem es la m¨¢xima posibilidad de transgresi¨®n en este pa¨ªs. La izquierda le hostiga de forma infantil". Considera As¨ªs que "el peronismo es una perspectiva inteligente y viable para gobernar el pa¨ªs, este quilombo [esc¨¢ndalo] que es Argentina".

D¨ªas atr¨¢s, un partidario de Menem comentaba a un periodista el mitin final de campa?a en la cancha del River, en Buenos Aires. Ante el hecho de que Menem casi llen¨® de p¨²blico el estadio, coment¨® que "el que no entienda que esta cancha se llen¨® tres veces para ver c¨®mo bautizaban adentro de una pileta pelopincho (piscina de pl¨¢stico) a los Testigos de Jehov¨¢, no entiende lo que pasa. La gente ya no les cree a los pol¨ªticos y se puso a buscar fetiches".