Dos espa?oles supervivientes abandonaron el puerto sin ser atendidos

Dos j¨®venes espa?oles supervivientes de la tragedia del City of Poros llegaron ayer a Barcelona procedentes de Atenas, de donde salieron sin que las autoridades les prestaran ninguna ayuda. El n¨²mero de espa?oles que seg¨²n las primeras noticias estaban en el barco se limitaba a Mar¨ªa Luisa Santiago. Los otros dos espa?oles supervivientes, que no desean que se publique sus nombres, siguen aterrorizados por los acontecimientos. Ambos lograron salvar sus vidas tras lanzarse por la proa del barco en llamas, protegidos por dos salvavidas.Seg¨²n los dos testigos, un barco de dimensiones parecidas al City of Poros pas¨® por las inmediaciones a los pocos minutos de haberse iniciado el ataque sin pararse a socorrer a las v¨ªctimas, a pesar de que era claramente perceptible el incendio desatado. Concluida la acci¨®n terrorista, apareci¨® una segunda embarcaci¨®n tur¨ªstica que par¨® sus m¨¢quinas, pero permaneci¨® a notable distancia del buque asaltado, sin intervenir y limit¨¢ndose a recoger a unos pocos supervivientes que lograron salvar a nado la distancia entre los dieron instrucciones en griego por megafon¨ªa. Para los dos na¨²fragos espa?oles "m¨¢s que instrucciones parec¨ªa, por el tono, que estaba recrimin¨¢ndonos. Por un momento cre¨ªmos que se iban sin rescatarnos". Despu¨¦s de recoger a unos 20 pasajeros procedentes del City of Poros, el barco emprendi¨® viaje sin esperar a otros supervivientes. Otras tres embarcaciones de pescadores circulaban dando vueltas entorno al City of Poros, sin intervenir.

Los dos supervivientes; espa?oles s¨®lo fueron interrogados por dos azafatas del barco que les rescat¨® y que les pidieron el nombre, la nacionalidad, el n¨²mero del pasaporte y el hotel en el que se hospedaban. Al llegar a puerto les pidieron que esperaran junto a otros supervivientes, la mayor¨ªa, como ellos mismos, descalzos y con la ropa destrozada y mojada. Los dos j¨®venes recuerdan que en el muellle hab¨ªa un sinf¨ªn de polic¨ªas y muchos mirones que los observaban con curiosidad, pero que nadie les dijo nada.

Cansados de esperar decidieron abandonar el puerto, para lo cual comenzaron a andar hasta parar un taxi, sin que nadie les prestara ayuda ni les interrogara. Tras dirigise al hotel Rivoli para cambiarse de ropa y calzarse, fueron a la agencia de viajes Prestige Travels para anular el viaje de vuelta a Espa?a en la fecha prevista y solicitar plaza en el primer vuelo disponible. As¨ª lo hicieron, y tras embarcar en un vuelo que sali¨® a las 14.20 horas de Atenas, a media tarde estaban ya en Barcelona.

"Fue una matanza controlada, porque tres hombres con metralleta y granadas hubieran podido matarnos a todos de querer. Mataron hasta que les pareci¨® suficiente", dice la joven. Los dos siguen aterrorizados.