El hombre que hizo ejecutar a Al¨ª Bhuto
El presidente de Pakist¨¢n, general Mohamed Zia Ul Haq, nacio en Julundar el 12 de agosto de 1924, antes de la divisi¨®n de la India. Era hijo de un devoto musuini¨¢n sun¨ª de la secta de los deobundi funcionario del Ej¨¦rcito Brit¨¢nico en Punjab. Fue oficial en el ej¨¦rcito brit¨¢nico y se labr¨® un s¨®lido prestigio, pese a entrar poco en combate. Era padre de dos varones y tres hembras.Durante las dos guerras indopaquistan¨ªes estuvo en la retaguardia. Sirvi¨® con el Ej¨¦rcito jordano cuando Hussein expuls¨® de su pa¨ªs a la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP), en septiembre de 1970. Nunca ha quedado claro el papel que desempeno en estos sucesos.
El primer ministro Al¨ª Bhuto le nombr¨® Jefe de Estado Mayor en 1976. Un a?o m¨¢s tarde, tom¨® el poder. Prometi¨® devolverlo tras limpiar el pa¨ªs de corrompidos y demagogos, pero finalmente se lo qued¨® e hizo ejecutar a Bhuto, lo que le convirti¨®, durante alg¨²n tiempo en una especie de paria internacional.
La invasi¨®n sovi¨¦tica de Afganist¨¢n, el 27 de diciembre de 1979, semanas despu¨¦s que la junta militar decidiera quedarse en el poder indefinidadinente, le rehabilit¨® en parte. Pakist¨¢n, que siempre hab¨ªa mantenido buenas relaciones con EE UU -para compensar la amistad de la India con la URSS- se convirti¨® en una barrera contra la eventual expansi¨®n comunista. Casi de repente, Zia se encontr¨® con que su opini¨®n contaba en la Casa Blanca y que recib¨ªa una ayuda casi ilimitada. Estabilizado en su puesto con el dinero y el armamento norteamericano, los movimientos del general Zia hacia el restablecimiento de una democracia controlada siempre han perseguido, seg¨²n todos los indicios, el objetivo de mantenerse en el poder, pese a que lo negara.
Zia es un musulm¨¢n convencido y practicante, pese a lo cual no se pens¨® que tratase en serio de llevar a Pakist¨¢n la ley, del profeta. Pero lo hizo. Prohibi¨® el alcohol y la sharia (ley isl¨¢mica) comenz¨® a aplicarse con todo su rigor contra ladrones, ad¨²lteros y criminales, 18 meses antes de la revoluci¨®n iran¨ª. En cierta ocasi¨®n interrumpi¨® una entrevista con el norcorcano Kim Il Sung para ir a rezar.
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