Lecciones de filosof¨ªa pr¨¢ctica

El Congreso Mundial de Filosofia, que acaba de concluir en Brighton, ofrece una ocasi¨®n para valorar el estado de esta disciplina. Una cosa ha quedado clara: los fil¨®sofos brit¨¢nicos est¨¢n expectantes sobre el futuro de su disciplina. En tiempos materialistas como los nuestros, los fil¨®sofos no son los m¨¢s apreciados. Pero su mayor preocupaci¨®n en estos momentos es que sus investigaciones no son parangonables con las de sus inmediatos predecesores, como Russell, Wittgenstein o Popper.Sin,embargo, la filosof¨ªa forma parte del talento nacional del Reino Unido. Desde Hobbes y Locke, en el siglo XVII, pasando por Hume o Berkeley, cien a?os m¨¢s, tarde, o Bentham y Mill, en el XIX, hasta llegar a los nombres del pasado m¨¢s reciente, muchos de los fil¨®sofos m¨¢s influyentes han sido brit¨¢nicos.

Una nota de optimismo la ofrecen los nuevos caminos que est¨¢ siguiendo la filosof¨ªa angloamericana, con mayores puntos de contacto con la sociedad y, porcon siguiente, con una mayor influencia sobre la ¨¦tica o las finanzas. Por otra parte, y como consecuencia de la esterilidad de la filosof¨ªa del lenguaje y como respuesta a una mayor demanda social para hacer frente a los dilemas ¨¦ticos que ni el sentido com¨²n ni la religi¨®n parecen aliviar, se ha producido una revoluci¨®n en la filosofia moral. A estas demandas intenta dar respuesta lo que se ha dado en llamar ¨¦tica aplicada.

31 de agosto