La locura como negocio
La locura y las situaciones equ¨ªvocas, recursos comunes al cine c¨®mico, son utilizadas por Michael Ritchie -cuyo m¨¢s recordado filme es El candidato- para ilustrar un gui¨®n basado en la novela de Ken Kolb que brinda al actor Dan Aykroyd el protagonismo absoluto.En esta ocasi¨®n Ritchie satiriza a la psiquiatr¨ªa presentado a una pandilla de m¨¦dicos mucho menos cuerdos, atractivos e inteligentes que sus pacientes, al tiempo que muestra el poder que la sociedad americana confiere a estos perturbados.
Las dosis de locura que salpican la narraci¨®n cinematogr¨¢fica, desde luego, no hacen olvidar el gramo de locura que sembr¨® sobre la pantalla Dany Kaye, ni tampoco proporcionan una fruct¨ªfera cosecha de carcajadas: tan s¨®lo alguna que otra aislada, y varias sonrisas emboscadas en chistes tontos y f¨¢ciles.
Pacientes de psiquiatra en apuros
Direcci¨®n: Michael Ritchie. Gui¨®n: S. Kampmann, W. Porter y S. Stein. Fotograf¨ªa: D. E. Thorin. M¨²sica: M. Colombier. Estados Unidos, 1988. Int¨¦rpretes: Dan Aykroyd, Walter Matthau. Estreno: cine Fuencarral.
Dan Aykroyd, cuya m¨¢s sobresaliente actuaci¨®n en la pantalla la realiz¨® en Entre pillos anda el juego, se limita a cumplir aceptablemente su cometido, bien secundado en la m¨¢s que demostrada capacidad de r¨¦plica de Walter Matthau.
El intercambio de papeles entre paciente y doctor, gracias al equ¨ªvoco creado por las argucias vodevilescas del filme, da lugar a situaciones c¨®micas por desgracia previsibles de antemano, y cuyo resultado global es una comedia menor, que nada aporta al g¨¦nero: una muy poco brillante muestra de cine de pura distracci¨®n, que puede alcanzar en alg¨²n espectador predispuesto la sonrisa, siempre que se entre en el juego propuesto por un gui¨®n mec¨¢nico y convencional.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
