Barbacid y la guerra contra el c¨¢ncer

JES?S DE LA SERNA

En la secci¨®n Cartas al director (9 de septiembre), el bi¨®logo espa?ol Mariano Barbacid, experto mundial en la investigaci¨®n de] c¨¢ncer, ha rectificado el grave error cometido en la titulaci¨®n de una cr¨®nica publicada el d¨ªa anterior en EL PA?S, enviada desde la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo de Santander por Ana Alfageme. El 90% de los c¨¢nceres puede curarse, seg¨²n Barbacid, rezaba aquel desafortunado titular, cuando en la informaci¨®n se dec¨ªa simplemente que el cient¨ªfico espa?ol hab¨ªa recordado que mientras existen tumores que se curan hasta un 90%, como es el caso de algunas leucemias, existen otros c¨¢nceres, como el de p¨¢ncreas, que pr¨¢cticamente son mortales". Nada, pues, de que el 90% de los c¨¢nceres puede curarse.La carta de Barbacid -adem¨¢s de rectificar el grueso desacierto cometido en el titular, llamaba la atenci¨®n sobre la "falta de sensibilidad hacia la opini¨®n p¨²blica en general y hacia esta terrible enfermedad en particular por parte del editor responsable"- no ha sido le¨ªda por al menos dos lectores que se han dirigido al ombudsman en demanda de defensa. ?C¨®mo se afirma algo tan trascendental para miles de personas en un destacado titular y resultar que no es cierto?

Los errores en la titulaci¨®n de noticias son frecuentes -algunos han sido se?alados por el ombudsman-, pero ninguno hab¨ªa alcanzado el calibre de ¨¦ste. De haber sido cierto lo que se anunciaba a cuatro columnas, a estas alturas la humanidad estar¨ªa festejando uno de los m¨¢s ansiados y tenazmente perseguidos triunfos de la ciencia. Tristemente, la guerra contra el c¨¢ncer contin¨²a todav¨ªa, aunque la esperanza de ganarla crezca a la vista de los avances logrados por los investigadores. Barbacid ha venido a recordar en su carta urgente -"con objeto de paliar el problema que haya podido causarse a tantos enfermos de c¨¢ncer que hayan albergado falsas esperanzas de curaci¨®n debido al inexacto titular"- que la lucha sigue.

?Que pas¨® en el momento de titular la cr¨®nica? La redactora Inmaculada Mardones fue quien cometi¨® el error. "Me equivoqu¨¦", dice. "Tras una lectura de la cr¨®nica [de Alfageme], en busca de un titular que destacara el aspecto m¨¢s divulgativo del mensaje de Barbacid", explica, "me fij¨¦ en el p¨¢rrafo que dec¨ªa: 'Mientras existen tumores que se curan hasta en un 90%...". (Este p¨¢rrafo era precisamente el ¨²ltimo de la cr¨®nica. En rigurosa t¨¦cnica period¨ªstica, lo m¨¢s esencial, y por tanto destacable, de una informaci¨®n debe figurar en la entrada o primer p¨¢rrafo. De haber sido cierto lo que se titul¨®, dicho p¨¢rrafo habr¨ªa que haberlo puesto al comienzo. En este tipo de informaciones lo importante nunca se escribe al final.)

Reconocida su equivocaci¨®n, Inmaculada Mardones a?ade: "Sin embargo, mi error, que fue subsanado al d¨ªa siguiente mediante la publicaci¨®n de una carta del propio Barbacid y una entrevista que se le hizo a instancias del jefe de la secci¨®n, no me explico c¨®mo pas¨® desapercibido a otras lecturas previas a su definitiva inserci¨®n en el peri¨®dico". En efecto, antes de entrar en m¨¢quinas el diario -y aun cuando sale ya impreso- existen una serie de mecanismos de revisi¨®n, control, lectura, correcci¨®n y supervisi¨®n, con el objeto de evitar fallos como el que se ha producido. Una tras otra, estas redes de seguridad, desafortunadamente, no funcionaron en este caso. Una cadena de presunciones por parte de quienes deben ejercer estas tareas se concatenaron con tanta desdicha que dieron por resultado un error voluminoso.

Arrecifes artificiales

Los arrecifes artificiales no son cosa nueva en nuestras costas. Sin embargo, el pasado julio, EL PA?S public¨® una informaci¨®n en la que se afirmaba que los instalados en Santa Pola (Alicante) y Vinar¨®s (Valencia) -ambos parte de un programa de la Consejer¨ªa de Agricultura y Pesca de la Generalitat valenciana para aumentar la productividad pesquera- son "una de las primeras experiencias que se realizan en Espa?a en este campo y la primera de estas caracter¨ªsticas". Se a?ad¨ªa que "no existen antecedentes destacables" en la instalaci¨®n de arrecifes artificiales en el litoral espa?ol.

Carlos Su¨¢rez Ferradas, director gerente de Ecotecnos, SA, escribe para precisar que su empresa se ocupa de la instalaci¨®n de arrecifes artificiales desde 1985. Fruto de la labor de su equipo t¨¦cnico, ha instalado hasta la fecha dos. de los cinco arrecifes artificiales existentes en las costas calalanas. Por sus caracter¨ªsticas, dice Carlos Su¨¢rez, estos dos arrecifes artificiales (en l'Ampolla y Calefell) son los "mayores proyectos realizados hasta la fecha en Espa?a" y ocupan "un destacado lugar entre los realizados en Europa". Ecotecnos, a?ade, proporcion¨® en su d¨ªa "abundante informaci¨®n" a la Consejer¨ªa de Agricultura y Pesca de la Generalitat valenciana "sobre las experiencias realizadas con anterioridad" por la empresa.

Lo publicado por EL PA?S en julio proced¨ªa de una sola fuente informativa, seg¨²n explica Manuel Mu?oz, a la saz¨®n responsable de la Redacci¨®n del peri¨®dico en Valencia: la Generalitat. Mu?oz manifiesta que tanto la estimaci¨®n de que "se trata de una de las primeras experiencias que se realizan en este campo" como la afirmaci¨®n de que "no existe antecedente destacable en la instalaci¨®n de estos arrecifes en las costas espa?olas" corresponden a la Generalitat. Manuel Mu?oz confiesa tambi¨¦n: "En la Redacci¨®n de EL PA?S en Valencia no ten¨ªamos noticia de los arrecifes colocados por la empresa Ecotecnos en las costas catalanas y dimos por buenas las informaciones de la Generalitat que parecen conferir a su iniciativa de instalaci¨®n de arrecifes artificiales en Santa Pola y Vinar¨®s un car¨¢cter pionero que no tienen".

Acerca de los arrecifes artificiales en Espa?a han informado con frecuencia, desde hace alg¨²n tiempo, los medios de comunicaci¨®n. Diarios, publicaciones especializadas y televisi¨®n se han ocupado de estos modernos m¨¦todos de cultivos pesqueros. En 1987, los arrecifes artificiales fueron el tema de una serie de conferencias en el Sal¨®n N¨¢utico de Barcelona y en cofrad¨ªas de pescadores. Todo ello, expone Carlos Su¨¢rez, deber¨ªa suponer "una suficiente difusi¨®n del estado actual y del futuro de esta t¨¦cnica de potenciaci¨®n pesquera".

Una consulta a las hemerotecas o a los servicios de documentaci¨®n habr¨ªa evitado la queja de la compa?¨ªa Ecotecnos.