Las revistas literarias son socialmente indispensables, seg¨²n concluye un debate en L¨ªber

Las revistas literarias son, pese a su aparente marginalidad, un elemento indispensable en la vida cultural, seg¨²n acordaron los participantes en un debate organizado ayer en Liber con la participaci¨®n del escritor y ministro de Cultura, Jorge Sempr¨²n, y del conseller de Cultura de la Generalitat, Joan Guitart. Esta importancia no impide que en Espa?a, como en la mayor parte del mundo, las revistas literarias tengan un muy elevado ¨ªndice de mortalidad. El debate termin¨® centr¨¢ndose en las pol¨ªticas oficiales de subvenciones. El ministro se mostr¨® partidario de conceder las menos posibles.

"Quisiera que me dijera usted qu¨¦ publicaciones del Ministerio de Cultura son boletines propagand¨ªstico", le dijo el ministro Jorge Sempr¨²n a un espectador que le hab¨ªa interpelado con la citada acusaci¨®n. "Porque" prosigui¨® Sempr¨²n, "como me he pasado la vida haciendo boletines propagand¨ªsticos, quisiera dejar de hacerlos".Adem¨¢s de ser la m¨¢s re¨ªda por la audiencia, la r¨¦plica de S¨¦mpr¨²n reflej¨® el esp¨ªritu de buena parte del debate sobre el papel de las revistas culturales hoy en Espa?a, que pronto se centr¨® en las condiciones en que el Estado debe apoyar estas publicaciones. Apenas se produjo alguna discusi¨®n sobre si se deben dar ayudas o no. La mayor parte de los participantes coincidi¨® en se?alar que ¨¦stas son casi la condici¨®n indispensable de la existencia de las revistas.

Aunque luego explic¨® que hab¨ªa intentado animar el debate, Jorge Sempr¨²n dijo en un momento dado que es "partidario de un m¨ªnimo de subvenciones", y no s¨®lo en relaci¨®n con las revistas literarias. Y ello por no existir la posibilidad de que exista un criterio objetivo para la adjudicaci¨®n del dinero." El apoyo a las revistas literarias es universal", dijo Miquel Riera, presidente de la Asociaci¨®n de Editores de Informaci¨®n, que agrupa 32 revistas culturales. "S¨ª no se concede, el genero desaparecer¨¢". Riera coment¨® luego a este peri¨®dico que en las ¨²ltimas horas hab¨ªa recibido una convocatoria del Servicio del Libro, de la Generalitat de Catalu?a, para estudiar la forma de distribuir ayudas a peque?as revistas literarias en catal¨¢n.

A prop¨®sito de la equidad en las ayudas, Joan Guitart, conseller de Cultura record¨® en el debate que las publicaciones en catal¨¢n han recibido una ayuda indiscriminada, condici¨®n indispensable para que la subvenci¨®n no sea un evidente instrumento pol¨ªtico.

Jorge Herralde, editor de Anagrama, ech¨® en falta una publicaci¨®n especializada que informe de todas las novedades, como puede ser Publisher's Weekly; subray¨® la creciente importancia de los suplementos literarios de determinados peri¨®dicos -EL PA?S entre ellos-, y se?al¨® que las revistas literar¨ªas podr¨ªan ser excelentes caminos para la exportaci¨®n de la literatura espa?ola.

Jaume Vallcorba, profesor y editor de Edicions dels Quaderns Crema, indic¨® que han desaparecido las revistas literarias de doctrina, y a la vez comprob¨® la escasa tendencia a crear moda, desaparici¨®n que lament¨®, pues crear moda permite arriesgados experimentos de otra manera imposibles.

La primera de las tres mesas redondas de libreros previstas en el certamen confirm¨® por la tarde lo que se hubiera podido deducir ya de la programaci¨®n: Liber 88 ser¨¢, en cierto modo, tambi¨¦n un congreso de libreros, un sector clave, como se ha demostrado en el ¨¦xito multitudinario de la Feria de Francfort, que le otorga un papel protagonista, seg¨²n explic¨® a este diario el editor Antonio L¨®pez, de Tusquets.

En este primer encuentro, consagrado a La publicidad y promoci¨®n editorial desde la librer¨ªa, los libreros discutieron entre otras cosas de catalogaci¨®n, de la muy escasa colaboraci¨®n entre editores y libreros y de las posibles soluciones.