Los ba?os de Budapest

Contrariamente a lo que afirma Juan Benet en su art¨ªculo n¨²mero dos sobre Budapest, en los Ba?os Gellert de dicha ciudad es muy f¨¢cil entrar y ba?arse. Basta con hacer una peque?a cola y abonar 70 forints (unas 175 pesetas) para tener derecho a tres horas de ba?o. El ba?ista puede usar libremente la antigua piscina semicubierta o bien la moderna, situada en un jard¨ªn donde se puede tomar el sol. Si se desea cabina individual se abonan 30 forints m¨¢s. Por otro lado, no s¨®lo todos los h¨²ngaros, sino tambi¨¦n los extranjeros, se ba?an con gorro (los vigilantes no se hacen el sueco): pero modelos de gorros hay para todos los gustos. A la entrada de los ba?os hay una segunda taquilla exclusiva para los enfermos de la Seguridad Social con receta m¨¦dica. En cualquier caso, nada de pases ni de autoridades sanitarias. Finalmente, tampoco entiendo las dificultades de Juan Benet para conseguir un billete de tranv¨ªa, que se puede adquirir libremente en estancos, quioscos, estaciones de metro, etc¨¦tera (un viaje cuesta unas cinco pesetas); para los abonados hay, adem¨¢s, m¨¢quinas expendedoras.Lo anterior es mi experiencia, durante la primera quincena de agosto pasado, sin gu¨ªas ni amistades que me ense?aran la ciudad, y sin ni siquiera hablar h¨²ngaro. No s¨¦ cu¨¢ndo ni c¨®mo viaj¨® Juan Benet a Budapest, quiz¨¢s fue hace a?os; en todo caso, la publicaci¨®n en esta ¨¦poca de estos art¨ªculos de viajes sugiere que se trata de las experiencias actuales de sus autores. Por lo que vemos, su contenido informativo debe ser puesto en cuarentena.-