El alumno que dispar¨® en un centro de M¨®stoles no podr¨¢ estudiar en la localidad

El claustro de profesores del instituto M¨®stoles IV, donde en noviembre pasado C. R. R. dispar¨® en clase una escopeta sin causar heridos, ha remitido a la mayor¨ªa de los centros educativos de la provincia una carta con las resoluciones administrativas y judiciales contra el alumno, para que se conozca "que tales hechos no han quedado impunes" seg¨²n el texto. El juzgado de distrito de M¨®stoles mult¨® a C. R. R. con 75.000 pesetas, mientras que la Secretar¨ªa General de Educaci¨®n lo ha inhabilitado para estudiar en centros educativos durante un a?o y definitivamente en los de M¨®stoles.

Los profesores del instituto M¨®stoles IV est¨¢n estos d¨ªas en plena vor¨¢gine. Que el a?o pasado un alumno de 16 a?os disparara en mitad de un examen de matem¨¢ticas una escopeta de caza y el tiro pasara a metro y medio del profesor no ha amedrentado a nadie. De aquel hecho, ahora s¨®lo queda una gran satisfacci¨®n.Lo de menos es que al chaval se le haya condenado o sancionado, aunque eso de que no pueda volver a estudiar dentro del t¨¦rmino municipal de M¨®stoles de por vida es una buena noticia para los docentes. Lo importante es que por fin la r¨ªgida maquinaria de la burocracia ha llevado hasta el final un expediente. El director de otro instituto de M¨®stoles dice que "lo habitual es que la Administraci¨®n eche por tierra los expedientes abiertos por un consejo escolar".

El M¨®stoles IV ha recogido las dos resoluciones, la del Ministerio de Educaci¨®n y la del juzgado de distrito de M¨®stoles, y las ha remitido a los compa?eros de Madrid para hacerles ver que a veces se resuelven las cosas. Los profesores est¨¢n preocupados, dados los escasos medios que poseen para luchar contra la indisciplina que desde hace dos a?os, dicen, se respira en algunos centros.

Segunda oportunidad

Desde que el M¨®stoles IV emprendi¨® acciones legales contra el alumno, otros directores han llamado al instituto para pedir consejo. "Oye, ?y sirve para algo?", preguntaban. "De momento ha servido para que tales hechos no queden impunes", opina el director del M¨®stoles IV. Pero ¨¦l, como sus compa?eros, es consciente de que la resoluci¨®n del expediente radica en la importancia de este suceso, a pesar de que no fue admitida a tr¨¢mite en su momento la denuncia por intento de asesinato frustrado. Todo qued¨® en un juicio de faltas. Pero otros casos de indisciplina quedan sin sanci¨®n.

Unos profesores del instituto se sienten satisfechos de que el chaval no haya ido a la c¨¢rcel y se le haya concedido una segunda oportunidad. A otros les parece que est¨¢ m¨¢s en proporci¨®n con el suceso la sanci¨®n acad¨¦mica que la judicial. En las 75.000 pesetas de multa impuestas por la juez est¨¢n incluidas las amenazas al conserje, el disparo en clase y los desperfectos del techo.

A C. R. R., la Secretar¨ªa General de Educaci¨®n le dar¨¢ la oportunidad este a?o de seguir sus estudios en el Instituto Nacional de Bachillerato a Distancia (INBAD). El profesor que recibi¨® el susto comenzar¨¢ su segundo a?o de profesi¨®n fuera de M¨®stoles.

Por su parte, la Federaci¨®n de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) considera que los profesores han querido hacer de este caso algo ejemplarizante, en contra de la verdadera funci¨®n del docente.