Marcado por la Xirgu
El exilio tir¨® por tierra el proyecto de Alberto Closas de ser abogado. A los 20 a?os empieza a coquetear con el periodismo, pero, tal y como ¨¦l afirma, "no sab¨ªa hacer nada". Una vez en Am¨¦rica, donde acude porque su padre, que no hab¨ªa perdido a los hijos en la guerra civil, no estaba dispuesto a arriesgarse de nuevo con una guerra mundial, decide dedicarse al teatro. En Chile acude a la Escuela de Arte Dram¨¢tico de la Xirgu, y un d¨ªa Miguel Ortiz, marido de la Xirgu, le dice: "?Quieres incorporarte a la compa?¨ªa de Margarita?". El actor comenta: "All¨ª empec¨¦, all¨ª segu¨ª, me form¨¦".Cuando en 1957 Alberto Closas construy¨® el teatro Marquina junto con Jaime Castells y Alfredo Mata, escribi¨® a Margarita Xirgu, ofreci¨¦ndole que viniera a Espa?a a hacer con ¨¦l Macbeth, pero ella le habl¨® de la imposibilidad de aceptar la propuesta porque no resistir¨ªa la emoci¨®n de la vuelta. ?l le brind¨® la posibilidad de venir como espectadora, y as¨ª su teatro empezar¨ªa con historia. La respuesta fue la misma, pero esa vez le mand¨® el traje y los zapatos con los que estren¨® Do?a Rosita la soltera, de Garc¨ªa Lorca, y le dijo: "?T¨² ver¨¢s qu¨¦ haces con ellos!".
Una vez estaba el Marquina listo, horas antes del estreno, Closas se puso los zapatos de Margarita en las manos y atraves¨® una y otra vez todo el escenario con ellos y se dijo a s¨ª mismo: "?Este teatro ya tiene historia! Al contarlo se le quiebra la voz, se le empa?an los ojos y termina diciendo: "Posteriormente, el traje y los zapatos los regal¨¦ al Museo de Teatro de Buenos Aires, donde a¨²n siguen".
Despu¨¦s de casi medio siglo de actor, la presencia de Margarita Xirgu, su introductora y maestra en la profesi¨®n, sigue marcando su vida. Hace muchos a?os, casi 50, Margarita Xirgu, le hablo de la importancia de estar entre cajas mientras dure la representaci¨®n, aunque al actor no le toque salir a escena. Closas nunca ha dejado de hacerlo. "Cuando estoy ah¨ª escuchando a mis compa?eros, noto presencias, que el esp¨ªritu de ella est¨¢ ah¨ª, que me ve".
Babelia
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