Rita Levi-Montalcini: "La ingenier¨ªa gen¨¦tica no podr¨¢ cambiar el car¨¢cter del hombre"

Rita Levi-Montalcini, premio Nobel de Medicina en 1986 por sus investigaciones sobre crecimiento celular, afirma que la ingenier¨ªa gen¨¦tica no puede llegar a alterar el comportamiento del hombre, mientras que la manipulaci¨®n cultural que ejercen los modernos medios de comunicaci¨®n de masas lo hace ya con gran facilidad. La profesora Levi-Montalcini alerta sobre el gran poder de los medios de comunicaci¨®n para conformar conductas uniformes y opina, en cambio, que se ha exagerado el peligro de la manipulaci¨®n gen¨¦tica.

La profesora Levi-Montalcini culpa indirectamente a los medios de comunicaci¨®n de las "ideas equivocadas" que se han difundido sobre la ingenier¨ªa gen¨¦tica, que se han traducido en una disminuci¨®n de los recursos para estas investigaciones. "Se ha divulgado la idea de que alg¨²n d¨ªa ser¨ªa posible reproducir hombres como Einstein, cuando es pr¨¢cticamente imposible lograr la reproducci¨®n asexuada de los genes por clonaci¨®n. Se confunde la realidad con cuestiones que corresponden s¨®lo a la ficci¨®n cient¨ªfica", afirma, y culpa de ello a los periodistas "poco informados sobre las cuestiones cient¨ªficas". Sobre la dicotom¨ªa entre manipulaci¨®n gen¨¦tica y manipu laci¨®n cultural habl¨® ayer la pro fesora Levi-Montalcini en Barcelona y hoy lo har¨¢ en Madrid, invitada por el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas.La doctora excluye con tajante rotundidad "que desde el punto de vista gen¨¦tico se pueda alterar el comportamiento del hombre", mientras que, por el contrario, se muestra "absolutamente segura de que la manipulaci¨®n cultural s¨ª puede cambiar el comportamiento de millones de individuos". "Eso ya se demostr¨® en fen¨®menos sociales como el nazismo, el fascismo o el estalinismo", a?ade, "cuando todav¨ªa no se dispon¨ªa de? potencial de los actuales medios de comunicaci¨®n, particularmente la televisi¨®n, que no conocen fronteras ni limitaciones".

Preguntada sobre si no cree que la identificaci¨®n del genoma humano puede permitir alterar la herencia gen¨¦tica, Levi-Montalcini responde: "Hasta ahora se ha logrado manipular genes aislados y con gran dificultad. Por eso se puede pensar en curar enfermedades provocadas por la alteraci¨®n o ausencia de un solo gen, enfermedades monogen¨¦ticas, como la hemofilia o la talasemia. Pero, desde el punto de vista cient¨ªfico, la inteligencia, el car¨¢cter o el comportamiento humano son poligen¨¦ticos, es decir, que en cada uno de los rasgos intervienen cientos de miles de genes diferentes, as¨ª que veo muy dif¨ªcil, imposible, que un dictador mal¨¦volo pueda alterar el comportamiento de la gente utilizando la ingenier¨ªa gen¨¦tica".

Chiarelli, imprudente

La Premio Nobel de Medicina arremete despectivamente contra el profesor Brunnetto Chiarelli, que levant¨® una gran pol¨¦mica en Italia hace dos a?os al afirmar que se hab¨ªa intentado obtener en el laboratorio un embri¨®n fruto del cruce entre hombre y mono. "Chiarelli, que luego pidi¨® disculpas, fue muy imprudente y no debi¨® nunca prestarse a la posibilidad de ser interpretado de la forma en que lo fue".Con la misma seguridad cree la profesora Levi-Montalcini que la sociedad se proteger¨¢ frente a los posibles abusos de la ingenier¨ªa gen¨¦tica. Da por hecho que existe ya una convenci¨®n entre los cient¨ªficos, seg¨²n la cual es ¨¦tico manipular los genes de las c¨¦lulas som¨¢ticas (las del p¨¢ncreas, por ejemplo, para provocar la producci¨®n de una determinada hormona cuya carencia provoca una enfermedad), pero no las c¨¦lulas germinales, que son las que intervienen en la reproducci¨®n de la especie. "Los pa¨ªses implantar¨¢n normas precisas sobre los l¨ªmites de la manipulaci¨®n gen¨¦tica y si alguien los transgrede constituir¨¢ una excepci¨®n y, como tal, ser¨¢ r¨¢pidamente bloqueado", asegura.

Tampoco cree que la manipulaci¨®n cultural que ejercen los grandes medios de comunicaci¨®n pueda ser utilizada para justificar la manipulaci¨®n gen¨¦tica de las c¨¦lulas germinales. La profesora conf¨ªa en la capacidad de la sociedad para regular el uso de la ciencia y no teme que pueda utilizarse el gran poder de los medios de comunicaci¨®n para alterar los l¨ªmites ¨¦ticos que hoy se considera que la manipulaci¨®n gen¨¦tica no debe traspasar.