Thatcher y Martens se enfrentan por la extradici¨®n de un presunto extremista
I. C. ENVIADO ESPECIAL, La discusi¨®n acalorada que los jefes de Estado y de Gobierno de los doce se proponen evitar en la pr¨®xima reuni¨®n plenaria marc¨® el encuentro bilateral que ayer por la ma?ana mantuvieron la primera ministra brit¨¢nica, Margaret Thatcher, y su hom¨®logo belga, Wilfried Martens.
Ambos mandatarios se enfrentaron a prop¨®sito de la reciente negativa belga a conceder la extradici¨®n al Reino Unido de? ex sacerdote irland¨¦s Patrick Ryan, del que Scotland Yard sospecha que recaud¨® durante 10 a?os fondos para el Ej¨¦rcito Republicano Irland¨¦s (IRA) con los que compr¨® armas para la organizaci¨®n separatista.
Tras la detenci¨®n de Ryan en Bruselas, en julio, Londres solicit¨® su extradici¨®n, pero el Gobierno belga la deneg¨® a principios de esta semana y expuls¨® al reo a la Rep¨²blica de Irlanda, donde el ex sacerdote es hospedado por una orden religiosa, y el fiscal del Estado, John Murray, estudia la petici¨®n brit¨¢nica. Para Thatcher, seg¨²n su portavoz, la decisi¨®n de Martens es "descorazonadora" y adem¨¢s "sabotea la lucha contra el terrorismo". "Las relaciones belgo-brit¨¢nicas est¨¢n por reconstruir", a?adi¨®, como si hubiesen sido destruidas.
A su salida de la entrevista, Martens afirm¨® que, por su parte, la hora de conversaci¨®n habr¨ªa sido "calurosa y animada", y dio cuenta de c¨®mo hab¨ªa pacientemente explicado a su interlocutora que "su Gobierno actu¨® legalmente ( ... ) tomando una decisi¨®n jur¨ªdica, y no pol¨ªtica". Le record¨® tambi¨¦n que en 1984 fue el primero en conceder a Madrid la extradici¨®n a dos terroristas vascos, y que "s¨ª el expediente pidiendo la de Ryan hubiese sido similar al que present¨® Espa?a en su d¨ªa, el comportamiento de su Gabinete hubiese sido el mismo que hace cuatro a?os".
No est¨¢ claro si el terna ser¨¢ discutido en la cumbre de los doce l¨ªderes comunitarios, pero Thatcher ha solicitado, al parecer, entrevistarse con su hom¨®logo irland¨¦s, Charles Haughey, para instarle a que no siga el ejemplo belga. En el entorno de Haughey se aseguraba ayer no estar todav¨ªa al corriente de la petici¨®n de cita formulada por la dama de hierro.
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