Bruselas estudia relajar las reglas fiscales para que los Estados gasten m¨¢s en defensa
La Comisi¨®n trata de llevar el debate de la inversi¨®n en seguridad a los presupuestos nacionales ante la cercan¨ªa de las elecciones en Alemania, que por ahora rechaza una deuda conjunta para financiarla
El debate ya no es si gastar m¨¢s en la defensa europea, sino c¨®mo. En pleno terremoto geopol¨ªtico global, la Comisi¨®n Europea sondea relajar a¨²n m¨¢s las reglas fiscales ¡ªe incluso alg¨²n tipo de suspensi¨®n extraordinaria, como sucedi¨® con la covid-19¡ª para dar a los Estados m¨¢s margen en su gasto militar, sin ser sancionados por d¨¦ficit excesivo. La presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, plante¨® esta medida a los l¨ªderes de los 27 Estados miembros de la UE como una de las opciones sobre la mesa para impulsar la (durante a?os descuidada) industria de la defensa europea y el refuerzo de las capacidades militares. Todo ello cuando la guerra a gran escala de Rusia contra Ucrania va a llegar a su tercer aniversario, y al otro lado del Atl¨¢ntico, el presidente estadounidense, Donald Trump, empuja a los aliados europeos a gastar m¨¢s en defensa.
¡°Si se mira a los presupuestos nacionales, est¨¢n constre?idos. Han sido constre?idos hasta ahora a trav¨¦s de las nuevas reglas del pacto de estabilidad y crecimiento. Para tiempos extraordinarios, es posible tener medidas extraordinarias tambi¨¦n en el pacto de estabilidad y crecimiento, y creo que vivimos en tiempos extraordinarios¡±, remarc¨® la jefa del Ejecutivo comunitario el lunes por la noche, tras una reuni¨®n con los Veintisiete dedicada a la defensa organizada por el presidente del Consejo Europeo, Ant¨®nio Costa.
Buscar mecanismos para que los presupuestos nacionales tengan m¨¢s margen de gasto es tambi¨¦n una forma de ganar tiempo ante otro debate que en la Uni¨®n est¨¢ muy presente desde hace meses: ?c¨®mo financiar de forma conjunta al menos una parte de la ingente inversi¨®n en defensa que hace falta? En Bruselas pocos creen que se pueda abrir ese debate abiertamente hasta despu¨¦s de las elecciones legislativas en Alemania (el 23 de febrero). ¡°La Uni¨®n Europea no tiene la perspectiva de asumir una deuda com¨²n¡±, remarc¨® el canciller alem¨¢n, Olaf Scholz, el lunes por la noche, tras la cita en la capital comunitaria. Sin embargo, esta vez Berl¨ªn no cuenta con muchos de sus aliados frugales tradicionales. Finlandia, Dinamarca o las tres rep¨²blicas b¨¢lticas se alinean con Polonia, m¨¢xima defensora de esta salida.
Una an¨¦cdota durante la rueda de prensa posterior al Consejo Europeo demuestra el cuidado con el que se trata el tema para no enojar a nadie en Berl¨ªn. El primer ministro polaco, Donald Tusk, dijo tener la impresi¨®n de que en la cita el canciller hab¨ªa sido ¡°m¨¢s positivo¡± ante sus planteamientos al comienzo de una de sus intervenciones. Al acabarla pidi¨® a los periodistas que fueran ¡°precisos¡± con sus palabras ¡°porque hay elecciones en Alemania¡±.
Pero no hay tiempo que perder, como record¨® Costa. ¡°Todos estamos de acuerdo en que tenemos que gastar m¨¢s, pero tambi¨¦n mejor y r¨¢pido¡±, apostill¨® el portugu¨¦s. Las prisas llegan, entre otras cosas, porque 23 de los 27 Estados comunitarios son tambi¨¦n aliados de la OTAN. Diecisiete de los socios europeos de esa organizaci¨®n militar han alcanzado el compromiso de gastar un 2% del PIB en defensa; seis no, entre ellos Espa?a (que con el 1,28% est¨¢ a la cola) e Italia. Pero ahora, a la vez que se debate sobre c¨®mo impulsar la defensa, dando prioridad a las protecciones a¨¦reas, los misiles, las municiones y el transporte militar, la Alianza Atl¨¢ntica discute un nuevo techo de gasto que podr¨ªa superar el 3%.
Llegar a esas cifras requiere mucho dinero y mucho esfuerzo fiscal en una UE que anda inmersa en la casi imposible tarea de soplar y sorber. Por un lado, se trata de reducir la monta?a de deuda p¨²blica que se acumul¨® durante las tres crisis sist¨¦micas sufridas en los ¨²ltimos 15 a?os (la financiera, la pandemia y la energ¨¦tica); por otro, buscar recursos para invertir centenares de miles millones en la transici¨®n gemela ¨Decol¨®gica y digital¨D y en defensa, necesidad perentoria desde que Rusia invadi¨® Ucrania. En este contexto se dise?aron unas reglas fiscales mucho m¨¢s flexibles que las anteriores y de las que ahora se pondr¨¢ a prueba la predicada elasticidad. Ah¨ª hay que enmarcar la frase de Von der Leyen de los ¡°tiempos extraordinarios¡±, como lo fueron los de la covid-19.
Los portavoces de la Comisi¨®n no han querido concretar este martes a qu¨¦ se refer¨ªa la presidenta con esas palabras. Pero tampoco han descartado echar mano de la cl¨¢usula de escape, siquiera parcialmente. ¡°La cl¨¢usula de escape forma parte del marco [regulatorio del Pacto de Estabilidad y Crecimiento] y si se cumplen una condiciones muy espec¨ªficas, como con la pandemia, existe la posibilidad te¨®rica de activarla¡±, han apuntado.
S¨ª que parece que con los l¨ªderes la alemana se extendi¨® algo m¨¢s. Puso sobre la mesa esa interpretaci¨®n flexible de las reglas y eso fue bien recibido por los Estados miembros, algo que admiti¨® el propio canciller Scholz al acabar el encuentro. ¡°Tenemos que crear m¨¢s flexibilidad para cada uno de los pa¨ªses. Esa es la tarea para el futuro pr¨®ximo¡±, coment¨® el socialdem¨®crata, que tambi¨¦n puso sobre la mesa que deber¨ªan cambiar las reglas de competencia para facilitar las reglas de compra y dar un espaldarazo a la industria de defensa, en la que Alemania tiene grandes activos.
Los l¨ªderes de la UE respaldaron mayoritariamente el lunes, en la reuni¨®n en la capital comunitaria ¡ªen forma de ¡°retiro¡±, con pocos asesores y una conversaci¨®n menos encorsetada que las cumbres generales¡ª, la f¨®rmula de flexibilizar el pacto fiscal que plante¨® Von der Leyen como una de las hip¨®tesis. Y se podr¨ªa hacer a trav¨¦s de ampliar el marco general de la llamada cl¨¢usula de escape, que no es m¨¢s que una suspensi¨®n de las normas, para aplicar alg¨²n tipo de trato especial al gasto en defensa. Aunque como dejan claras las respuestas de los portavoces oficiales, la idea parece que no ha pasado todav¨ªa de ese estadio: ¡°No creo que estemos en condiciones de compartir m¨¢s detalles t¨¦cnicos en este punto del proceso¡±.
Adem¨¢s, tambi¨¦n han recordado que Von der Leyen no solo habl¨® de un nivel de gasto estatal. Tambi¨¦n lo hizo de uno compartido, con proyectos que pueden ser financiados por el Banco Europeo de Inversiones, y de la iniciativa privada.
En cualquier caso, la necesidad de desembolso es enorme, multimillonaria, remarcan varias fuentes europeas al corriente de los debates. Y aunque a corto plazo la medida m¨¢s sencilla es que los Estados miembros gasten m¨¢s, cada uno por su lado, y quiz¨¢ sin ese cors¨¦ del pacto de estabilidad, Bruselas no descarta ninguna opci¨®n. No hay l¨ªneas rojas. Ni siquiera los pr¨¦stamos conjuntos (como eurobonos) para financiar esas inversiones millonarias. Incluso pese al rechazo de Alemania, muy pendiente de las elecciones del 23 de febrero.
La Comisi¨®n Europea presentar¨¢ a los l¨ªderes sus propuestas a mediados de marzo. El sentimiento general es que hay que tomar medidas lo antes posible. Aunque el tema lleva rondando las mesas de la c¨²pula europea durante meses. En marzo del a?o pasado, la Comisi¨®n Europea y el Servicio de Acci¨®n Exterior presentaron la nueva estrategia de defensa europea y poco se ha avanzado desde entonces.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.