Un desaf¨ªo a la sensatez humana
Si alg¨²n f¨¢rmaco intenta salir al mercado dentro de un ambiente francamente pol¨¦mico, ¨¦se es la p¨ªdora abortiva RU-486. Sin duda, ese clima de contradictorias opiniones est¨¢ plenamente justificado.En primer lugar, porque es un f¨¢rmaco directamente dirigido a eliminar seres humanos vivos con tal fin, creo que es el primero que se ha comercializado; y en segundo, porque sus consecuencias secundarias, tanto en la mujer como en el concebido, en caso de que no sea abortado, son, mejor dicho, eran, totalmente imprevisibles, y digo eran porque en la prestigiosa revista m¨¦dica Nature, en su n¨²mero 6, de octubre pasado, se publicaba el primer caso de un beb¨¦ franc¨¦s nacido con graves deformaciones f¨ªsicas despu¨¦s de un embarazo en el que a la gestante se le administr¨® RU-486 con fines abortivos.
Recuerdo que en mi examen de licenciatura de Medicina, all¨¢ por los primeros a?os sesenta, uno de los profesores, ante la respuesta de un aspirante a licenciado de que "para hacer un lavado de est¨®mago hab¨ªa que administrar por v¨ªa rectal...", comentaba: "Colega, esto sobrepasa mi capacidad de resistencia intelectual". Pues bien, algo as¨ª me pasa a m¨ª con la p¨ªldora abortiva RU-486: sobrepasa mi resistencia intelectual.
Pienso que se est¨¢ tratando de comercializar un f¨¢rmaco que, adem¨¢s de estar dise?ado para eliminar seres humanos, a los posibles sobrevivientes les puede causar graves deformidades f¨ªsicas. Raz¨®n tiene la FDA norteamericana cuando ha denegado el permiso para su comercializaci¨®n en Estados Unidos.
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Es inconcebible que un f¨¢rmaco de tales caracter¨ªsticas se est¨¦ utilizando en nuestro pa¨ªs, y m¨¢s concretamente en Valencia. Has ta ahora se sab¨ªa que experimentalmente la RU-486 produc¨ªa graves alteraciones f¨ªsicas en los fetos de los animales de experimentaci¨®n utilizados. Por ello exist¨ªa la duda de si ello tambi¨¦n ocurrir¨ªa en humanos. De este grave riesgo ahora ya no hay duda. Ha nacido el primer ni?o con graves deformaciones f¨ªsicas debidas a la acci¨®n de este f¨¢rmaco.
Es indudable que se puede arg¨¹ir que en Francia s¨®lo se tolera su prescripci¨®n en hospitales especializados, pero ?hay alguien que pueda garantizar que una vez en el mercado no podr¨¢ ser adquirido clandestinamente por quienes desean terminar con un embarazo no deseado? Y si ello ocurre, y sabiendo que hasta ahora en un 20% de las ocasiones en que el f¨¢rmaco se administrara no se consigue el deseado aborto, ?se ha pensado lo que puede significar que un porcentaje a¨²n sin determinar de los ni?os no nacidos, como consecuencia del fracaso abortivo del f¨¢rmaco, puedan tener graves deformaciones f¨ªsicas?
Realmente, a los que hemos estudiado una `carrera m¨¦dica para dar vida nos es dif¨ªcil comprender c¨®mo se puede defender la utilizaci¨®n de este f¨¢rmaco. Pero, en este caso, creo que la utilizaci¨®n de la RU-486 no s¨®lo sobrepasa la resistencia intelectual de cualquier-m¨¦dico, sino la de cualquier ciudadano.- Presidente de la Federaci¨®n Espa?ola de Asociaciones Pro Vida.
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