El enemigo infantil numero uno

A los cinco a?os, un 90% de los ni?os han tomado contacto con ¨¦l y su sistema inmunitario ha desarrollado las defensas adecuadas para convertirlo en un adversario de poca monta. Pero para algunos beb¨¦s puede llegar a ser un contrincante peligroso. Se trata de un virus llamado virus respiratorio sincitial (VRS) y es el agente causal del mayor n¨²mero de cuadros de infecciones respiratorias del aparato tractal en los ni?os. Para la mayor parte de la gente es un enemigo desconocido, aunque apenas queda ciudadano adulto que no haya lidiado con ¨¦l.

En Espa?a, cada a?o, entre 100.000 y 150.000 ni?os sufren su ataque y padecen alguna enfermedad respiratoria ligada al VRS, como la bronquiolitis o la neumon¨ªa. De ellos, m¨¢s de 15.000 llegan a precisar atenci¨®n hospitalaria, y un peque?o porcentaje de ¨¦stos, entre el 1 % y el 4%, fallece.Los ¨ªndices de mortalidad se disparan bruscamente cuando el peque?o paciente se encuentra dentro del grupo de riesgo, constituido por ni?os prematuros, receptores de trasplantes o quienes padecen diversas enfermedades como fibrosis qu¨ªstica, displasia broncopulmonar, inmunodepresi¨®n (con una tasa de mortalidad del 23%), cardiopat¨ªa cong¨¦nita (en que llega al 37%) o hipertensi¨®n pulmonar asociada (que eleva el porcentaje al 75%).

Secuelas

Seg¨²n Mart¨ªn Navarro Merino, profesor de Pediatr¨ªa de la facultad de Medicina de Sevilla, otros peligros acechan al enfermo. Tras la superaci¨®n de una bronquiolitis causada por VRS pueden aparecer secuelas tales como hiperreactividad bronquial, alteraciones de la funci¨®n pulmonar o asma infantil.Adem¨¢s, a pesar de la puesta en marcha de la respuesta del sistema inmunol¨®gico, y seg¨²n Benito Regueiro, catedr¨¢tico de Microbiolog¨ªa en Santiago de Compostela, el peligro de reinfecci¨®n en ni?os, j¨®venes e incluso adultos no desaparece nunca y pueden degenerar en cuadros cr¨®nicos pulmonares. "El virus dispone de un sistema de enga?o...".

El VRS fue aislado por primera vez en 1956 en chimpanc¨¦s por el doctor Morris. Se trata de un virus del tipo denominado RNA, que mide unos 120 nan¨®metros. Tremendamente h¨¢bil, en opini¨®n del doctor Regueiro, tiene muy poca resistencia, lo que dificulta el diagn¨®stico. "A 55 *grados durante una hora pierde un 90% de infectividad y si permanece ocho horas sobre un papel desaparece". Quiz¨¢ por eso act¨²a preferentemente en invierno y los primeros meses de la primavera.

Los sistemas de diagn¨®stico recomendables son la inmunofluorescencia con anticuerpos monoclojiales dirigidos contra el ant¨ªgeno viral y el test Elisa, tambi¨¦n mediante anticuerpos monoclonales. En ambos casos, el diagn¨®stico es muy r¨¢pido (una hora, aproximadamente), frente a los cuatro d¨ªas que tarda la t¨¦cnica de cultivo, lo que resulta importante, ya que es fundamental el tratamiento precoz en caso de que la gravedad (por fuerte insuficiencia respiratoria, por ejemplo) o la pertenencia a los grupos de riesgo aconsejen el ataque frontal al virus.

La fase cr¨ªtica de la enfermedad suele iniciarse entre las 48 y las 72 horas despu¨¦s de manifestarse los primeros s¨ªntomas (tos y disnea).

Un precio caro

Hasta fechas recientes no se dispon¨ªa de un tratamiento espec¨ªfico efectivo, pero la rivavirina, un biois¨®stero de la guanosina, sintetizada en 1972 por primera vez, se ha mostrado como un eficaz antiv¨ªrico y el VRS parece especialmente sensible a su acci¨®n.En cualquier. caso, s¨®lo parece aconsejable utilizarlo en casos graves y en enfermos con riesgo. A ello contribuir¨¢, adem¨¢s, el precio del producto. Un tratamiento completo de tres d¨ªas, per¨ªodo m¨ªnimo, cuesta unas 80.000 pesetas. A cambio, se reduce el n¨²mero de d¨ªas de estancia del enfermo en el hospital, lo que supone un considerable ahorro.

El producto se administra durante 18 horas diarias mediante inhalaci¨®n respiratoria. Se precisa de un aparato especial vaporizador que lo convierte en part¨ªculas de unas cinco micras, que son aspiradas por el paciente, que se encuentra dentro de una burbuja pl¨¢stica.

El aparato nebulizador se viene distribuyendo gratuitamente por los laboratorios Icn-Hubber, fabricantes del producto, entre los centros hospitalarios, y ya hay en Espa?a m¨¢s de 160 en funcionamiento.