Acabar con las armas qu¨ªmicas, prioridad de Bush

La desaparici¨®n de las armas qu¨ªmicas es una de las prioridades de la presidencia de George Bush, dijo ayer el secretario de Estado norteamericano, George Shultz, durante su intervenci¨®n en la Conferencia de Par¨ªs. Shultz calific¨® de "creciente amenaza para la comunidad internacional" el acceso de los terroristas a las armas qu¨ªmicas y biol¨®gicas, y en una velada alusi¨®n a Libia denunci¨® que "algunos Gobiernos conocidos como patrocinadores de movimientos terroristas disponen ahora de capacidad para producir" este tipo de armamento.

Ir¨¢n, pa¨ªs que ha sufrido en su propia carne el uso del arma qu¨ªmica, plante¨® el debate de fondo de la conferencia al acusar a las grandes potencias de alentar la fabricaci¨®n y de preocuparse solamente del uso cuando "el peligro se ha generalizado".El secretario de Estado norteamericano saliente ley¨® al iniciar su intervenci¨®n, la primera del debate, un mensaje del presidente Ronald Reagan, quien anim¨® a los delegados de los 145 pa¨ªses reunidos a "dar el paso del reforzamiento del Protocolo de Ginebra de 1925, que no es simplemente una cuesti¨®n jur¨ªdica, sino tambi¨¦n un importante avance hacia la seguridad del futuro de la humanidad". El protocolo, ratificado actualmente por 111 naciones, proh¨ªbe el uso de las armas qu¨ªmicas, pero no su fabricaci¨®n, ni prev¨¦ la destrucci¨®n de las existentes.

Shultz propuso a la conferencia el respeto de las normas internacionales, previa adhesi¨®n al Protocolo de Ginebra de los pa¨ªses que a¨²n no lo han hecho; la concesi¨®n de atribuciones a la ONU para investigar la utilizaci¨®n de las armas qu¨ªmicas; la imposici¨®n de "severas sanciones" a las naciones que las empleen, y el establecimiento de restricciones a la exportaci¨®n de tecnolog¨ªa, "sin da?ar el l¨ªcito comercio internacional". "Resulta ir¨®nico", dijo, "que esta nueva y terrible amenaza se perfile cuando hacemos progresos en el control y limitaci¨®n de las armas nucleares".

Shultz mantuvo un encuentro bilateral con el ministro de Asuntos Exteriores de la Rep¨²blica Federal de Alemania (RFA), Hans Dietrich Genscher, un d¨ªa despu¨¦s de la viva pol¨¦mica que ha enfrentado a los dos pa¨ªses a prop¨®sito de las acusaciones norteamericanas de que empresas alemanas occidentales han participado en la construcci¨®n de una. f¨¢brica de armas qu¨ªmicas en Libia. Shultz y Genscher acordaron que expertos de ambas partes se re¨²nan la semana pr¨®xima en Washington para analizar las informaciones disponibles y se mostraron de acuerdo en evitar la proliferaci¨®n. El secretario de Estado dijo estar convencido de que la RFA efectuar¨¢ todas las investigaciones necesarias para aclarar las implicaciones alemanas, mientras que Genscher afirm¨® que su pa¨ªs "har¨¢ todo lo posible" para que sus industrias no participen en la producci¨®n de armas qu¨ªmicas.

Denuncias de Ir¨¢n

En la intervenci¨®n m¨¢s comprometida de la jornada inaugural, el ministro de Asuntos Exteriores de Ir¨¢n, Al¨ª Akbar Velayati, se pregunt¨® por qu¨¦ la conferencia no se hab¨ªa reunido cinco a?os antes, tras las denuncias iran¨ªes de la utilizaci¨®n de armas qu¨ªmicas en la guerra del Golfo. Apoy¨¢ndose en sus propios datos y en las investigaciones de la ONU, Velayati denunci¨® 252 casos documentados de bombardeos con gas mostaza, cianuro y agentes nerviosos como el tabun y el sarin, y pidi¨®, sin citarlo, la condena de Irak. El ministro de Exteriores iran¨ª ¨²nicamente cit¨® directamente a Irak en tres ocasiones.

La conferencia, sin embargo, no condenar¨¢ a ning¨²n pa¨ªs porque, como afirm¨® el presidente franc¨¦s, Fran?ois Mitterrand, en el discurso inaugura?, "no es tribunal". Pese a ello, Mitterrand pidi¨® a los presentes la "condena de un arma cuya prohibici¨®n se impone". Mitterrand lig¨®, como quieren los pa¨ªses ¨¢rabes, la eliminaci¨®n del arma qu¨ªmica ,al esfuerzo m¨²ltiple del desarme". El secretario general de la ONU, Javier P¨¦rez de Cu¨¦llar, aludi¨® tambi¨¦n a las reticencias de los pa¨ªses subdesarrollados al asegurar que "la eliminaci¨®n de estas armas", que calific¨® de "monstruosamente inhumanas", "no perjudicar¨ªa la seguridad de pa¨ªs alguno".