La Inquisici¨®n y los nazis

En el n¨²mero de El Pa¨ªs Semanal del domingo 15 de enero ¨²ltimo, el se?or Simon Wiesenthal aparece declarando lo siguiente: "Por ejemplo, la Inquisici¨®n espa?ola, si hubiera tenido la tecnolog¨ªa de los tiempos de Hitler no habr¨ªa existido ninguna alternativa para los jud¨ªos. Habr¨ªan dicho: 'O te bautizas o mueres". Y el cronista dice a continuaci¨®n: "El per¨ªodo de la Inquisici¨®n espa?ola ha sido otra de sus obsesiones y al que dedic¨® varios a?os de investigaci¨®n...".Comprendo muy bien la obsesi¨®n del se?or Wiesenthal, que lo es tambi¨¦n m¨ªa y la de todos aquellos que aborrecemos la intolerancia y la inhumanidad. Pero con obsesiones no se escribe la historia. Por m¨¢s horror que a uno le inspire la Inquisici¨®n, sostener que si no perpetr¨® un genocidio como el de Hitler fue por "falta de tecnolog¨ªa" es un solemne desatino. Por desgracia, la tecnolog¨ªa para exterminar a pueblos enteros ha estado al alcance de todos los exterminadores desde siempre. Tanto el bautizo forzoso como la expulsi¨®n, y luego las persecuciones contra los conversos (que eran acusados de persistir en el culto hebraico clandestinamente), llegando a las abominaciones de la tortura y la hoguera, son cr¨ªmenes contra la humanidad que no tienen excusa, pero de ning¨²n modo pueden asimilarse con la tecnolog¨ªa de Hitler, que no daba a nadie la opci¨®n del destierro o del bautismo, sino que en vez de considerar a jud¨ªos, gitanos y otros grupos ¨¦tnicos, pol¨ªticos, homosexuales, etc¨¦tera, como seres humanos, los liquidaba con el pretexto de que tales personas eran "seres inferiores". Esto ha representado una diferencia capital para millones de interesados, no s¨®lo desde el punto de vista conceptual, sino en t¨¦rminos muy pr¨¢cticos. En resumen: aunque una y otra conducta sean repudiables, no son la misma cosa, y por cierto que la tecnolog¨ªa no tiene nada que ver- Hern¨¢n Rodr¨ªguez-Campoamor.