Toda la oposici¨®n respaldar¨¢ a los sindicatos en el debate sobre el 'estado de la naci¨®n'

Los sindicatos UGT y Comisiones Obreras han conseguido convencer a los grupos de la oposici¨®n en el Congreso de que el Gobierno es el culpable del fracaso de la concertaci¨®n y de que ha contra¨ªdo una "deuda social" con los m¨¢s desfavorecidos. Toda la oposici¨®n expresar¨¢ esta idea el pr¨®ximo martes, d¨ªa 14, en el debate sobre el estado de la naci¨®n y defender¨¢ que las reivindicaciones sindicales pueden ser asumidas por el Ejecutivo. Mientras, el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, pretende evitar que el pleno se convierta en una sesi¨®n monogr¨¢fica sobre la ruptura de la concertaci¨®n. "El debate no puede centrarse s¨®lo en las consecuencias del 14 de diciembre" afirm¨®, de manera tajante, un alto cargo de la Moncloa.

Dirigentes de las dos centrales reconocen que las reuniones que han mantenido en los ¨²ltimos d¨ªas con los grupos parlamentarios han surtido los efectos que ellos esperaban, a juzgar por la respuesta de los diputados. Tanto en UGT como en CC OO se alaba la receptividad de toda la oposici¨®n hacia sus posiciones.Para el Gobierno, el fracaso de las negociaciones con los sindicatos se compensa con otros elementos, en los que tiene mejor cubiertos los flancos. As¨ª, el consenso b¨¢sico sobre la lucha antiterrorista, las cr¨ªticas parciales al modo en que se ha cerrado el debate sobre paz y seguridad y la escasa controversia sobre la Comunidad Europea permiten a Felipe Gonz¨¢lez un balance m¨¢s positivo.

El jefe del Ejecutivo dedicar¨¢ una parte de su intervenci¨®n en el debate a analizar "el conjunto de la pol¨ªtica econ¨®mica", y tambi¨¦n pretende informar sobre la presidencia espa?ola de la CE, la lucha contra el terrorismo y el cumplimiento de los ¨²ltimos puntos del dec¨¢logo sobre paz y seguridad. La acumulaci¨®n en un solo debate de estas cuatro grandes cuestiones permite al presidente dar una idea de "globalidad" en la acci¨®n de gobierno.

Promesas incumplidas

A estas alturas, por otra parte, no se esperan ya grandes decisiones del Ejecutivo, que en buena l¨®gica ha de reservar las medidas de mayor cuant¨ªa para el programa de la pr¨®xima legislatura. El Gobierno no ha cumplido cuatro puntos clave del programa electoral socialista en 1986: no se ha creado el Consejo Econ¨®mico y Social, no se ha regulado el derecho de huelga, no se ha equiparado la pensi¨®n m¨ªnima al salario m¨ªnimo, ni se ha fortalecido la participaci¨®n institucional de los sindicatos en la gesti¨®n de intereses y derechos que les afectan. Un paquete de promesas muy conectadas entre s¨ª, cuya l¨®gica interna ha saltado por los aires por el enfrentamiento con las centrales.

El Ejecutivo se plantea elaborar una ley de huelga en la actual legislatura, "que es una promesa de nuestro programa electoral de 1986", en palabras de un ministro. De otra parte, el presidente avanz¨®, en su conferencia de prensa del viernes, su voluntad de equiparar la pensi¨®n m¨ªnima al salario m¨ªnimo, mientras que el Gobierno mantiene congelado el decreto sobre el Consejo Econ¨®mico y Social, desde que el proyecto correspondiente fuera paralizado por la Comisi¨®n de Subsecretarios, hace casi tres meses.

La oposici¨®n parte en el debate de la idea de comprensi¨®n de las posturas de los sindicatos, aunque Izquierda Unida y el CDS ser¨¢n los ¨²nicos grupos que pedir¨¢n la dimisi¨®n de Felipe Gonz¨¢lez. Los centristas, en concreto, abogar¨¢n por la disoluci¨®n de las C¨¢maras.

El CDS quiere transmitir la impresi¨®n de que el debate delmartes se centrar¨¢ en su l¨ªder, Adolfo Su¨¢rez, y en Felipe Gonz¨¢lez, habida cuenta que tan s¨®lo Su¨¢rez es candidato a la presidencia del Gobierno, pues el resto de los partidos tienen a sus candidatos fuera del Congreso, siempre seg¨²n el mensaje que traslada el CDS.

Su¨¢rez no va a desdecirse de lo manifestado el pasado 21 de enero, cuando intervino en el debate sobre las consecuencias de la huelga del 14 de diciembre. El l¨ªder centrista dijo a Gonz¨¢lez que modificara los Presupuestos Generales del Estado para atender las demandas sindicales y, si no, que convocara elecciones.

Otros grupos

Izquierda Unida ha esperado a que concluyesen oficialmente las negociaciones con los sindicatos para pedir a Gonz¨¢lez su dimisi¨®n, aunque ya algunos se han adelantado a esa propuesta. El portavoz de la coalici¨®n en el debate, Gerardo Iglesias, no se alejar¨¢ en su discurso un ¨¢pice de las tesis sindicales, seg¨²n ¨¦l mismo ha manifestado.

El representante del Grupo Popular en este pleno, Miguel Herrero, guarda celosamente el contendio de su discurso, y materialmente se ha encerrado en su domicilio para prepararlo en solitario. Otros dirigentes populares indicaron desconocer las l¨ªneas maestras de esa intervenci¨®n, aunque no dudan que, al menos Manuel Fraga, tenga conocimiento de la misma.

Miquel Roca, portavoz de Minor¨ªa Catalana, ha permanecido en Barcelona en los ¨²ltimos d¨ªas para preparar su intervenci¨®n, aunque con el apoyo de algunos colaboradores. Uno de ellos dijo a este peri¨®dico que su grupo es receptivo a las peticiones de los sindicatos y as¨ª lo expresar¨¢n. Roca recordar¨¢ a Felipe Gonz¨¢lez sus compromisos, como la cobertura de desempleo hasta un 48%. Roca se opondr¨¢ a la anticipaci¨®n de las elecciones, al estimar que el problema ser¨ªa el mismo porque los sindicatos seguir¨¢n con las mismas reivindicaciones.

Por contra, el portavoz del PNV en el Congreso, I?aki Anasagasti, se ha mostrado partidario del adelanto de las elecciones si se considera rota la paz social. "Si va a haber una escalada de confrontaci¨®n y las elecciones al Parlamento de Europa van a provocar una gran abstenci¨®n, no ver¨ªamos con malos ojos que se produjera una coincidencia de las dos convocatorias", dijo ayer Anasagasti en Bilbao, seg¨²n informa . El portavoz peneuvista, seg¨²n anteriores manifestaciones suyas, no ocultar¨¢ en el debate la frustraci¨®n de su partido por "la total indiferencia de Felipe Gonz¨¢lez ante el proceso auton¨®mico" y presentar¨¢ un amplio paquete de resoluciones en relaci¨®n con la presidencia de la CE.

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