Mujeres del Norte y del Sur

La circuncisi¨®n fara¨®nica, que consiste en la extirpaci¨®n total de los ¨®rganos genitales de la mujer, es una pr¨¢ctica todav¨ªa en uso entre las familias sudanesas musulmanas del Norte contra la que se han lanzado los Hermanos Republicanos en el marco de su amplio programa de defensa de los derechos de la mujer.Asma Mahmud, al igual que su padre, est¨¢ convencida de que los cambios de costumbres en su pa¨ªs no tienen esperanzas de imponerse desde lo alto. "Es in¨²til luchar contra estas horripilantes mutilaciones, como intentaron los colonialistas brit¨¢nicos, a trav¨¦s de prohibiciones legales, puesto que son las propias mujeres las que piden la circuncisi¨®n para sus hijas o, tras haber dado a luz, exigen que se vuelva a coser su vagina de acuerdo con otra pr¨¢ctica execrable de nuestra tradici¨®n", explica. "Hay que ejercer una labor educativa frente a las ideas oscurantistas que les han hecho asumir que su sexo es impuro y que estas costumbres son consustanciales a toda buena musulmana", a?ade.

Las mujeres del Norte y del Sur encaman en Sud¨¢n la profunda diversidad cultural, ¨¦tnica y religiosa de sus respectivas poblaciones. "En nuestras tribus no existen este tipo de pr¨¢cticas", explica Rose, una joven, de 28 a?os, cristiana y de una tribu sure?a. "Nosotras, a diferencia de las musulmanas, para quienes decide la familia, elegimos nuestros maridos", explica."En cambio, las mujeres del Norte frecuentan las Universidades y ocupan cargos en los ministerios con m¨¢s facilidad que nosotras", a?ade.

La guerra civil ha obligado a Rose a aplazar su matrimonio. La guerrilla sure?a atac¨® el poblado de su novio y rob¨® el ganado que ¨¦ste hab¨ªa reunido para su dote. Le tomar¨¢ alg¨²n tiempo recuperarlo, especialmente si, como ha acordado con su prometida en contra de la tradici¨®n, no desea la ayuda de sus familiares. ?El motivo? "Cada cabra que' ponga uno de sus primos o hermanos por m¨ª, les dar¨ªa, seg¨²n nuestras tradiciones, derecho a opinar sobre mis acciones".