Pedrol Rius ser¨¢ el nuevo abogado de la 'estirpe de B¨¦jar' en su contencioso con la familia de Ignacio Coca

Antonio Pedrol Rius, decano del Colegio de Abogados de Madrid y presidente del Consejo General de la Abogac¨ªa, obtendr¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas la venia para asumir la defensa legal de los descendientes de Francisca Coca Garc¨ªa, la denominada estirpe de B¨¦jar, en el contencioso que ¨¦stos mantienen con la familia de Ignacio Coca sobre la herencia del banquero fallecido. Hasta ahora, el representante de la estirpe de B¨¦jar era Pedro Garc¨ªa Leaniz, abogado del Estado, quien no ha querido manifestarse al respecto.La estirpe de B¨¦jar, compuesta por los ocho hijos de Francisca Coca Garc¨ªa, es la ¨²nica que no acept¨® el convenio establecido por la familia de Ignacio Coca con el resto de los herederos de Juli¨¢n Coca, fundador del banco del mismo nombre, fusionado con el Banesto.

Juli¨¢n Coca reparti¨® su herencia entre siete de sus ocho hijos, excluyendo a Federico Coca. Adem¨¢s, el testamento determinaba que Ignacio Coca tomar¨ªa tambi¨¦n la propiedad de las seis s¨¦ptimas partes correspondientes a sus hermanos, siendo los hijos de estos ¨²ltimos quienes dispondr¨ªan del usufructo correspondiente. La propiedad de los bienes pasar¨ªa a los sobrinos de Ignacio Coca siempre que aqu¨¦llos sobrevivieran -como as¨ª ha sido- al banquero fallecido.

La singularidad del testamento realizado por Juli¨¢n Coca ha dado lugar a no pocos problemas entre las distintas estirpes de esta familia, ya que la herencia recibida por Ignacio era muy inferior a la que ¨¦ste dej¨® a su muerte.

El contencioso

Los sobrinos del banquero fallecido reclamaron su participaci¨®n en los bienes sobre la base del patrimonio generado por Ignacio, dando lugar a un contencioso saldado finalmente. con el pago de 300 millones por parte de la familia del banquero fallecido; cantidad que se distribuy¨® a partes iguales entre las restantes estirpes, con la excepci¨®n de los herederos de Francisca Coca, quienes rechazaron el convenio.

Desde entonces la estirpe de B¨¦jar ha mantenido un contencioso particular con la familia de Ignacio Coca, que ahora puede alcanzar nueva dimensi¨®n con el cambio de representante legal, sin que se pueda descartar la posibilidad de un pleito.

En su caso, el pleito afectar¨ªa taribi in al Banco Espa?ol de Cr¨¦dito por la pignoraci¨®n de las acciones que en su d¨ªa pertenecieroin a Ignacio Coca y que el Bajies lo se qued¨® en prenda por el impago de deudas del antiguo Bancc Coca. La estirpe de B¨¦jar entien le que la pignoraci¨®n ha afectado a una parte de las acciones qi ie les corresponden, lesionando, consecuentemente, lo que consideran como sus leg¨ªtimos intereses.