Primero de Mayo sangriento en Turqu¨ªa
Dos personas resultaron gravemente heridas y otras 36 con heridas de bala en el transcurso de las manifestaciones -todas ellas prohibidas, conforme al precepto constitucional- que se celebraron ayer en Estambul. La polic¨ªa llev¨® a cabo no menos de 330 detenciones durante toda la jornada. La tensi¨®n fue en aumento en los ¨²ltimos d¨ªas, a ra¨ªz de las consignas sindicales para festejar este Primero de Mayo, prohibido por ley desde el advenimiento de los militares en 1980 y no rectificado hasta ahora.
El Gobierribo conservador de Turgut Ozal, que quiere aplicar al pie de la letra la Constituci¨®n de 1982, elaborada a la medida del Gobierno dictatorial de los militares, a?adi¨® nuevos elementos para reavivar la tensi¨®n, desde el momento en que la celebraci¨®n del Primero de Mayo sigue estando prohibida en Turqu¨ªa.Un total de ocho sindicatos solicitaron oficialmente el permiso para festejar este d¨ªa en la plaza de Sisli, en un c¨¦ntrico barrio de Estambul. El Gobierno Civil no concedi¨® la autorizaci¨®n, de modo que los sindicalistas, parlamentarios del Partido Populista Socialdem¨®crata y obreros se movilizaron desde el pasado 10 de abril y manifestaron su determinaci¨®n de congregarse a primeras horas de la ma?ana de ayer en la plaza de Sisli.
Cuando varios centenares de personas se congregaron en la mencionada plaza, la polic¨ªa carg¨® indiscriminadamente contra los congregados. Golpes de porra cayeron sobre los sindicalistas, los diputados y los periodistas. Fue el comienzo de la suma de los heridos.
Poco despu¨¦s se iniciaron manifestaciones espont¨¢neas lejos de la plaza de Sisli, en la plaza de Taksim y sus alrededores. Grupos de estudiantes de entre 300 y 500 personas y grup¨²sculos de obreros se manifestaron espor¨¢dicamente. Los manifestantes de la plaza de Taksim aplicaron la estrategia de la intifada palestina contra las tropas israel¨ªes, esto es, dispers¨¢ndose en el momento en que llegaban las fuerzas de seguridad, para concentrarse un poco m¨¢s lejos, reiniciar su protesta y lanzar piedras contra los polic¨ªas. Entonces sonaron de nuevo los disparos.
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