Democracia beduina

"He dedicado mi vida a cumplir mis obligaciones para con vosotros. Soy uno de vosotros, y juntos continuaremos trabajando y construyendo, mano con mano, con la ayuda de Dios, para alcanzar las aspiraciones y fines que nos hemos propuesto". Hussein de Jordania se dirig¨ªa de esta forma el pasado domingo a una delegaci¨®n de notables de la regi¨®n de Tafileh. Poco antes, los asistentes a este encuentro hab¨ªan expresado al monarca sus inquietudes y opiniones respecto a los recientes acontecimientos que han sacudido al pa¨ªs.En un bar de la autopista que une el sur con la capital, Amman, varios ancianos del lugar observaban con inter¨¦s en el televisor el desarrollo de las intervenciones de sus representantes ante el rey. El v¨ªdeo estaba en marcha. Los jefes de los grupos tribales de la regi¨®n de Ma¨¢n, origen de la revuelta de los precios, se hab¨ªan reunido con el rey el jueves anterior. En los pr¨®ximos d¨ªas desfilar¨¢n ante la corte hachem¨ª miembros de todas las tribus del pa¨ªs para renovar su promesa de lealtad. Esta forma elemental de democracia asamblearia es heredera de las costumbres tribales de la poblaci¨®n beduina que configura Jordania en su nacimiento (1921-1946). Desde entonces el pa¨ªs ha vivido una enorme transformaci¨®n pol¨ªtica y social, pero algunas de las tradiciones m¨¢s arraigadas han persistido.