Jim Wright, presidente de la C¨¢mara de Representantes de Estados Unidos, presenta su dimisi¨®n

El speaker (presidente) de la C¨¢mara de Representantes y segundo en l¨ªnea de sucesi¨®n a la presidencia de Estados Unidos, Jim Wright, anunci¨® anoche su dimisi¨®n "tan pronto como se elija" a su sucesor, e hizo un apasionado llamamiento a los congresistas para que pongan fin al "insensato canibalismo" que domina en estos momentos las relaciones entre los partidos. Su dimisi¨®n es la primera de un speaker en la historia moderna parlamentaria norteamericana.

?sta se produce horas antes de la reanudaci¨®n de las sesiones del Comit¨¦ de ?tica de la C¨¢mara, que investiga 69 posibles violaciones de las normas de conducta del Congreso por parte del pol¨ªtico tejano. "Tengo una proposici¨®n que haceros", declar¨® el dem¨®crata Wright, de 66 a?os, ante el Pleno de la C¨¢mara de Representantes, reunido ayer por tras unas cortas vacaciones. "Os devuelvo el puesto que me confiast¨¦is un d¨ªa. Os ofrezco mi dimisi¨®n, que har¨¦ efectiva en el momento en que se elija a mi sucesor".Wright anunci¨® igualmente que el caucus (grupo parlamentario) del Partido Dem¨®crata en el que se votar¨¢ un nuevo speaker ser¨¢ convocado el pr¨®ximo martes. Todo parece indicar que el sucesor de Wright ser¨¢ el veterano diputado Thomas Foley, del Estado de Washington.

Wright, que fue elegido por primera vez miembro de la C¨¢mara en 1955 por la circunscripci¨®n de Fort Worth, en Tejas, anunci¨® igualmente que dejar¨ªa su esca?o a finales de junio, poniendo fin a una carrera pol¨ªtica en Washington de cerca de 35 a?os. Su intervenci¨®n ante el Pleno de la C¨¢mara, en el que trat¨® de defenderse de las acusaciones que pesan contra ¨¦l, tuvo a veces tonos dram¨¢ticos.

En una clara referencia al Partido Republicano y principalmente a su nuevo l¨ªder en la C¨¢mara, el agresivo Newt Gringich, el speaker atac¨® a "los autonombrados vigilantes que se dedican a llevar a cabo vendettas personales" contra otros miembros del legislativo. "Es hora de poner fin a este insensato canibalismo, del que ya hemos tenido bastante", dijo, frase que le vali¨® una ovaci¨®n de la C¨¢mara puesta en pie. Wright pidi¨® que se restableciera "el esp¨ªritu de caballerosidad" que hab¨ªa imperado siempre en la C¨¢mara, e hizo un llamamiento a ambos partidos para que terminaran con los ataques personales. "Republicanos, no ataqu¨¦is a otro miembro de la C¨¢mara a causa de John Tower [la persona designada por el presidente George Bush como secretario de Defensa cuyo nombramiento fue rechazado por el Senado]. Dem¨®cratas, no os lanc¨¦is contra otra persona a causa de m¨ª".

Acusaciones

Con voz firme y mezclando la pasi¨®n con la l¨®gica, Wright trat¨® de desmontar las acusaciones que se hab¨ªan hecho contra ¨¦l, principalmente que hab¨ªa recibido regalos por valor de 140.000 d¨®lares (m¨¢s de 16 millones de pesetas) de un socio (el constructor de Forth Worth George Mallock), que su mujer, Betty, hab¨ªa cobrado un salario de 18.000 d¨®lares anuales (unos dos millones de pesetas) procedentes de una compa?¨ªa de Mallock y de que ¨¦l hab¨ªa vendido un libro (Reflexiones de un hombre p¨²blico) a organizaciones simpatizantes del Partido Dem¨®crata en un intento de evadir el l¨ªmite de 35.000 d¨®lares anuales que los congresistas pueden cobrar por intervenciones y discursos p¨²blicos.

Despu¨¦s de insistir enque "la difamaci¨®n se hab¨ªa convertido en una forma del debate pol¨ªtico", Wright explic¨® que su mujer, Betty, hab¨ªa trabajado entre 1981 y 1984 en una compa?¨ªa cuya propiedad era compartida a medias por Mallock y el matrimonio Wright.

"Hemos usado un piso de la compa?¨ªa pagando el alquiler diario y al final hemos acabado compr¨¢ndolo, y, si ustedes quieren, estoy dispuesto a vend¨¦rselo en los 58.000 d¨®lares que pagamos por ¨¦l. En cuanto al uso del Cadillac de la empresa utilizado por la se?ora Wright, la mitad de ese coche era nuestro, porque pose¨ªamos el 50% de la compa?¨ªa". En cuanto a las acusaciones de haber vendido el libro en demas¨ªa a organizaciones afines al Partido Dem¨®crata, Wright manifest¨® que s¨®lo hab¨ªa recibido por ¨¦l 3,25 d¨®lares por ejemplar vendido (475 pesetas), le, que le hab¨ªa supuesto un total de 7.700 d¨®l¨¢res. "Pero el dinero no es importante. Lo importante es el honor y la integridad de las personas", dijo.

La dimisi¨®n de Wright se produce cuatro d¨ªas despu¨¦s de que el portavoz dem¨®crata en la C¨¢mara, el representante de California Tony Coelho, tercero en el escalaf¨®n del partido, anunciara la renuncia a su esca?o antes de que se iniciara una investigaci¨®n sobre una compra de bonos basura (bonos de alto riesgo) realizada por el pol¨ªtico con un pr¨¦stamo de 50.000 d¨®lares procedentes de un amigo.

Ambas dimisiones suponen un duro golpe para los dem¨®cratas, que esperaban utilizar su dominio absoluto del Congreso para iniciar un ataque contra la Administraci¨®n republicana, en un intento de recuperar la Casa Blanca en 1992, tras tres derrotas electorales consecutivas en las elecciones presidenciales.