Emilio Garc¨ªa G¨®mez: "La adoraci¨®n de todos ha conservado la Alhambra"
El arabista recibi¨® el Premio Nacional de Historia por su estudio sobre el palacio musulm¨¢n granadino
Hay en Emilio Garc¨ªa G¨®mez dos facetas: la de viajero -sirva de ejemplo su recuerdo de c¨®mo tomaba el t¨¦ con Agatha Christie en Bagdad- y la de estudioso. Reciente premio nacional de Historia como reconocimiento a este ¨²ltimo aspecto, por Foco de antigua luz sobre la Alhambra, Garc¨ªa G¨®mez, de 84 a?os cumplidos ayer, desvela en la obra premiada enigmas del m¨¢s importante edificio civil musulm¨¢n que se conserva. Seg¨²n dice, ha sido la adoraci¨®n que todos, ¨¢rabes y cristianos, tuvieron por la Alhambra lo que ha preservado el monumento a pesar de su enorme fragilidad.
La casa de Emilio Garc¨ªa G¨®mez en Madrid tiene el suelo cubierto de alfombras riqu¨ªsimas procedentes de Irak, L¨ªbano y Turqu¨ªa. Garc¨ªa G¨®mez sabe mucho sobre tapices, pues en las reboticas de los vendedores de alfombras de Bagdad, Beirut y Ankara aprendi¨® sus secretos de fabricaci¨®n. En estas tres ciudades pas¨® 12 a?os como embajador a partir de finales de los cincuenta, y tambi¨¦n en Afganist¨¢n, donde fue ministro de Espa?a. A Garc¨ªa G¨®mez se le conoc¨ªa como El ministro en Kabul.Y mientras ocupaba estos puestos diplom¨¢ticos, para los j¨®venes arabistas espa?oles era un gran personaje sin rostro que marcaba una etapa con cada una de las traducciones y estudios que publicaba, entre los que se cuentan Poemas arabigoandaluces, El collar de la paloma, Todo Ben Quzm¨¢n e Ibn Zamrak, poeta de la Alhambra. El ¨²ltimo, Foco de antigua luz sobre la Alhambra, es en sus palabras "una obra cient¨ªfica, muy densa".
Garc¨ªa G¨®mez, acad¨¦mico, catedr¨¢tico jubilado de Lengua ?rabe en la Universidad de Madrid, regal¨® la edici¨®n del libro ahora premiado al Instituto Egipcio de Estudios Isl¨¢micos, donde fue presentado el pasado mi¨¦rcoles. Con ¨¦l completa un acercamiento que comenz¨® con Poemas ¨¢rabes en los muros y fuentes de la Alhambra, estudio sobre las inscripciones epigr¨¢ficas del monumento iniciado en 1930 y que ha ido enriqueciendo con el tiempo.
Descripci¨®n ¨¢rabe
En Foco de antigua luz sobre la Alhambra, Garc¨ªa G¨®mez incluye lo que considera como "la primera descripci¨®n ¨¢rabe del recinto". "Se trata de un documento del escritor granadino del siglo XIV Ben Al-Jatib, que relata el desarrollo y los detalles de una fiesta celebrada all¨ª el 30 de diciembre de 1362".Basado en dicho texto y en otras muchas fuentes documentales, Garc¨ªa G¨®mez logra precisar una cronolog¨ªa de la edificaci¨®n y refleja c¨®mo los reyes que vivieron en el palacio "en vez de yuxtaponer, sustitu¨ªan las construcciones". Tambi¨¦n estudia las reformas emprendidas por Carlos V, y, por ejemplo, desvela que durante el levantamiento dentro de la Alhambra del palacio que lleva su nombre el rey no destruy¨® la puerta de acceso al recinto palatino -"porque era hombre de muy buen gusto"-, sino que la traslad¨® al patio del Mexuar, o patio del Cuarto Dorado.
"A partir del siglo XVIII se dice que esa puerta solemne exist¨ªa, y que fue embestida por el palacio de Carlos V", explica el arabista. "Sin embargo, a finales del siglo XIX, opini¨®n hasta ahora predominante, se empieza a dudar de la existencia de esta entrada". Garc¨ªa G¨®mez ha despejado documentalmente las dudas que planeaban sobre el asunto, y opina que incluso pudo haber razones pol¨ªticas en el traslado, por cuanto "la puerta es s¨ªmbolo del poder entre los musulmanes; como ejemplo, en el gran imperio otomano se llamaba a la canciller¨ªa la Sublime Puerta".
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