Diaghilev, entre artistas y flamencos

Cuando, a mediados de mayo de 1916, Diaghilev toc¨® puerto en C¨¢diz —despu¨¦s de una agitada gira con sus Ballets Rusos por Estados Unidos—, lo primero que hizo fue besar la tierra espa?ola. Richard Buckle —que estar¨¢ presente en el congreso que en torno a Espa?a y los Ballets Rusos se inaugur¨® ayer en Granada y que finalizar¨¢ ma?ana, lunes— recoge la an¨¦cdota en su monumental biograf¨ªa sobre el gran mecenas y empresario ruso, Diaghilev (Nueva York, 1979), aunque no le concede excesiva credibilidad.

Pero, besara o no el suelo de la Pen¨ªnsula, la estancia de Diaghilev en Espa?a —que se prolong¨® tras esa primera gira durante buena parte de lo que dur¨® la I Guerra Mundial— fue decisiva para el empresario, para su core¨®grafo-estrella del momento, Le¨®nidas Massine (1895-1979), que pas¨® a ser identificado por su coreograf¨ªa de El sombrero de tres picos y para la historia de la cultura europea, ya que a la promoci¨®n del arte, la m¨²sica y la coreograf¨ªa rusa (Stravinski, Roerich, Bakst, Borodin, Fokine, Nijinski) que los Ballets Rusos hab¨ªan servido durante la etapa anterior (1909-1914) sucedi¨® la de los artistas pl¨¢sticos, m¨²sicos y temas espa?oles (Picasso, Sert, Mir¨®, Juan Gris, Falla, Sombrero, Las meninas) y el encuentro decisivo con el cubismo y la van guardia art¨ªstica y musical (que llev¨® a la creaci¨®n del ballet Parade —1916—, Cocteau-Massine Picasso-Satie), quiz¨¢ el m¨¢s conceptualmente revolucionario de toda la vida de los Ballets Rusos, despu¨¦s del fracaso de La consagraci¨®n de la primavera de Stravinski y Nijinski (1913).

Per¨ªodo espa?ol

Este per¨ªodo espa?ol, de contacto con los artistas, los ritmos y la pintura espa?ola —los Ballets Rusos fueron los primeros en tomar en serio y explorar las posibilidades esc¨¦nicas del flamenco, contratando al joven bailar¨ªn F¨¦lix Fern¨¢ndez Sarria—, que fue propiciado por la neutralidad espa?ola y el apoyo de Alfonso XIII a la compa?¨ªa, es, seg¨²n Vicente Garc¨ªa M¨¢rquez, el investigador de origen cubano que ha organizado el encuentro de Granada, "el per¨ªodo menos estudiado de los Ballets Rusos, porque los historiadores y bi¨®grafos del periodo nunca se animaron a venir a Espa?a a investigar". Hasta ahora, en que el propio Garc¨ªa M¨¢rquez —que prepara una biograf¨ªa sobre Le¨®nidas Miassin, m¨¢s conocido como Massine, el bailar¨ªn que sustituy¨® a Nijinski en el puesto de core¨®grafo principal y en el coraz¨®n de Diaghilev— se ha lanzado al rescate de la documentaci¨®n y los testimonios —como el de la anciana maestra Valentina Kashouba, de 91 a?os, antigua figura de la compa?¨ªa—, para llenar ese vac¨ªo.

El congreso ha creado gran expectaci¨®n en todo el mundo de la historiograf¨ªa de la danza, en este a?o cargado de nostalgia de los Ballets Rusos, en que se celebran, a la vez, el centenario del nacimiento de Nijinski (1889), el 80? aniversario del deb¨² de la compa?¨ªa (1909), el 70? del estreno de El sombrero de tres picos (1919), el 60? de la muerte de Diaghilev (1929) y el 10? de la muerte de Massine (1979).

Durante el verano de 1916, Diaghilev, Massine y su equipo se instalan en Sitges, donde preparan Las meninas (con m¨²sica de Faur¨¦ y decorados de Sert), que se estren¨® el 21 de agosto en el teatro Victoria Eugenia de San Sebasti¨¢n, y trabajan sobre la Triana de Alb¨¦niz y la Rapsodia espa?ola de Ravel, que no llegan a estrenarse. En el oto?o, en Roma, tras contactos iniciales en Par¨ªs con Picasso, surge Parade (que se estrenar¨¢ la primavera siguiente en Par¨ªs) y en mayo de 1917 vuelve la compa?¨ªa a Espa?a, esta vez con Nijinski.

Adem¨¢s del congreso —don de se presentar¨¢n 12 ponencias a cargo de especialistas en historia de la ¨¦poca, como John K. Walsh; en arte, como Guillermo de Osma o John P. Richardson, y cr¨ªticos de danza, como Lynn Garafola y Joan Acocella—, cuyos debates se centrar¨¢n, el tercer d¨ªa, en El sobrero de tres picos (de Massine, Mart¨ªnez Sierra y Falla), se abrir¨¢ una exposici¨®n de fotograf¨ªas y documentos, en buena parte in¨¦ditos, sobre Espa?a y los Ballets Rusos. Parte de este archivo documental y gr¨¢fico ha sido proporcionado por Valentina Kashouba. La Orquesta de C¨¢mara del Teatro Lliure interpretar¨¢ El sombrero de tres picos y otras obras de Falla.