Campa?a de denuncia contra Cuba y las drogas
Esta carta urgente tiene por objeto tratar de impedir el asesinato de varios altos oficiales del Gobierno cubano, entre quienes se encuentran los generales Arnaldo Ochoa y Patricio de la Guardia.Estos oficiales y otra docena de militares, ministros, diplom¨¢ticos y funcionarios del r¨¦gimen cubano son acusados de traficar con drogas procedentes de Suram¨¦rica destinadas al mercado norteamericano.
Es totalmente cierto que las fuerzas armadas cubanas, el aparato de espionaje y el servicio diplom¨¢tico de Cuba, desde hace muchos a?os colaboran con el c¨¢rtel de Medell¨ªn y son c¨®mplices del general Noriega en estas actividades, pero el juicio sumario que se les pretende hacer a estas personas no est¨¢ destinado a poner fin o a castigar estas actividades ?legales, sino a intentar demostrar que Fidel Castro y su Gobierno -pese a contar con uno de los servicios secretos mejores del mundo- ignoraban que las bases a¨¦reas y navales, las embajads y las instituciones financeras del pa¨ªs eran utilizadas para dar servicio a los narcotraficantes.
De ah¨ª que el Gobierno de Castro -acosado por las denuncias irrefutables de su complicidad con el narcotr¨¢fico- haya decidido sacrificar a unos cuantos chivos expiatorios, seleccionados, claro est¨¢, entre los elementos reformistas de su r¨¦giTen, personas todas que desearian que Cuba evolucionara en la misma direcci¨®n que la URS S de Gorbachov o la Hungr¨ªa de estos tiempos.
La manera de evitar este crimen consiste en escribirle una carta al propio Castro -palacio de la Revoluci¨®n, La Habana, Cuba-, exigi¨¦ndole que d¨¦ a los acusados garant¨ªas procesales avaladas por juristas Internacionales de reconocida solvencia.
Esta gesti¨®n debe ser r¨¢pida y masiva, porque Castro se propone liquidar a sus adversarios en muy breve tiempo- Grupo Liberal Cubano en el Exilio.
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