Camar¨®n graba en Londres con orquesta sinf¨®nica
La Royal Philharmonic colabora en 'Soy gitano', el pr¨®ximo disco del 'cantaor' gaditano
Camar¨®n de la Isla no parece dispuesto a que los aficionados al flamenco dejen de sorprenderse y polemizar. Tras su disco Flamenco vivo, sujeto a los c¨¢nones del cante jondo, el cantaor ultima la grabaci¨®n de Soy gitano, un trabajo en el que colaborar¨¢n la Royal Philharmonic Orchestra y Ana Bel¨¦n. La solicitada orquesta brit¨¢nica acaba de grabar en Londres cuatro canciones de este ¨¢lbum, que se publicar¨¢ en Espa?a el pr¨®ximo mes de octubre, ante la presencia callada de un Camar¨®n que quiere llegar a un p¨²blico m¨¢s amplio sin perder la pureza de la tradici¨®n del cante flamenco.
La Royal Philharmonic es la orquesta sinf¨®nica brit¨¢nica m¨¢s solicitada por su competencia en grabar r¨¢pidamente, con intenci¨®n y buen sonido cualquier tipo de m¨²sica. Pero con el flamenco de Camar¨®n tuvo problemas. En los estudios Abbey Road, en un Londres invadido por la fiebre Batman, grabaron cuatro canciones del pr¨®ximo disco del cantaor, bajo la direcci¨®n de Jes¨²s Bola, autor de los arreglos. En la primera, Soy gitano, que dar¨¢ t¨ªtulo al disco, los 40 m¨²sicos de la orquesta mostraron problemas de adaptaci¨®n y Camar¨®n y su equipo a¨²n deber¨¢n seleccionar los mejores momentos de las tomas realizadas. Durante la sesi¨®n, Ricardo Pach¨®n, productor del disco, se dirig¨ªa a Jes¨²s Bola que, batuta en mano, intentaba que m¨²sicos de formaci¨®n cl¨¢sica se adaptasen a la intuici¨®n del flamenco: "Dale ca?a a esa gente. Diles que se acuerden de Jerez".Tres horas
La grabaci¨®n se hizo con las prisas a las que obliga la necesidad de no salirse del presupuesto. Una sesi¨®n de tres horas de la Royal Philharmonic Orchestra en los estudios Abbey Road cuesta m¨¢s de un mill¨®n de pesetas. Tres horas y un minuto significa otra sesi¨®n y el precio se duplica. Ser¨¢ el disco de producci¨®n m¨¢s cara y pol¨¦mica de los 17 que ha grabado el cantante de la isla de San Fernando, y contar¨¢ con la colaboraci¨®n de Ana Bel¨¦n en la canci¨®n Amor de conuco. "Es una canci¨®n como salsa, pero m¨¢s nuestra", dice Camar¨®n.
Soy gitano se publicar¨¢ a primeros de octubre con una tirada inicial de 50.000 ejemplares, cantidad superior a las ventas de Flamenco vivo, anterior disco de Camar¨®n, grabado en directo dentro de los c¨¢nones del cante jondo. El intento de Camar¨®n y su equipo de ampliar la audiencia es evidente. "No est¨¢ mal que Camar¨®n atraiga algo del p¨²blico de los Gipsy Kings, porque el hecho es que las seguiriyas puras no se venden", dice Ricardo Pach¨®n. "No puedo dar la marcha de la gente esa", responde el cantaor, "porque si no, no veas".
Camar¨®n se mantiene en silencio. Atento, escucha c¨®mo alguien dice aquello de "aqu¨ª grabaron los Beatles", para que otro apostille: "S¨ª, los Beatles de C¨¢diz". S¨®lo entonces sonr¨ªe, olvidando su cansancio y los deseos de regresar a casa cuanto antes. Ha dado m¨¢s de 25 recitales en los ¨²ltimos cuatro meses que, unidos a los tres de trabajo en un estudio de Sevilla para realizar el disco, evidencian una fatiga aumentada por un reciente c¨®lico que casi le impide asistir a la grabaci¨®n en Londres. En el estudio, Camar¨®n observa y calla. No tiene que enfrentarse al micr¨®fono. "T¨² ver¨¢s", dice refiri¨¦ndose al momento de grabar su voz, "a veces le coges una cosa que yo no s¨¦ lo que es. Estoy bien, pero entro en el estudio, se me pone una cosa en la garganta y no puedo cantar. A tocar la guitarra y bailar, se aprende, pero a cantar no". Concentrado en el trabajo de la orquesta "todav¨ªa no la he podido entender ni captar"-, s¨®lo intenta explicar la idea del disco cuando acaba la Royal Philharmonic: "Siempre haciendo cosas nuevas y que me gusten. Tratamos de enriquecer el flamenco en algo".
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