Los presupuestos en estudio para 1990 no incluir¨¢n medidas fiscales para aumentar los ingresos
El aumento de los ingresos presupuestarios previstos para 1990 ser¨¢ una consecuencia directa del crecimiento vegetativo normal de estos ingresos, seg¨²n fuentes pr¨®ximas a la Secretar¨ªa de Estado de Hacienda. "No va a haber medidas fiscales en el pr¨®ximo presupuesto", aseguraron. Por otro lado, el ministro de Econom¨ªa, Carlos Solchaga, afirm¨® ayer que su departamento no excluye la adopci¨®n de una reglamentaci¨®n "m¨¢s dura" de las ventas a plazo si el gasto en consumo no se reduce.
"Los presupuestos de 1990 no van a introducir ninguna medida sustantiva de car¨¢cter fiscal", aseguraron ayer fuentes cercanas al Ministerio de Econom¨ªa. El 11 % de crecimiento previsto de los ingresos ser¨¢, por tanto, el resultado del crecimiento vegetativo de ¨¦stos y no de ning¨²n aumento en la presi¨®n tributar¨ªa.La ralentizaci¨®n de los gastos, que crecer¨¢n un 8,7%, obedecer¨¢ tanto a una clara disminuci¨®n de las transferencias de capital, sobre todo a las empresas p¨²blicas, como a un menor crecimiento de las inversiones en servicios p¨²blicos. Las inversiones en infraestructuras, sin embargo, mantendr¨¢n un crecimiento cercano al 12%.
El recorte en las transferencias de capital -que ser¨¢n este a?o de poco m¨¢s de 900.000 millones de pesetas, con una disminuci¨®n superior al 2%- es, seg¨²n fuentes de Hacienda, el resultado de la buena marcha de las empresas p¨²blicas. Este ahorro p¨²blico obedece, pues, al descenso en las transferencias a las empresas del INI.
El menor gasto presupuestario en empresas p¨²blicas est¨¢ en consonancia con la aportaci¨®n presupuestaria que se destinar¨¢ este a?o al Ministerio de Industria. Este departamento, junto con el de Relaciones con las Cortes, experimentar¨¢ un descenso en su presupuesto del 5,9%, es decir, recibir¨¢ 12.466 millones de pesetas menos de las arcas del Estado.
La reducci¨®n del ritmo de crecimiento de los gastos corrientes es el segundo componente del descenso del gasto p¨²blico previsto para el pr¨®ximo a?o. En concreto, el crecimiento esperado en este cap¨ªtulo ser¨¢ del 3,9%. En la disyuntiva entre hacer descansar este menor crecimiento entre la remuneraci¨®n de los empleados del sector p¨²blico y una ralentizaci¨®n del ritmo de crecimiento de las inversiones en servicios p¨²blicos, el Gobierno pretende inclinarse por la segunda opci¨®n. El freno al gasto corriente tiene como dificultad a?adida que la mayor parte de esos gastos ya est¨¢ comprometida, por lo que el Gobierno s¨®lo pretende, en principio, posponer en todo lo posible las mejoras en servicios p¨²blicos en el pr¨®ximo a?o. Estas medidas restrictivas tienen como objetivo com¨²n colaborar al enfr¨ªamiento de la demanda hasta conseguir un crecimiento del producto interior bruto (PIB) del 4%, en t¨¦rminos reales, con un crecimiento de la demanda del 5,2% y del consumo privado de un 3%.
El freno al consumo privado es uno de los objetivos prioritarios del Gobierno y al que van dirigidas de forma prioritaria las ¨²ltimas medidas fiscales y monetarias que ha adoptado el Gobierno. De resultar insuficientes, el Ejecutivo no descarta el endurecimiento de la reglamentaci¨®n de las ventas a plazos, seg¨²n coment¨® ayer el ministro Solchaga tras el debate en el Senado del proyecto de ley de adaptaci¨®n del IRPF y el impuesto sobre el patrimonio.
Esta ley de adaptaci¨®n estar¨¢ en vigor hasta que se apruebe la nueva legislaci¨®n de renta y patrimonio, sobre la que empezar¨¢ a trabajar Hacienda el pr¨®ximo d¨ªa 10 de agosto.
La reforma fiscal que se va a acometer tendr¨¢ que variar la unidad contribuyente desde la familia, como ven¨ªa siendo hasta ahora, hacia el individuo, seg¨²n coment¨® ayer el secretario de Estado de Hacienda, Jos¨¦ Borrell, en el curso Transformaciones econ¨®micas e informaci¨®n en la Espa?a de los ochenta, desarrollado en Miraflores y que clausur¨® ayer el director de EL PA?S, Joaqu¨ªn Estefan¨ªa.
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