Llanto por los Celtas
Espa?a ca?¨ª. Un nieto de Valle-Incl¨¢n nos sorprende de la noche a la ma?ana con que Tabacalera no va a fabricar nunca m¨¢s el bendito Celtas, compa?ero generoso de dosis y sobredosis, noches eternas y amaneceres clandestinos. Esto no envenena. Sana.Pero con el mercado hemos topado; el marketing dice que la legislaci¨®n antihumos no hace rentable el producto. Para llorar. Por activa o por pasiva, s¨®lo podemos consumir chismes light o estandarizados. ?D¨®nde qued¨® nuestra libertad de envenenarnos lentamente con lo que queramos? Nos fastidiaron. Pero el presidente de Tabacalera, SA, en el a?o en que vivimos se sacar¨¢ el Premio Nobel dedicado a la salud medioambiental; aparte, entrar¨¢ por la puerta grande en el Guinness por antidem¨®crata y no someter al voto de sus ciudadanos la chapuza realizada con nocturnidad, premeditaci¨®n y alevos¨ªa. Si a la hora de pagar Hacienda somos todos, ?por qu¨¦ a la hora de consumir no se tiene en cuenta a las minor¨ªas ¨¦tnicas? Esperemos, para que no se resienta nuestra salud, que los componentes de la peseta connection lo arreglen y no se pare la producci¨®n; no s¨®lo de camellos o ch¨²rchiles de batea vive el hombre; la ganancia bajar¨¢, pero Tabacalera arguye lo mismo, as¨ª que tranquis; reciclaos en honestos y prestad un servicio p¨²blico a la comunidad. El Estado nos abandon¨®.
En fin, me curo en salud, pero me carcajeo de las drogas duras si tengo que perder este encantador compa?ero de viaje. Se?ores legisladores, ?con cu¨¢ntos gramos de Celtas se podr¨¢ circular a partir de 1989 sin incurrir en delito? Mi pap¨¢, por mor de los achuchones que da el coraz¨®n, lleva 21 a?os sin fumar y est¨¢ felizmente vivo, aunque despidi¨® su vida activa de vicioso con un Celtas. Un gourmet tabaquero. M¨¢s crudo nos queda a nosotros. o un pitillo-hamburguesa o dejarlo en una UCI por cambio de h¨¢bitos.-
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