Bush nombra al general negro Colin Powell jefe del Estado Mayor Conjunto

Colin L. Powell, un general de cuatro estrellas, con dos t¨ªtulos universitarios, hijo de emigrantes jamaicanos, se convertir¨¢ a partir del 30 de septiembre pr¨®ximo en el primer negro que desempe?a la presidencia de la junta de jefes de Estado Mayor de EE UU, el cargo militar m¨¢s importante de Estados Unidos. El nombramiento de Powell, un neoyorquino de 52 a?os, fue anunciado ayer por la Casa Blanca, que no prev¨¦ ninguna dificultad para conseguir la necesaria confirmaci¨®n senatorial.

El general Powell, ¨²ltimo asesor de Seguridad Nacional del presidente Ronald Reagan, desempe?aba en la actualidad el mando de las tropas de tierra estacionadas en el territorio metropolitano de Estados Unidos y sustituir¨¢ en el cargo al actual jefe del Estado Mayor Conjunto, almirante William Crowe, que se retira el pr¨®ximo oto?o. Un admirador de Martin Luther King -su segundo nombre es Luther-, Powell pertenece al tipo de militares intelectuales, que tanto abundan en las fuerzas armadas norteamericanas y entre los que en encuentran el propio almirante Crowe y el comandante supremo aliado en Europa, general, John Galvin.

Nacido en el suburbio neoyorquino del Brorix en 1937, Powell recibi¨® su despacho de segundo teniente en West Point en 1958 para despu¨¦s obtener una licenciatura en Geolog¨ªa por la Unversidad de la ciudad de Nueva York y un doctorado en administraci¨®n de empresas por la prestigiosa Universidad de Georgetown, en Washington.

Su hoja de servicios es impecable. Powell sirvi¨® durante dos per¨ªodos en Vietnam y fue herido en combate y condecorado con la Medalla de Bronce y el Coraz¨®n de P¨²rpura. En Corea desempe?¨® el mando de un regimiento de infanter¨ªa y estuvo al frente de una brigada en la famosa 101 Divisi¨®n Aerotransportada. Al ascender a general de divis¨®n, fue puesto al frente del V Cuerpo de Ej¨¦rcito, en Europa.

Experiencia pol¨ªtica

Su experiencia pol¨ªtica y diplom¨¢tica es considerable. Tras servir corno ayudante militar del entonces secretario de Defensa, Caspar Weinberger, Powell se incorpor¨® en 1987 al Consejo de Seguridad Nacional a las ¨®rdenes directas del titular, Frank Carlucci. Cuando Reagan nombr¨® a Carlucci secretario de Defensa, ¨¦l se convirti¨® en asesor de seguridad del presidente en un momento en que el ¨®rganismo estaba completamente desacreditado tras el esc¨¢ndalo Irangate y lo que se conoc¨ªan como las t¨¢cticas de cowboy de Oliver North. Sin ideolog¨ªa conocida y pol¨ªticamente independiente, Powell es considerado un pragm¨¢tico que no tiene ning¨²n inconveniente en expresar sus opiniones a¨²n cuando ¨¦stas sean contrarias a las de sus jefes. Sus colaboradores se?alan que, por ejemplo, en el tema de la ayuda a la contra nicarag¨¹ense, Powell defendi¨® siempre la teor¨ªa, frente a la mantenida por Reagan, de que los rebeldes antisandinistas constitu¨ªan una fuerza militar de utilidad limitada y que, pol¨ªticamente, eran una causa perdida.

Como asesor de Seguridad Nacional, Powell jug¨®, junto a Crowe, un papel decisivo en la articulaci¨®n del tratado sobre eliminaci¨®n de misiles de corto y medio alcance firmado por Reagan y el presidente sovi¨¦tico, Mijail Gorbachov. Sin embargo, Powell es m¨¢s cauto que su antecesor en el tema del desarme convencional.

Como otros altos dirigentes del Pent¨¢gono, no es partidario de utilizar el poder¨ªo militar sin objetivos perfectamente definidos, como ocurre con la vol¨¢til situaci¨®n en Oriente Pr¨®ximo. Su nombramiento se considera tambi¨¦n en Washington como un acierto de George Bush, a quien se ha acusado de no incluir a demasiados negros entre los altos cargos de su Administraci¨®n.