La Convenci¨®n de los Derechos del Ni?o obligar¨¢ a los Gobiernos a proteger legalmente a los peque?os
"Condenar a un ni?o a muerte es un crimen". Adam Lopatka, responsable del grupo de trabajo de las Naciones Unidas que ha redactado la Convenci¨®n de los Derechos del Ni?o, no se lo piensa dos veces. La pena capital infligida a los menores se proh¨ªbe expresamente en este texto. "El no condenar a muerte a los ni?os debe ser observado incluso por aquellos pa¨ªses que no vayan a firmar la convenci¨®n", en una referencia impl¨ªcita a EE UU, pa¨ªs que probablemente se abstendr¨¢ de firmarla y donde varios menores condenados a muerte ven peligrar su vida.
"Ser¨¢ el primer tratado internacional, universal y multilateral que de una manera general establece los derechos internacionalmeme reconocidos del ni?o como un ser humano. Abarca estos derechos y es apropiado para las caracter¨ªsticas y necesidades del ni?o. La convenci¨®n vincular¨¢ a los pa¨ªses que la ratifiquen", anunci¨® ayer solemnemente el polaco Adam Lopatka en El Escorial. Y no es para menos. Once a?os de trabajo, 43 pa¨ªses participantes y m¨¢s de 30 organizaciones no gubernamentales han consensuado la Convenci¨®n de los Derechos del Ni?o bajo la direcci¨®n de Lopatka. Dos meses m¨¢s y las Naciones Unidas habr¨¢n refrendado este documento, que, por primera vez en la historia del la legislaci¨®n internacional, incorpora los derechos del ni?o a un tratado con fuerza coercitiva para los 90 Estados que, previsiblemente, lo adoptar¨¢n. En la azarosa historia de la redacci¨®n del texto, que tiene 53 art¨ªculos, hubo problemas incluso en la misma definici¨®n del ni?o, que finalmente resulta "todo ser humano menor de 18 a?os", aspecto que Adam Lopatka, presidente del Tribunal Supremo de Polonia y tambi¨¦n ex ministro de Asuntos Religiosos y ex parlamentario en dos legislaturas, matiz¨®: Se entiende que la convenci¨®n salvaguardar¨¢ los derechos de los nacidos, sin mencionar a los fetos.
Respecto a la pena de muerte a menores, recientemente aprobada en EE UU, Lopatka dice que las organizaciones internacionales deben moverse para impedir que ning¨²n ni?o esa ejecutado. "Los peque?os siempre pueden ser reeducados, les queda mucha vida por delante", asegura.
"Hasta ahora no hab¨ªa un control de la situaci¨®n de la infancia", contin¨²a Lopatka. "El nuevo texto contribuir¨¢ mucho a unificar la situaci¨®n de los ni?os en el mundo mediante la creaci¨®n de una serie de m¨ªniinos". Lopatka est¨¢ especialmente satisfecho de los art¨ªculos relacionados con la salud: "Son los m¨¢s ambiciosos, porque el nivel de cuidados m¨¦dicos exigible debe ser muy alto".
Peque?os soldados
El texto proh¨ªbe expresamente que los ni?os menores de 15 a?os se vean envueltos en hostilidades o sean reclutados por las fuerzas armadas. Todos los peque?os afectados por conflictos armados tendr¨¢n el derecho de recibir protecci¨®n y cuidados especiales. Datos del Fondo Internacional de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) indican que las mujeres y los ni?os son las primeras v¨ªctimas de las calarnidades naturales y de las guerras. James P. Grant, presidente del organismo, calcula en 40.000 los ni?os que mueren cada d¨ªa en el mundo. La novedad del texto sobre la Declaraci¨®n de los Derechos del Ni?o, que data de 1959, insiste Lopatka, es que los 90 pa¨ªses que se espera que la ratifiquen -este jurista tiene dudas sobre la posible firma de pa¨ªses como EE UU- deber¨¢n incluir en su ordenamiento jur¨ªdico la obligaci¨®n de proteger a los ni?¨ªos de la explotaci¨®n laboral, el maltrato, la tortura o la privaci¨®n de libertad, por ejemplo. "Los pa¨ªses que no se adhieran s¨®lo recibir¨¢n cr¨ªticas", algo que Lopatka no menosprecia, porque es "dif¨ªcilmente tolerable" para los Gobiernos. Habr¨¢ pa¨ªses, afirma de forma apesadumbrada, "los m¨¢s pobres", que no podr¨¢n comprometerse a facilitar a los ni?os seguridad social y cuidados de salud, y por tanto no firmar¨¢n la convenci¨®n. Los que lo hagan ser¨¢n vigilados por un comit¨¦ de 10 expertos de reconocida competencia que examinar¨¢ los informes elaborados por los propios Gobiernos.
"El ni?o es un ser ¨²nico, no un proyecto", dice Lopatka como un eco de varios art¨ªculos de la convenci¨®n que reconocen el derecho de opini¨®n, la libertad de expresi¨®n, de pensamiento, conciencia, religi¨®n, asociaci¨®n, protecci¨®n de la vida privada y acceso a informaci¨®n adecuada. El texto rechaza el concepto de hijo ileg¨ªtirno y previene contra la discriminac¨ª¨®n por raz¨®n de raza, sexo, lengua... Este jurista est¨¢ "muy satisfecho" del trabajo, durante la elaboraci¨®n del texto, de la delegaci¨®n espa?ola y de "su eficacia", y sabe ya de la elaboraci¨®n en Espa?a "de una ley comprensiva de los derechos de los ni?os".
Un informe reciente elaborado por la Comisi¨®n de Derechos Humanos del Senado sobre la problem¨¢tica del menor reclamaba una ley de derechos del mismo, debido a "las graves situaciones de indefensi¨®n y desamparo", de los ni?os en Espa?a.
La ministra de Asuntos Sociales, Matilde Fern¨¢ndez, anunci¨® el lunes pasado la inminente presentaci¨®n de la ley en el Parlamento. Lopatka recomienda a los espa?oles que "animen al Parlamento a impulsar la situaci¨®n legal y social de los ni?os y protegerles contra toda clase de abusos".
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