El tratamiento del SIDA con AZT puede cambiar el tipo de asistencia sanitaria en Estados Unidos
El anuncio por parte de las autoridades sanitarias de Estados Unidos de que la zidovudina, antes llamada acidotimidina o AZT, retrasa el desarrollo del virus que provoca el SIDA puede tener unas consecuencias imprevisibles en el sistema norteamericano de asistencia social. Cientos de miles de personas que hasta ahora no se hab¨ªan preocupado del virus, a pesar de ser portadoras, podr¨ªan a?adirse a la larga lista de afectados, cuyo tratamiento con AZT representar¨ªa un coste de miles de millones de d¨®lares que alguien deber¨¢ pagar. La pregunta que se formula ahora este pa¨ªs es qui¨¦n va a pagar.
Expertos en salud han afirmado que es "imperativo", para las personas que crean haber estado en contacto con el virus, que se realicen an¨¢lisis para saber con certeza si son o no portadores. Estos expertos estiman que la cifra de portadores del SIDA sin sintomatolog¨ªa aparente alcanza los 650.000 individuos, s¨®lo en Estados Unidos. Las l¨ªneas calientes de los tel¨¦fonos del SIDA de todo el pa¨ªs han experimentado en las ¨²ltimas 48 horas un aluvi¨®n de llamadas procedentes de personas interesadas en el AZT, sus propiedades y los lugares donde pod¨ªan hacerse los an¨¢lisis.Ese incremento de llamadas comenz¨® ya hace dos semanas cuando trascendi¨® oficiosamente que el AZT pod¨ªa detener o retrasar el proceso del virus en personas con suaves manifestaciones de la enfermedad o en afectados sin sintomatolog¨ªa apreciable. Ayer domingo, 72 horas despu¨¦s del anuncio efectuado por el secretario de Sanidad y Servicios Humanos del Gobierno de Estados Unidos, Louis W. Sullivan, las preguntas sobre el AZT han comenzado tambi¨¦n a contestarse desde los medios de comunicaci¨®n. El tratamiento del AZT cuesta entre 7.000 y 8.000 d¨®lares por paciente y a?o (m¨¢s de 900.000 pesetas). Ese precio podr¨ªa bajar de inmediato, porque, seg¨²n los expertos, peque?as dosis son suficientes para intentar detener el virus. Algunos analistas predicen que el AZT, fabricado por la Burroughs Wellcome Company, ser¨¢ una de las drogas m¨¢s vendidas del mundo.
Avalancha de pacientes
El anuncio va a representar una avalancha inmediata de nuevos pacientes, ha explicado Richard Burzon, un cient¨ªfico del Institu to de Medicina de la Academia
Nacional de Ciencia de EE UU, quien ha realizado durante los ¨²ltimos a?os numerosos estudios sobre el coste del SIDA. "Creo que hacer an¨¢lisis a todos los posibles portadores de la enferme dad y suministrarles AZT puede costar miles de millones de d¨®lares. Eso crear¨¢ ' una enorme presi¨®n pol¨ªtica para que sea considerado un nuevo plan de asistencia sanitaria, y si no se consigue, el Gobierno se ver¨¢ obligado a considerar el desv¨ªo de una importante partida de dinero para hacer frente al problema".
Alrededor de 45.000 norteamericanos sufren en estos momentos algunos s¨ªntomas de la enfermedad y se cree que entre uno y dos millones podr¨ªan estar infectados con el virus de la inmunodeficiencia humana (HIV). En opini¨®n de Jim Grahan, administrador de la Whitman Walker Clinic de Washington, "el anuncio de que el AZT puede detener el virus ha sido muy importante, porque ha provocado un cambio fundamental en c¨®mo nos vamos a enfrentar al SIDA". Seg¨²n Grahan, "a partir de ahora podemos explicar a quienes sufren laenfermedad que pueden prolongar su vida con un alto nivel de calidad si son diagnosticados y tratados de forma inmediata".
El AZT o acidotimidina, desarrollado por el Gobierno de EE UU y la WeIlcome, es la ¨²nica droga autorizada en el mundo para el tratamiento del SIDA. Para las personas que sufren los s¨ªntomas completos de la enfermedad, el coste de un a?o de tratamiento asciende a 8.000 d¨®lares, con una dosis de 1.200 miligramos diarios. Seg¨²n Wellcome, unos 20.000 pacientes se est¨¢n costeando el tratamiento con su propio dinero, mientras que otros 7.000 se est¨¢n beneficiando de tratamientos gratuitos.
Los nuevos resultados indican que las personas con pocos o ning¨²n s¨ªntoma, pero que se hallan infectadas, deber¨ªan comenzar a suministrarse lo antes posible dosis de 500 miligramos, loque elevar¨ªa el coste de su tratamiento a 3.500 d¨®lares al a?o. Su vida puede salvarse. El SIDA, sin embargo, se est¨¢ perfilando como una enfermedad cr¨®nica, o cuando menos, una larga enfermedad. Esto significa que los tratamientos de AZT ser¨¢n muy largos y que su coste alcanzar¨¢ decenas de miles de d¨®lares. El hecho de que algunos de los infectados pertenezcan a clases sociales muy bajas y sin ning¨²n tipo de seguro m¨¦dico obligar¨¢ al Gobierno norteamericano a ocuparse de esos casos.
En estos momentos s¨®lo existe un programa federal de ayuda a los infectados por el SIDA, y ese programa termina el pr¨®ximo mes de septiembre. Fuentes oficiales han se?alado que no existen a¨²n motivos que permitan pensar que esas ayudas continuar¨¢n, porque ni el Congreso, ni el Departamento de Sanidad y Servicios Humanos, ni la Administraci¨®n del presidente Bush han anunciado que vayan a continuar desarrollando ese plan.
El AZT ha provocado tambi¨¦n una batalla comercial entre las industrias l¨ªderes del sector qu¨ªmico. Algunas empresas, como la Bristol-Myers Company, de Nueva York, est¨¢n desarrollando una nueva droga que podr¨ªa sustituir al AZT, ya que su coste es ligeramente inferior. Otra droga, la DDC, elaborada por la compa?¨ªa suiza F. Hoffman-La Roche, est¨¢ tambi¨¦n a punto de alcanzar logros positivos en el tratamiento del virus.
Tras el anuncio de Sullivan, los grupos homosexuales, los m¨¢s afectados por el virus en EE UU, han comenzado una gran batalla para conseguir que el AZT sea suministrado de forma gratuita. "Tenemos que hacer accesible la droga a todos los que la necesiten", dice Urvashi Vaid, director de una asociaci¨®n nacional de homosexuales.
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