Una fiscal dura y muy trabajadora

Carmen Tagle, madrile?a, de 44 a?os, era una fiscal muy trabajadora y que manten¨ªa con pasi¨®n, y en ocasiones con dureza, las acusaciones en los juicios en los que interven¨ªa, fundamentalmente asuntos de terrorismo. En la actualidad estaba adscrita a los casos que tramitaba el Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 5, cuyo titular es el magistrado Baltasar Garz¨®n, que ayer se encontraba muy afectado, al igual que otros magistrados de la Audiencia Nacional que acudieron al lugar del atentado; entre ellos, Carlos Bueren, Roberto Hern¨¢ndez o Javier G¨®mez de Lia?o.

Soltera y de ideolog¨ªa conservadora, aunque no militaba en ning¨²n partido, Carmen Tagle destacaba entre sus compa?eros por los ataques hacia el terrorismo y otros delitos de trascendencia social, como las drogas o los ataques sexuales contra las mujeres. Su capacidad de trabajo era impresionante, seg¨²n sus compa?eros. "Trabajaba a todas horas, sal¨ªa muy poco, ¨²nicamente com¨ªa un bocadillo a mediod¨ªa y descansaba fumando un cigarrillo mientras ve¨ªa el telefilm de despu¨¦s del telediario. Despu¨¦s se en frascaba en el trabajo hasta bien entrada la noche", afirma una magistrada que la conoc¨ªa bien.Ahora, aparte de los casos de ETA, el asunto de Fidecaya le absorb¨ªa la mayor parte de su tiempo, debido a la complejidad del caso y a la gran extensi¨®n del sumario.

Carmen Tagle viv¨ªa sola, desde que vino a Madrid hace cuatro a?os, procedente de Barcelona, donde estuvo destinada como fiscal de la Audiencia. Su hermana, Maribel, psic¨®loga de carrera, pero que trabaja como funcionaria en la fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional, vive con sus padres.

La fiscal asesinada se hizo famosa en Barcelona por el caso del violador del Eixample, y ya en la Audiencia Nacional, por su calificaci¨®n en el asunto de Rumasa, en la que solicit¨® 12 de a?os de prisi¨®n para Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos.

Hace varios meses acompa?¨® al juez Baltasar Garz¨®n a Par¨ªs, para asistir a los interrogatorios de los dirigentes de ETA Santiago Arr¨®spide Sara sola, Santi Potros, Jos¨¦ Antonio Urruticoetxea Bengoetxea, Josu Ternera, y Elena Beloki. Al regresar comentaba que Potros hab¨ªa estado correcto y educado, mientras que Ternera se hab¨ªa mostrado crispado.

Carmen Tagle particip¨® el pasado 18 de abril durante una hora en el programa de Radio Nacional Escrito en el Aire, en el que hizo una amplia reflexi¨®n sobre las condiciones penales de los presos etarras. La fiscal se?al¨® que en virtud del actual ordenamiento legal espa?ol, los terroristas pueden beneficiarse de las mismas reducciones de penas que afectan a cualquier delincuente com¨²n. "Aqu¨ª", dijo, "se paga lo mismo por matar a una persona que por matar a siete. Adem¨¢s, los terroristas se benefician de los mismos beneficios, valga la redundancia, de los de cualquier delincuente com¨²n, salvo el tercer grado que permite que el condenado salga en libertad provisional".

Posibles privilegios

La fiscal puso un ejemplo concreto: "Cualquier terrorista condenado; Mercedes Galdos, por decir un nombre concreto y poner un ejemplo. Esta mujer, con muchos muertos a su espalda y condenada a miles de a?os de prisi¨®n, se va a beneficiar de las correcciones legales que contempla nuestro ordenamiento. Esta mujer como mucho va a cumplir 30 a?os, pero ni siquiera cumplir¨¢ eso, ya que se aplican las redenciones de dos d¨ªas que afectan a cualquier delincuente com¨²n".

En la misma entrevista, Tagle habl¨® de los posibles privilegios de los presos etarras en las c¨¢rceles. "Los tienen", manifest¨®, "pero hablo de privilegios con la ley en la mano. Los otros no los conozco".

Carlos Jim¨¦nez Villarejo conoci¨® a Tagle en 1982, cuando se incorpor¨® al Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 8 de Barcelona, donde permaneci¨® durante tres a?os. Recuerda que la ¨²ltima ocasi¨®n que estuvo con ella con cierta tranquilidad" fue en noviembre de 1987, durante unas jornadsas organizadas por el Banco de Espa?a y el Ministerio de Justicia sobre crisis bancarias. Recuerda Jim¨¦nez Villarejo que la fiscal Tagle acababa de hacerse cargo del caso de Rumasa "y su participaci¨®n fue apasionada". "Era una persona muy consciente, totalmente entregada a su profesi¨®n, que ejerc¨ªa con una enorme valent¨ªa". El fiscal jefe de la Audiencia de Barcelona, que indica que Tagle era capaz de acomoter y ejercer el ministerio p¨²blico "contra cualquier tipo de delitos", se?ala que su perfil profesional era muy completo: "Era el de un fiscal que ha asumido su dimensi¨®n en un Estado democr¨¢tico".

Jimenez Villarejo recuerda tambi¨¦n c¨®mo Tagle se ofreci¨® voluntaria, "a pesar de llevar dos a?os en la carrera", para intervenir en el caso Banca Catalana, "lo que expresaba una voluntad de servicio y una gran categor¨ªa". "Ten¨ªa una responsabilidad viva y era muy valiente, tanto si interven¨ªa en delitos comunes, econ¨®micos o de terrorrismo". Recuerdo ahora que, en la Junta de Fiscales de Barcelona, su presencia era "vivificadora". Jim¨¦nez Villarejo manifest¨® que el asesinato de Tagle ha creado en la fiscal¨ªa de Barcelona, que hoy celebrar¨¢ un acto de homenaje a su compa?era, "un profundo dolor". Jim¨¦nez Villarejo dice que, quiz¨¢ por su estilo agresivo, Carmen Tagle era conocida como la fiscal de hierro, "apelativo que ella tomaba con enorme sentido del humor.

Do?a Carmen

Fernando Salas, abogado que estudi¨® en Madrid la carrera de Derecho con ella entre los a?os 1965 y 1970, recuerda que "Carmen era entonces una mujer de talante autoritario. Era la t¨ªpica buena estudiante que siempre te prestaba los apuntes. Tuvimos mucha relaci¨®n, luego dej¨¦ de verla hasta que vino a Madrid a la Audiencia Nacional. En Barcelona donde estuvo antes ten¨ªa fama de fiscal duro. Manten¨ªa las acusaciones de forma apasionada".

"Como an¨¦cdota he de decir que a pesar de que yo le trataba de t¨² ella lo hac¨ªa de usted. Un d¨ªa le coment¨¦ que no me sal¨ªa tratarla de usted y ella me replic¨®: "A m¨ª me pasa lo mismo, no me sale tratarle de t¨² se?or letrado". Era una persona de talante conservador. Do?a Carmen era do?a Carmen.

Tagle, fiscal durante el juicio seguido contra Francisco L¨®pez Ma¨ªllo, conocido como el violador del Eixample, reclam¨® durante la vista, celebrada en mayo de 1985, la necesaria reforma del C¨®digo Penal respecto de las agresiones sexuales, que consider¨® "at¨¢vica" y falsamente proteccionista para las mujeres.