Arquitectos y artistas critican las esculturas de Josep Mar¨ªa Subirachs en la Sagrada Familia

La colocaci¨®n en la llamada fachada de la Pasi¨®n del templo barcelon¨¦s de la Sagrada Familia de los dos primeros grupos escult¨®ricos -La flagelaci¨®n y La crucifixi¨®n - realizados por Josep Mar¨ªa Subirachs ha recrudecido la pol¨¦mica abierta en los c¨ªrculos art¨ªsticos, intelectuales y arquitect¨®nicos barceloneses sobre la pertinencia de las intervenciones en la obra de Gaud¨ª. La mayor parte de los artistas y profesionales consultados por este diario denuncia las esculturas de Subirachs como "totalmente ajenas al esp¨ªritu y al tiempo de Gaud¨ª", como apunta el arquitecto Oriol Bohigas, o reivindica "el derecho de todo artista a la obra inacabada" como recuerda el pintor Frederic Amat. El presidente de la junta constructora del templo, Joan Anton Maragall, por su parte, se?ala: "Las esculturas de Subirachs respetan la idea de Gaud¨ª".

"Para empezar, la decisi¨®n de seguir la construcci¨®n de la Sagrada Familia me parece una barbaridad, un error art¨ªstico, cultural y ciudadano de primer orden, que las esculturas de Subirachs vienen a complicar todav¨ªa m¨¢s", dijo a este diario el arquitecto y urbanista Oriol Bohigas, para quien "la ¨²nica alternativa correcta ser¨ªa hacer utilizables para el p¨²blico los espacios creados por Gaud¨ª y respetar, en lo posible, la obra original".El poeta Joan Brossa opina: 'La Sagrada Familia es una especie de gran bu?uelo, ya lo he dicho otras veces, y me parece muy coherente con la ideolog¨ªa de quienes lo gestionan el hecho de ponerle tantos rabos; lo malo es que, a este paso, el bu?uelo ya ser¨¢ tan grande que se tragar¨¢ lo poco que queda de Gaud¨ª".

El arquitecto Ignasi de Sol¨¢ Morales, autor o participante en obras como la reforma del Liceo o la reconstrucci¨®n del pabell¨®n Mies Van der Rohe de Montjific, se?ala: "Hay una contradicci¨®n evidente entre la obra de Gaud¨ª y la de Subirachs, cuya identidad art¨ªstica procedente de la abstracci¨®n se adapta muy dificultosamente al entorno gaudiniano Por lo dem¨¢s, la construcci¨®n y terminaci¨®n de la Sagrada Familia es un proyecto poco menos que obsoleto".

El cr¨ªtico de arte Rafael San tos Torroella matiza esta opini¨®n al se?alar que "es muy posible que la elecci¨®n de Subirachs fuese la m¨¢s adecuada, porque se ha ido aproximando a una figuraci¨®n y unos motivos que pueden adaptarse a la est¨¦tica gaudiniana, pero el problema es que Gaud¨ª es irrepetible, porque no es posible repetir su esp¨ªritu".

Obra inacabada

Otros artistas y creadores barceloneses se oponen a la intervenci¨®n de Subirachs en la Sagrada Familia y, en general, a la reconstrucci¨®n del templo, desde una ¨®ptica de modernidad y de reivindicaci¨®n de la obra inacabada. "Hay sinfon¨ªas inacabadas, existen obras literarias inacabadas muy apreciadas, ?por qu¨¦ no se puede dejar inacabada la Sagrada Familia", se pregunta el pintor Frederic Amat, quien estuvo incluso tentado de lanzar la iniciativa para un manifiesto internacional de artistas. "El derecho a la obra inacabada me parece consustancial a la actividad de cualquier artista, pero lo m¨¢s grave es que, con este tipo de intervenciones, se vuelve la espalda a la modernidad".

Dentro de la misma l¨ªnea se expresan otros artistas, como Albert R¨¢fols-Casamada, quien destaca "la artificialidad que supone continuar, sin base s¨®lida de planos o referencias a la voluntad del arquitecto, una obra como la de Gaud¨ª". El escultor Agust¨ª Roqu¨¦, sin entrar en juicios de valor, opina: "Dos obras como la de Gaud¨ª y la de Subirachs son dific¨ªlmente armonizables; pienso que la decisi¨®n de encargar las esculturas es m¨¢s ideol¨®gica que art¨ªstica".

El criticismo de artistas y arquitectos contrasta vivamente con el silencio oficial sobre la Sagrada Familia. Instituciones como el Departamento de Patrimonio de la Diputaci¨®n Provincial o la Direcci¨® General del Patrimoni Art¨ªsto de la Generalitat rehusaron hacer comentarios a este diario sobre la situaci¨®n del templo, pese a haber prestado ayudas a la terminaci¨®n de, las obras. Un portavoz de la Generalitat record¨® a este diario: "La Sagrada Familia se rige por un patronato privado; tiene derecho a pedir y recibir subvenciones, pero los miembros de la junta est¨¢n en su derecho de encargar lo que quieran".