Felipe Gonz¨¢lez tiene un mes par¨¢ formar un Gobierno en el que se prev¨¦n pocas caras nuevas
El presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, analiz¨® ayer con los miembros de la Comisi¨®n Ejecutiva Federal del PSOE los resultados de las elecciones legislativas, y la satisfacci¨®n fue la nota predominante en este primer intercambio de opiniones entre la direcci¨®n del PSOE. Sin embargo, constataron lo que ya tem¨ªan desde las elecciones europeas de junio, su creciente p¨¦rdida de apoyo en las grandes ciudades, sobre todo en Madrid. Este retroceso ha provocado que el candidato a la presidencia del Senado por el PSOE, Leopoldo Torres, no haya resultado elegido en las urnas. Al mismo tiempo comienzan a surgir indicios de que Gonz¨¢lez no incorporar¨¢ demasiadas caras nuevas a su nuevo Gobierno, que tiene previsto tomar posesi¨®n el 1 de diciembre.
La primera impresi¨®n de ayer era la de que el candidato a la presidencia del Senado puede ser Juan Jos¨¦ Laborda. Medios socialistas y gubernamentales indicaban que el ministro de Defensa, Narc¨ªs Serra, puede pasar a la cartera de Exteriores, mientras que el equipo de Econom¨ªa se mantendr¨ªa. Otras fuentes se?alan que diplom¨¢ticos de Exteriores oponen cierta resistencia a que Serra se haga cargo del departamento.En palabras de un colaborador del presidente del Gobierno, ayer todav¨ªa se estaba en "clave electoral", por lo que las reflexiones y an¨¢lisis se mantendr¨¢n 48 horas en el ¨¢mbito del resultado de las elecciones, ya que Felipe Gonz¨¢lez no ha hecho ninguna menci¨®n a "nombres propios".
La continuidad del equipo econ¨®mico parece posible, al menos en su gran puntal, Econom¨ªa y Hacienda, siempre seg¨²n fuentes socialistas y en un primer estudio de hip¨®tesis de Gobierno que tambi¨¦n consideraron factibles cambios en Industria, Trabajo y Agricultura.
Carlos Solchaga ha manifestado su deseo de mantenerse en su puesto, por dos razones fundamentales: cree que no ha perdido la confianza de Felipe Gonz¨¢lez, la primera, y que es quien mejor conoce las claves de la integraci¨®n econ¨®mica de Espa?a en la CE, la segunda.
Medios econ¨®micos estiman, sin embargo, que tras la consecuci¨®n de una nueva mayor¨ªa absoluta, Gonz¨¢lez puede retrasar la composici¨®n de un aut¨¦ntico nuevo gabinete hasta mediados del a?o que viene, seg¨²n informa Enric Gonz¨¢lez. Ello supondr¨ªa introducir moment¨¢neamente muy peque?os "retoques".
Medidas de ajuste
Las fuentes informantes indican dos razones para avalar esta tesis: todav¨ªa es muy incipiente el proyecto de reestructuraci¨®n de varios ministerios, que afectar¨ªa muy especialmente al ¨¢rea econ¨®mica, con la fusi¨®n de Industria y Comercio, por un lado, y la creaci¨®n de un Ministerio de Infraestructuras, por otro. A ello se une que determinadas cuestiones de gran importancia est¨¢n a¨²n en elaboraci¨®n en el ¨¢rea econ¨®mica: la adaptaci¨®n de la peseta al Sistema Monetario Europeo, la reforma de la legislaci¨®n fiscal y, sobre todo, las inminentes medidas de ajuste, sean duras o blandas, para corregir los crecientes desequilibrios externos y el rebrote de la inflaci¨®n.
Estos interlocutores indican que ning¨²n ajuste destinado a reducir el consumo del grueso de la poblaci¨®n resulta popular, y ello aconsejar¨ªa el mantenimiento de un equipo curtido al que no importar¨¢ quemarse un poco m¨¢s para dejar el camino desbrozado a un posterior Gabinete destinado a gobernar hasta 1993.
El recambio a Solchaga sugerido en algunos sectores socialistas es el actual ministro de Defensa. Pero ¨¦ste podr¨ªa estar interesado tambi¨¦n en cubrir la baja voluntaria de Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez en Exteriores, un departamento que trabaja en estrech¨ªsima colaboraci¨®n con la Moncloa y que proporciona grandes ocasiones de lucimiento y un desgaste limitado.
Si se mantiene Solchaga, algunos observadores estiman que lo mismo ocurrir¨ªa con su secretario de Estado de Hacienda, Jos¨¦ Borrell, y por las mismas razones: est¨¢ a punto de empezar la campa?a de declaraciones de la renta y el combate contra el dinero negro est¨¢ en pleno fragor. Solchaga y Borrell mantienen algunas diferencias. El segundo, seg¨²n fuentes pr¨®ximas a Borrell, ¨¦ste se muestra m¨¢s sensible a las demandas sociales y menos ortodoxo en la aplicaci¨®n de pol¨ªticas monetarias. Borrell tiene, adem¨¢s, un borr¨®n reciente en su historial: en la Moncloa se considera que filtr¨® prematuramente a la Prensa la oferta definitiva de Gonz¨¢lez a los sindicatos para lograr la concertaci¨®n.
Tal acci¨®n le hizo caer de la lista de hombres de m¨¢xima confianza. Pero Gonz¨¢lez no parece dispuesto a prescindir de un hombre brillante y de gran capacidad de comunicaci¨®n como Borrell, que a medio plazo podr¨ªa ser el ministro de Infraestructuras, o incluso ministro portavoz.
La continuidad del otro segundo de Solchaga, Pedro P¨¦rez, como secretario de Estado de Econom¨ªa resulta discutible, pero su puesto es de menor trascendencia. En cuanto al secretario de Estado de Comercio, Apolonio Ruiz Ligero, en medios pol¨ªticos se considera muy probable que sea sustituido.
Amigo personal
El ministro de Agricultura, Carlos Romero, que ocupa su cargo desde el primer Gobierno socialista, puede estar interesado en cambiar de despacho. Es amigo personal de Felipe Gonz¨¢lez, y ello podr¨ªa procurarle un puesto en la Moncloa, la presidencia del Consejo Econ¨®mico y Social -uno de las grandes asignaturas de la pr¨®xima legislatura-, o incluso el Ministerio de Trabajo, cuyo actual titular, Manuel Chaves, tiene dif¨ªcil la continuidad por las tormentosas relaciones que se ha visto obligado a mantener con los sindicatos.
Carlos Romero dejar¨ªa tras de s¨ª un ministerio que no ha obtenido ¨¦xito en la negociaci¨®n con los sindicatos agrarios y que, sobre todo, no ha adaptado sus estructuras tras la integraci¨®n en la CE, de la que depende en gran medida su pol¨ªtica. Pedro Solbes, actual secretario de Estado para las Relaciones con las Comunidades Europeas, es uno de los nombres que se proporcionan en ¨¢reas socialistas como encargado de acometer esa renovaci¨®n del Ministerio de Agricultura. El otro candidato ser¨ªa Vicente Albero, diputado por Valencia.
La continuidad o no del ministro de Transportes, Jos¨¦ Barrionuevo, es otra de las inc¨®gn¨ªtas y como ¨²nico dato que destacan los interlocutores consultados en su discrepancia con el m¨ªnistro Carlos Solchaga por sus criterios dispares en torno al Tren de Alta Velocidad.
Al amparo de Serra
La zona de mayor inestabilidad en el ¨¢rea econ¨®mica es el Ministerio de Industria y Energ¨ªa. Conviveii en esa zona un ministro, Claudio Aranzadi, de personalidad adaptable y muy pr¨®ximo a Carlos Solchaga, con el presidente del INI, Jorge Mercader, de car¨¢cter in¨¢s firme y muy pr¨®ximo a Narc¨ªs Serra. Mercader ha podido mantenerse gracias al amparo que la ha brindado el Ministerio de Defensa, gran cliente de buen n¨²mero de empresas p¨²blicas. Si Serra mantuviera una influencia destacada en la Moncioa desde un posible nuevo destino en el palacio de Santa Cruz, Mercader podr¨ªa ser el nuevo ministro de Industria. Ello ser¨ªa bien visto por Alfonso Guerra, seg¨²n algunas fuentes pr¨®ximas al vicepresdiente.
Por otro lado, en el PSOE se ha vivido como un golpe muy duro el fracaso de su candidatura en Madrid para el Senado, cuyo exponente m¨¢s claro ha sido el que Leopoldo Torres, nominado ya para presidente del Senado desde la direcci¨®n socialista, no haya conseguido su esca?o de senador, al igual que el hist¨®rico Jos¨¦ Prat. Leopoldo Torres, vicepresidente del Congreso en las dos anteriores legislaturas y persona de gran estima para Felipe Gonz¨¢lez y Alfonso Guerra, cambi¨® su seguro esca?o para el Congreso por Guadalajara para presentarse como senador en Madrid. En medios gubernamentales s¨®lo se citaba un nombre como posible candidato a la presidencia del Senado: Juan Jos¨¦ Laborda, que fue portavoz de los senadores socialistas hasta que se present¨® como candidato a la presidencia de Castilla y Le¨®n.
La reuni¨®n de la comisi¨®n ejecutiva federal del PSOE comenz¨® ayer casi a las seis de la tarde, una vez qUe iban llegando a Madrid sus miembros procedentes de las circunscripciones en las que han hecho campa?a, y finaliz¨® sobre las 19.30. La p¨¦rdida de voto en las grandes ciudades fue el primer an¨¢lisis. La valoraci¨®n del partido se har¨¢ publica hoy en una rueda de prensa.
Los socialistas han perdido tres esca?os en Madrid, dos en Valencia y cuatro en Catalu?a, y tambi¨¦n han perdido esca?os en Arag¨®n, Asturias, Pa¨ªs Vasco y Castilla y Le¨®n. No obstante, est¨¢n satisfechos con los resultados de Canarias, Galicia y Meli?la, donde han ganado un esca?o en cada una de las tres.
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