El 'rock oficial', a la conquista de Europa

El apoyo de las administraciones de algunos pa¨ªses europeos a la m¨²sica joven ha acu?ado un nuevo t¨¦rmino: rock oficial. A trav¨¦s de ayudas a la creaci¨®n, subvenciones a empresas discogr¨¢ficas independientes, publicaci¨®n de libros, apoyos a las giras, construcci¨®n de salas de conciertos y otros est¨ªmulos, estos pa¨ªses intentan defender su m¨²sica aut¨®ctona ante el poder¨ªo econ¨®mico y musical de la industria anglosajona.

Protegido, impulsado y subvencionado por las Administraciones de algunos pa¨ªses, el "rock oficial" tiene en el ministro de Cultura franc¨¦s, Jack Lang, su principal valedor. "Las industrias de la m¨²sica son privadas. Pero ?c¨®mo imaginar que el Estado, que refrenda el desarrollo musical de un pa¨ªs, puede mantenerse al margen? Nuestra pol¨ªtica puede resumirse en una idea: invertir en el desarrollo de la m¨²sica", declar¨® Lang en la ¨²ltima edici¨®n del Mercado Internacional del Disco y la Edici¨®n Musical (MIDEM), celebrada recientemente en Cannes. Y las medidas no se hacen esperar.El Ministerio de Cultura franc¨¦s ha emprendido una pol¨ªtica de creaci¨®n de grandes salas de conciertos, como la Z¨¦nith, en Par¨ªs, adem¨¢s de participar en el equipamiento de 37 peque?os locales de 400 plazas. A trav¨¦s del Fondo de Acci¨®n y de Iniciativas para el Rock (FAIR), impulsa la carrera de algunos artistas y facilitan el acceso a los mecanismos de financiaci¨®n a peque?as empresas discogr¨¢ficas independientes, subvencionando con cinco millones de pesetas, por una sola vez y a fondo perdido, a estos sellos.

Con la creaci¨®n del Centro de Informaci¨®n del Rock y Variedades (CIR) se introduce en el campo de la informaci¨®n con la edici¨®n de libros como Rock y mecenazgo, Profesi¨®n: artista y Profesi¨®n: productor. Y junto a la Secretar¨ªa de Estado de la Formaci¨®n Profesional, ha creado la primera escuela de formaci¨®n de empresarios de rock.

Pero quiz¨¢ la iniciativa m¨¢s sorprendente de Jack Lang ha sido el nombramiento de Bruno Lion como encargado del rock y las variedades en el Ministerio de Cultura franc¨¦s. Lion dispone de un presupuesto de 800 millones de pesetas, aunque se muestra contrario a las subvenciones: "No soy partidario de que el Estado intervenga en el terreno art¨ªstico. Considero que el rock y las variedades tienen una tradici¨®n contestataria y no es sano que se incida en la selecci¨®n art¨ªstica. Pero el programa del FAIR trata de la inserci¨®n profesional de j¨®venes artistas".

Ayudas a las giras

Desde 1981, el Consejo del Rock (ROSA), de Dinamarca, es junto al Stichting Popmuziek, de Holanda, una de las organizaciones m¨¢s antiguas que intentan establecer para el rock una serie de ayudas similares a las establecidas para el jazz o para la m¨²sica cl¨¢sica. La actividad del ROSA contempla ayudas a las giras (entre 400.000 y 900.000 pesetas), conciertos de presentaci¨®n, dietas (entre 16.000 y 20.000 pesetas), publicaci¨®n de discos con artistas nuevos y apoyo log¨ªstico a las giras por el extranjero de grupos daneses.Adem¨¢s de estas iniciativas, el ROSA aplica la imaginaci¨®n para emprender otras actividades, como conciertos en prisiones, y la idea "Un productor en el local de ensayo", que intenta poner en contacto a m¨²sicos profesionales experimentados con j¨®venes aspirantes.

Los artistas han sido los primeros beneficiados de estas medidas proteccionistas. Manu Chao, hijo de espa?oles y cantante y compositor del grupo franc¨¦s Mano Negra, declar¨® a este peri¨®dico durante su reciente estancia en Madrid: "Mantenemos buenas relaciones con Bruno Lion. No estamos de acuerdo con una pol¨ªtica de subvenciones para el rock, pero hemos podido presentar nuestra m¨²sica en Estados Unidos y en Jap¨®n gracias a la ayuda oficial".

Para confirmar su apoyo a la exportaci¨®n de la m¨²sica francesa, Jack Lang declar¨® recientemente que su mayor satisfacci¨®n en 1989 en el campo de la m¨²sica fue el 14 de julio de 1989. "Ese d¨ªa, en Nueva York, los Gipsy Kings y Les Negresses Vertes obtuvieron un gran ¨¦xito y se pudo comprobar que algunos artistas franceses comienzan a interesar en los mercados extranjeros. Es un fen¨®meno nuevo, que intentaremos potenciar este a?o implantando en Nueva York una oficina de industrias musicales francesas'.

Autorregulaci¨®n

Por su parte, la Comisi¨®n Consultiva del Rock y de las Variedades (CCRV) pretende en Francia que estos intentos de autorregulaci¨®n no signifiquen el desarrollo a golpe de subvenci¨®n de una generaci¨®n de artistas funcionarios. La CCRV ha elaborado tambi¨¦n un primer informe que apunta algunas pr¨¢cticas habituales que desnaturalizan la situaci¨®n del mercado.Problemas como la coedici¨®n y la coproducci¨®n de la m¨²sica -seg¨²n la CCRV, "los difusores audiovisuales y todas las personas f¨ªsicas y morales que intervienen en la programaci¨®n musical no deben recibir ventajas monetarias derivadas de la difusi¨®n de la m¨²sica"-, la publicidad en la televisi¨®n y la coproducci¨®n de videoclips -"la explotaci¨®n visual de obras musicales (videoclips) debe ser objeto de compra de derechos, con acuerdos limitados en el tiempo y reservados a cada programa"- abordan una deontolog¨ªa, un c¨®digo de buena conducta que intenta poner orden en un sector con grandes lagunas legislativas.

Estas medidas de ayuda a las m¨²sicas aut¨®ctonas lindan en ocasiones con un proteccionismo radical. En Francia se piensa inclus¨® en establecer un sistema de cuotas para la emisi¨®n de m¨²sica francesa por la radio, ante la alarma de los medios. Jack Lang se ha mostrado moderado al respecto: "Cuando algunos medios optan por pol¨ªticas de programaci¨®n que descartan, sin raz¨®n aparente, segmentos enteros de la m¨²sica actual, tenemos que discutir. Pero creo en el buen sentido, y si bien estas medidas no pueden ser excluidas, son el ¨²ltimo recurso".