Macr¨ª: "Termina el a?o machadiano y comienza el magisterio infinito del poeta"

Con las intervenciones de Oreste Macr¨ª, una de las m¨¢ximas autoridades en Antonio Machado, y de Manuel Alvar, director de la Real Academia Espa?ola, el congreso sobre Machado que se celebra en Tur¨ªn adopt¨® ayer el tono estrictamente acad¨¦mico que ha de mantener hasta la clausura, el jueves. El encuentro de Tur¨ªn, que sigue a uno en Sevilla y a una peregrinaci¨®n a Colliure en el 50? aniversario de la muerte del poeta, clausura el a?o machadiano y da paso al magisterio del poeta, "que ha de ser infinito" seg¨²n Macr¨ª. El congreso fue inaugurado el pasado domingo por el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra.

Quiz¨¢ por ser el ¨²ltimo, el congreso de Tur¨ªn ha propiciado ponencias de mayor ambici¨®n en general que las del congreso de Sevilla, seg¨²n algunos asistentes, entre otros el vicepresidente Alfonso Guerra, que ayer prolong¨® su estancia, en Tur¨ªn una ma?ana para poder escuchar las lecciones de Oreste Macr¨ª y Manuel Alvar.Guerra, que present¨® a Oreste Macr¨ª al no poderlo hacer el editor Jaime Salinas, director de Aguilar, por enfermedad, hab¨ªa comentado a este peri¨®dico la noche anterior que uno de sus objetivos de su viaje a Tur¨ªn ha sido el de intentar poner de acuerdo a los interesados para la edici¨®n en italiano de la obra completa de Machado recopilada por Macr¨ª. Guerra cont¨® que su conocido inter¨¦s por el poeta de Campos de Castilla se debe en buena parte al hecho de que en su colegio en Sevilla existiera una hora de lectura en lugar de la habitual de estudio. Tambi¨¦n coment¨® Guerra que en su inter¨¦s por los c¨¦lebres manuscritos desaparecidos de Machado -y que no son los supuestamente encontrados el a?o pasado por una profesora, ya conocidos por varios machadistas- ha logrado reconstruir lo que debi¨® de ser el itinerario de los escritos, aunque sin haberlos localizado a¨²n.

La masa decadentista

"Machado sac¨® de la masa decandentista el fil¨®n de oro de la aut¨¦ntica poes¨ªa simbolista", dijo en su brillante, densa y exhaustiva ponencia el hispanista Oreste Macr¨ª.En su imposible -por ut¨®pica- ponencia titulada Historia de mi Machado, Macr¨ª explic¨® las ra¨ªces y el paisaje del poeta, es decir, de qu¨¦ antecedentes de la cultura descend¨ªa -desde el krausismo socializante a la influencia de Tolstoi- y con qu¨¦ poetas se emparentaba, no s¨®lo en. Espa?a sino en Europa. Insisti¨® Macr¨ª en el lado m¨ªstico de Machado y refut¨® cualquier sugerencia de pretendida conversi¨®n, sobre la que no existe ning¨²n dato en favor en cambio de una espiritualidad indeterminada y que es del tipo, dijo, "de la que sale la mejor poes¨ªa de este siglo".

En su ponencia, el director de la Real Academia Espa?ola, Manuel Alvar, coment¨® el discurso de ingreso de Machado en la instituci¨®n, que como es sabido no lleg¨® a pronunciar, secuestrado por los avatares de la guerra y luego muerto en los primeros d¨ªas del exilio. El ingreso de Machado fue uno de los acontecimientos relevantes del a?o machadiano.

Material l¨ªrico

Ese discurso de ingreso, dijo Alvar, es un punto de equilibrio en el te¨®rico que Machado quiso ser y el que fue, y en ¨¦l se exponen algunas de las l¨ªneas finales de su pensamiento, como su propuesta de la palabra desnuda en favor de la comunicaci¨®n, incluso a costa de la imagen o de la met¨¢fora por ser ¨¦stas, al fin y al cabo, construcciones intelectuales.El ¨²nico material l¨ªcito que el l¨ªrico maneja es la palabra, pensaba Machado a juicio de Alvar, y al igual que el escultor, debe luchar con ella para darle forma; pero la palabra no basta, pues la idealidad est¨¦tica es la que separa la piedra del m¨¢rmol. "M¨²sica antes que cualquier cosa", dec¨ªa Verlaine.

El acad¨¦mico Carlos Bouso?o explic¨® c¨®mo, desde el romanticismo y hasta el surrealismo, la cultura evoluciona en una l¨ªnea de progresivo ensimismamiento, se pasa de un yo

-concreto a lo que est¨¢ dentro de ese yo, es decir el contenido de la conciencia.

Este proceso es el que da pie a que poetas como Pessoa, Yeats o el mismo Machado lleguen a crear los c¨¦lebres heter¨®nimos -que no son el disfraz de un autor, sino su sustituci¨®n por otra personalidad po¨¦tica- y que deben ser interpretados como una forma de interiorizaci¨®n.

En una apretada ponencia, el poeta y catedr¨¢tico de literatura espa?ola Jorge Urrutia defendi¨® la lectura simbolista de Machado -"al sesgo", como la llamaba ¨¦l- en contra de la lectura biogr¨¢fica, que constituye una de las grandes corrientes en la lectura del poeta y de la que se ha abusado; y en ambos sentidos: se leen en su poes¨ªa datos que se pretenden biogr¨¢ficos y se interpretan hechos de su vida para desentra?ar las poes¨ªas.