La 'contra' se resiste a entregar las armas, pese a los esfuerzos de Chamorro
Buenas palabras, pero pocos avances se consiguieron en Tegucigalpa en la primera reuni¨®n sostenida entre representantes de la Uni¨®n Nacional Opositora (UNO) y la Resistencia Nicarag¨¹ense (RN). Pese a que la presidenta electa de Nicaragua, Violeta Chamorro, envi¨® un mensaje a la contra en el que reconoce a ¨¦sta su "valioso esfuerzo" y el "resultado positivo de sus actividades", los rebeldes antisandinistas se resisten a la desmovilizaci¨®n y a entregar las armas y plantean tales condiciones que oscurecen el pac¨ªfico futuro que abrieron las elecciones del pasado 25 de febrero.
Cuando en un mismo d¨ªa se escucha decir a Daniel Ortega en Managua que desmantelar el Ej¨¦rcito podr¨ªa llevar a Nicaragua a una guerra civil y la contra afirma en Tegucigalpa que para que acceda a entregar las armas hay que desarmar primero a las fuerzas armadas sandinistas, obligatoriamente hay que pensar que la transici¨®n se enfrenta todav¨ªa a riesgos muy serios.La reuni¨®n entre el comandante Rub¨¦n (Oscar Sobalbarro) y el enviado de la UNO, Jaime Cuadra, en presencia de dos representantes del cardenal Miguel Obando y Bravo, concluy¨® con un comunicado en el que la Resistencia Nicarag¨¹ense "garantiza que no ser¨¢ un obst¨¢culo en el proceso de transici¨®n", pero no hubo el m¨¢s m¨ªnimo avance en el proceso de desmovilizaci¨®n.
El comunicado afirma que Jaime Cuadra "trajo un mensaje de Violeta Chamorro en el que reconoce el valioso esfuerzo y resultados positivos de las actividades de la Resistencia Nicarag¨¹ense y a cuyos miembros y familiares ofrece un programa de cooperaci¨®n amplio y efectivo que les permita reintegrarse a la patria para contar con su decisiva cooperaci¨®n en la reconstrucci¨®n nacional".
La contra, sin embargo, no quiere ni hablar de ning¨²n programa que suponga su entrega de armas antes de la toma de posesi¨®n de Violeta Chamorro, el 25 de abril pr¨®ximo.
Un portavoz de RN declar¨® ayer que le hab¨ªan transmitido a la delegaci¨®n de la UNO la posibilidad de que los combatientes antisandinistas sean reubicados en el interior de Nicaragua en zonas previamente desalojadas por el Ej¨¦rcito Popular Sandinista (EPS). En este caso, la contra seguir¨ªa en poder de su armamento.
El escollo del EPS
La decisi¨®n de Resistencia Nicarag¨¹ense de no proceder a su plena desmovilizaci¨®n "hasta que el EPS sea desarmado", como dec¨ªa el comandante Rub¨¦n, es inflexible. Principalmente por razones de seguridad, nadie est¨¢ dispuesto a volver a Nicaragua mientras se mantenga la actual estructura militar. Pero en este aspecto la contra no puede contar s¨®lo con su propia voluntad sino con sus posibilidades reales de supervivencia como ej¨¦rcito insurgente.
La ayuda humanitaria concedida por Estados Unidos se le acab¨® oficialmente a la contra el pasado mes de febrero. Gracias a las reventas de algunos productos -en el supermercado de la min¨²scula ciudad de Danl¨ª se puede encontrar aceite vegetal o mantequilla norteamericana- y al ahorro, cuenta todav¨ªa con medios de subsistencia por unos dos meses m¨¢s. Pasado ese tiempo resultar¨ªa sorprendente la aprobaci¨®n de una nueva ayuda econ¨®mica norteamericana, a menos que ¨¦sta fuese para facilitar la reubicaci¨®n de los combatientes y para impedir que se conviertan en simples bandoleros.
En todo este proceso resulta pues decisivo el papel de Estados Unidos que, seg¨²n las fuentes diplom¨¢ticas consultadas en Tegucigalpa, no ha quedado todav¨ªa absolutamente claro. Por un lado, los norteamericanos han declarado p¨²blicamente su posici¨®n a favor de la desmovilizaci¨®n. Pero, por otro, no parecen haber presionado a la contra con tanta decisi¨®n como para que los rebeldes sientan que est¨¢n abandonados.
Al t¨¦rmino de la reuni¨®n de ayer con los representantes de la Uni¨®n Nacional Opositora, un alto dirigente de la contra coment¨® con iron¨ªa que las dos partes se hab¨ªan entendido muy bien, sin tensiones, y que el ¨²nico lugar donde estaban tensos por lo que est¨¢ ocurriendo en Nicaragua es en la Embajada de Estados Unidos. Este peque?o incidente viene a dar la raz¨®n a los que creen que, desde la sustituci¨®n de Enrique Berm¨²dez por el joven comandante Franklin, la Resistencia Nicarag¨¹ense ha adquirido una cierta vida propia. Otras fuentes insisten, sin embargo, en que la contra es una cortina de humo de los norteamericanos y que, a trav¨¦s de la RN, es la Administraci¨®n de Washington la que presiona para que el Ej¨¦rcito sandinista sea desarmado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.