El M-19 entrega sus armas "por la paz de Colombia"
PILAR LOZANO ENVIADA ESPECIAL "El M-19, en manos de su comandante hace dejaci¨®n de la ¨²ltima arma que tienen su poder", dijo Carlos Pizarro, jefe m¨¢ximo de este momento insurgente. Luego desenfund¨® su pistola de 9 mil¨ªmetros y la envolvi¨® en un pa?uelo de franjas amarillas, azules y rojas, los tres colores de la bandera nacional. "Por la paz, por la dignidad de Colombia", agreg¨® con voz en¨¦rgica, y, dej¨® el arma que le acompa?¨® durante 20 a?os de vida clandestina sobre un mont¨®n de fusiles, colocados poco antes por la tropa sobre a mesa cubierta con la bandera colombiana.
Fue un acto sencillo cargado de emotividad que signific¨® que este movimiento guerrillero, conocido internacionalmente por la espectacularidad de sus acciones, deja atr¨¢s 16 a?os de lucha armada para iniciar el camino de la lucha pol¨ªtica."Dejar las armas es m¨¢s dif¨ªcil que cualquier combate", advirti¨® Pizarro a su tropa antes de iniciar el acto simb¨®lico. A las 16.30 del jueves (hora local), el ¨²ltimo contingente armado del M-19, formado por 45 oficiales, realiz¨®, ante la Prensa nacional y extranjera, su ¨²ltima formaci¨®n militar.
Entre estos guerrilleros rigurosamente uniformados estaba Victoria, la manchega que durante dos a?os y medio combati¨® en las filas de la organizaci¨®n. Ella fue la encargada de izar por ¨²ltima vez el pabell¨®n rojo, azul y blanco de esta agrupaci¨®n insurgente que rob¨® 1.000 fusiles en un cant¨®n militar, que tom¨® una embajada repleta de diplom¨¢ticos y que en noviembre de 1985 protagoniz¨® la tr¨¢gica toma del Palacio de Justicia en Bogot¨¢.
'Ciudadela de la paz'
El acto simb¨®lico tuvo como escenario Santo Domingo, un peque?o caser¨ªo ind¨ªgena empotrado en las monta?as de la provincia del Cauca, al sur del pa¨ªs. El pa¨ªs conoce hoy este caser¨ªo como la ciudadela de la paz. Desde hace un a?o, cuando el proceso de paz entre el M19 y el Gobierno, iniciado el 10 de enero de 1989, entr¨® en su segunda etapa, est¨¢n acantonados all¨ª todos los frentes de este grupo alzado en armas. Como observadores de la entrega de armamento asistieron seis delegados de la Internacional Soci¨¢lista.
Desde -el mi¨¦rcoles pasado, los muchachos, como se Rama popularmente a los guerrilleros, se dedicaron a quemar la munici¨®n que les sobr¨¦ al acabar los a?os de guerra. En l¨ªnea de fuego tiraron al blanco por unidades hasta vaciar completamente los cargadores de sus fusiles. El estall¨ªdo de granadas retumb¨® tambi¨¦n en esta peque?a poblaci¨®n protegida por altas cumbres. En helic¨®pteros, que viajaron durante todo el s¨¢bado y el domingo, fueron transportados a Cafi. La idea es fundir las armas y levantar con ellas un monumento a la paz.
El jueves, el ¨²ltimo contingente del M-19 en armas, por escuadras de cinco en cinco hombres, cumpli¨® la ¨²ltima orden dada por el coronel Nicol¨¢s: "Por la paz, por Colombia, ?dejad las armas!". Descolgaron el fusil que por a?os llevaron al hombro, desanudaron de su cuello la pa?oleta tricolor que distingui¨® a su movimiento, envolvieron con ella el arma y la dejaron sobre una mesa. Muchos lloraron.
Al finalizar el acto de entrega, Pizarro se dirigi¨® a su tropa, se abraz¨® a algunos de sus compa?eros de lucha y luego busc¨® refugio, solo, en una caseta de madera y llor¨® durante largos minutos. "Siento nostalgia, pero tengo la certeza de estar haciendo lo justo para el pa¨ªs", dijo a este diario. ?Qu¨¦ significa el arma que acaba de dejar? "A nivel personal, una vida. Pero tambi¨¦n significa la vida de hombres y mujeres que murieron por conseguir un poco de democracia para Colombia".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.