El Gobierno anuncia la creaci¨®n de un marco estable de tarifas telef¨®nicas que no superen el IPC

El Consejo de Ministros aprob¨® ayer una subida media de las tarifas telef¨®nicas del 7,3% para 1990. En el nuevo cuadro tarifario de Telef¨®nica destaca el incremento de las llamadas urbanas, que sit¨²a el paso de contador en 3,90 pesetas, frente a las 3,50 actuales, lo que supone una subida del 11,43%. Asimismo, la cuota de conexi¨®n sube desde las actuales 11.000 pesetas a 21.000. En el caso de unidades familiares con ingresos inferiores a 600.000 pesetas anuales, la instalaci¨®n del tel¨¦fono, que ahora costaba 5.500 pesetas, se sit¨²a en 6.500 con la subida. El acuerdo del Gobierno contempla tambi¨¦n la creaci¨®n de un nuevo marco tarifario estable que realmente constituye un nuevo hito en las relaciones de Telef¨®nica con el Estado.

Por primera vez en los ¨²ltimos diez a?os, Telef¨®nica ha conseguido una subida de tarifas por encima de la previsi¨®n del ?ndice de Precios al Consumo (IPC), que este a?o es del 5,7%. Sin embargo, el acuerdo del Consejo de Ministros no va a sentar precedente, por lo menos seg¨²n se deduce de las propias declaraciones oficiales: "El Gobierno tiene previsto estudiar la creaci¨®n de un marco estable de tarifas telef¨®nicas, mediante el establcimiento de un mecanismo de revisi¨®n para que sus incrementos medios en los pr¨®ximos a?os no superen el ¨ªndice de Precios al Consumo", afirmaba ayer en una nota p¨²blica el Ministerio del Portavoz del Gobierno.El reconocimiento de este futuro marco tarifario -similar al que se aprob¨® para el sector el¨¦ctrico- satisface uno de los grandes objetivos de Telef¨®nica y ser¨¢ materializado previsiblemente en el contexto del futuro contrato que est¨¢ siendo ultimado. El contrato regular¨¢ las nuevas relaciones entre la compa?¨ªa y el Estado, representado en esta ocasi¨®n por el Ministerio de Transportes, que dirige Jos¨¦ Barrionuevo.

Apoyo del Gobierno

Con independencia de las expectativas de futuro que se abren para la empresa que gestiona el monopolio, la subida de este a?o constituye en s¨ª misma un respaldo evidente a la pol¨ªtica de reestructuraci¨®n de precios que Telef¨®nica viene persiguiendo desde hace a?os. En efecto, la gran meta de Telef¨®nica consiste en aumentar significativamente las tarifas urbanas, reduciendo en compensaci¨®n directa las de car¨¢cter interurbano y, sobre todo, las internacionales.

La raz¨®n de este proceso es f¨¢cil de comprender si se tiene en cuenta que las llamadas urbanas, a¨²n cuando constituyen el principal segmento de tr¨¢fico, tan s¨®lo cubre un 20% de la cifra de ingresos por operaciones de la compa?¨ªa.

Ello es debido a su bajo precio que contrasta, por otro lado, con el coste de producci¨®n. Cada llamada urbana le cuesta a Telef¨®nica nueve pesetas y la compa?¨ªa la cobra a 3,50 pesetas, que ser¨¢n 3,90 a partir de ahora.

En cambio, las llamadas de larga distancia son en Espa?a mucho m¨¢s caras que en otros pa¨ªses, lo que est¨¢ provocando una p¨¦rdida de negocio en los tr¨¢ficos internacionales que ser¨¢ a¨²n mayor si la Comunidad Europea intensifica sus proyectos de liberalizaci¨®n dentro del sector de las telecomunicaciones. Ante esta eventualidad, Telef¨®nica puede quedarse reducida a cubrir en solitario el servicio local, sobre todo el urbano, perdiendo la primac¨ªa que el monopolio le otorga ahora en los servicios internacionales, donde la competencia puede ser terrible en unos a?os. Por ello, ahora se ha decidido mantener invariable el precio de las llamadas internacionales.

Debate pol¨ªtico

En cualquier caso, todo este an¨¢lisis ha provocado un intenso debate en las relaciones mantenidas durante los ¨²ltimos a?os por Telef¨®nica y el Gobierno. El saldo hab¨ªa sido siempre el mismo; esto es, una negativa rotunda a la reestructuraci¨®n, que ten¨ªa su principal opositor en el Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda. Este a?o las tornas han cambiado y pese al repunte inflacionista actual, el Ejecutivo ha apoyado los deseos de Telef¨®nica que, a buen seguro, tendr¨¢n incidencia directa en el IPC. No en vano, de todo el cuadro tarifario de Telef¨®nica, s¨®lo las ]lamadas urbanas inciden en la elaboraci¨®n del indicador general de precios.

A efectos de IPC, la subida que ha de tenerse en cuenta no es la media del 7,3% sino el 11,43% de incremento en las llamadas urbanas. Por lo dem¨¢s, las tarifas interurbanas (entre 100 y 400 kil¨®metros) aumentan un 7%, mientras que las de larga distancia (m¨¢s de 400 kil¨®metros) bajan un 4,44%. De acuerdo con el cuadro adjunto, las llamadas perif¨¦ricas, cursadas desde los n¨²cleos urbanos a sus ciudades-dormitorio, se reducen en un 10,01%, a la vez que se suprime la tarifa colindante, lo que supone un abaratamiento del 67,74% para las llamadas realizadas entre dos zonas perif¨¦ricas de un mismo n¨²cleo urbano (Getafe y Alcobendas, por poner un ejemplo).

Bajar la demanda

Por lo dem¨¢s, la cuota de conexi¨®n que se paga en el momento de la instalaci¨®n de un telef¨®no pasa a 21.000 pesetas en una subida r¨¦cord, que supone pr¨¢cticamente doblar el precio actual. El Gobierno ayuda de esta manera a reducir la demanda telef¨®nica que ha obligado a la compa?¨ªa a un importante esfuerzo inversor, sin que ello se traduzca realmente en una mejora significativa del servicio p¨²blico.

Para el caso de las unidades familiares con rentas anuales inferiores a las 600.000 pesetas, la cuota de conexi¨®n que ahora costaba 5.500 pesetas pasa a 6.500. La cuota de abono mensual tambi¨¦n sube, desde 920 a 1.000 pesetas, mientras que la cuota de abono de equipos terminales permanece invariable.