Viaje de ida y vuelta

Carburos Met¨¢licos, la empresa qu¨ªmica catalana, ha vivido ocho meses de Intensa actividad accionarial y ha visto c¨®mo uno de sus principales socios, Banesto, tras perder su inter¨¦s por la empresa, ha reconsiderado su actitud para dirigir los destinos de la misma como principal accionista. La historia de este cambio de estrategia tiene diversas valoraciones y pasa por los singulares vericuetos de las negociaciones financieras de alto nivel.

Corr¨ªan los meses preveraniegos del pasado a?o cuando Banesto, que pose¨ªa un 18% del capital de Carburos -el segundo paquete despu¨¦s del 24,5% de la multinacional Air Product-, decidi¨® desprenderse de sus acciones. Tras la ruptura de la fusi¨®n con el Banco Central, Banesto afrontaba la emisi¨®n de deuda subordinada, y para mejorar el atractivo de esta operaci¨®n la vincul¨® a una de warrants (opci¨®n de compra) sobre el 18% de Carburos.Jacques Hachuel, financiero y amigo de Conde, adquiere esa opci¨®n de compra por- algo m¨¢s de 3.000 millones, pasando a convertirse en titular in p¨¦ctore de la participaci¨®n de Banesto en Carburos. En realidad, la materializaci¨®n de la compra corri¨® a cargo del grupo Euris, participado por H-Capital, el holding con el que opera Jacques Hachuel en Espa?a. Sin embargo, en aquel momento nadie consideraba la inversi¨®n como algo estable, por lo que comenz¨® una ronda negociadora que ten¨ªa por objeto traspasar los warrants a Air Products, el socio natural de la empresa qu¨ªmica.

El problema fue que el socio americano de Carburos rechaz¨® rotundamente el precio de 14.000 pesetas por warrant que ped¨ªa Euris y que estaba muy por encima de las 10.000 pesetas que entonces val¨ªan en bolsa la acciones de la empresa. Los planes comenzaban a torcerse, por lo que Jacques Hachuel ofreci¨® su participaci¨®n a otras empresas competidoras de Air Products, tales comoAir Liquide, BOC y Uni¨®n Carbide. El saldo de estas negociaciones fue tambi¨¦n negativo en todos los casos.Los bancosLleg¨® diciembre y con una bolsa a la baja la operaci¨®n de venta de la opci¨®n de compra se hizo ya impracticable. Los restantes bancos espa?oles en el capital -el Santander con el 10%, el Central con otro l0%% y el Hispano con un 3%- se negaron tambi¨¦n a la invitaci¨®n de Hachuel de repartirse los warrants. Y, por si fuera poco, la comisi¨®n de valores advirti¨® que estos derechos de compra deber¨ªan contabilizarse como acciones, dando lugar a. la necesidad de una OPA si eran comprados por alguno de los accionistas de la empresa. Ante esta situaci¨®n, Hachuel declar¨® en enero su disposici¨®n a congelar la conversi¨®n de los warrants sobre Carburos. El financiero daba por terminada as¨ª la aventura de Carburos, provocando un giro radical en la estrategia de Banesto.

En efecto, en febrero, repentinamente, Conde descubre que la empresa es muy rentable, por lo que decidi¨®a recomprar los warrants. Banesto pag¨® a Euris 3.000 millones, m¨¢s sus intereses, recuperando su posici¨®n en el capital de Carburos. La huida hacia adelante se ha completado. despu¨¦s con la compra de la participaci¨®n que pose¨ªa en la empresa qu¨ªmica el Banco Santander.

Esta ¨²ltima operaci¨®n situ¨® al banco presidido por Conde en una posici¨®n delicada ante la legislaci¨®n sobre la OPA. No en vano la participaci¨®n del Banco Santander, unida a la de Banesto, superaba con creces el l¨ªmite legal del 25%.

El problema qued¨® subsanado de la mano de una nueva empresa, surgida de la noche a la ma?ana, domiciliada en las Antillas holandesas bajo el nombre de Heathmoore y que apareci¨® como titular del 7,25% del capital de Carburos. Gracias a ello, la OPA, hasta que las autoridades burs¨¢tiles no digan lo contrario, ha sido eludida.La segunda parte de la operaci¨®n es la reciente designaci¨®n de Rafael P¨¦rez Escolar al frente de Carburos para sustituir a Ramiro Cervera, quien en siete a?os en la empresa ha multiplicado por 21 la inversi¨®n que ten¨ªa all¨ª el banco. Poco ha importado la gesti¨®n de Cervera. El ex presidente de Carburos no era de la confianza de Conde, quien intenta reforzar la posici¨®n de Banesto en la empresa con ejecutivos y consejeros afines, como el propio Hachuel, Abaltua y Pastor. Aunque el intento haya fracasado, Mario Conde ha pagado el favor al financiero hispano-argentino, quien, en definitiva, es el que ha perdido la ocasi¨®n de conseguir una buena plusval¨ªa.